TEJINA DE TEGUESTE
TOMADO
DEL LIBRO INEDITO:
EL
MENCEYATO DE TEGUESTE: APUNTES PARA SU HISTORIA
CAPITULO
y
VIII
(PARA
ESTA SEPARATA)
Eduardo Pedro García Rodríguez
Centrándonos
en la fiesta de los corazones en Tejina
Declarada Bien de Interés Cultural de Ámbito Local en el BOC. de 23 de
Noviembre de 2000, dejemos que sea su mayor y mejor valedor,
“Los
primeros datos encontrados haciendo referencia a la fiesta de Tejina
se hallan en el Diario de Juan Primo de
La influencia que la organización eclesiástica
tenía en la celebración de cualquier acto puede comprobarse en diversos
documentos. Así, en 1781 el Obispo de Canarias Joaquín de Herrera, envía
una carta exhortando a los fieles de la parroquia de Tejina
a pagar puntualmente sus diezmos para culto a Dios y mantenimiento de sus
ministros, y alimentar a los pobres, maldiciendo a quien no lo haga. El cura párroco
era el encargado de proporcionar al Ayuntamiento la lista de mozos en edad
adecuada para el reclutamiento y también llegó a ser maestro del pueblo.
La desamortización de Mendizábal, a partir de 1830, transforma los antiguos
mandatos que obligaban a pagar diezmos y primicias a
A partir de finales del siglo XIX
se encuentran citas en publicaciones periódicas que aluden a la fiesta de San
Bartolomé en Tejina. Así, la
primera que hemos hallado es en el mes de agosto de 1890 cuando El Reformista
publica una nota de prensa sobre la festividad de San Bartolomé, “durante los
días 23 al 24 de Agosto”, aludiendo a la verbena como número
importante de la fiesta de Tejina.
Debía ser bastante popular y esperada en aquella época ya que son varias
las referencias encontradas a lo largo de la última década del siglo pasado.
En uno de ellos se publica lo siguiente: “Según nos notician de Tejina,
la fiesta que anualmente celebra aquella localidad a su santo patrono San
Bartolomé se verificará este año con más ostentación que los anteriores
pues los vecinos de aquel pago no desperdician medio alguno para hacer
sobresalir su festividad por cima de las que se celebran en los pueblos
comarcanos”.
La fiesta duraba dos días; en ocasiones
sólo uno, y a veces tres. A finales del siglo XIX y comienzos del XX, no
se tenía en cuenta el día de la semana para la celebración, pudiéndose
plantear la hipótesis de que la fecha de los actos festivos fuese propuesta por
La procesión del Santo “por los
lugares acostumbrados”, se celebraba normalmente la víspera y/o el día
principal de la fiesta: “La noche del 23 saldrá procesionalmente la imagen
del Santo Apóstol escoltado por la tradicional librea con su capitán al
frente, banda de música y la primitiva danza”.
En las citas consultadas se hace mención
a un acto denominado pandorga, una Cabalgata con gigantes, cabezudos, tambores y
luminarias, relacionándola habitualmente con la librea y la danza o, en
ocasiones acompañando al Santo (“Habrá librea, comedia, pandorga para la que
se han encargado gigantes y otros artefactos”).
Citando a Juan Primo de
La lucha canaria estaba presente en la
mayoría de los festejos populares de las Islas. En Tejina se incluía en el programa de actos en honor a San Bartolomé,
aunque no muy regularmente. Una prueba de la calidad y destreza de los
luchadores tejineros es que solían ser invitados a importantes luchadas en
otros pueblos. Destaca, en este sentido, el desafío entre Brito y Juan Alejo
que ocurrió en el año 1903, durante las fiestas del Cristo de
Entre las características de los actos
programados se pueden destacar la diversidad, popularidad y originalidad de los
mismos.
Eran habituales las “corridas de
sortijas” a caballo, en bicicleta y en automóvil, a las que eran invitados jóvenes
jinetes y ciclistas de otras localidades. La costumbre era que las señoritas de
la localidad y alrededores regalaran para la ocasión bonitas cintas pintadas o
bordadas.
También se organizaban por iniciativa
popular comedias al aire libre, las cuales perduraron hasta bien entrado el
siglo XX, aunque ya no exclusivamente coincidente con las fiestas patronales,
realizándose en el Teatro Cine Unión, en el Complejo Parroquial, o en
cualquier salón apropiado.
La cucaña constituía uno de los juegos
más divertidos: se plantaba un poste cilíndrico en la plaza que era
embadurnado con grasa y en la base superior se colocaba un premio, que solía
ser una moneda. La persona que llegaba arriba, principalmente muchachos, se
quedaba con la moneda.
Las carreras de sacos podían
clasificarse como juegos o “regocijos populares”.
Una atracción de moda en la época, que
despertaba la admiración de cuantos concurrían a las fiestas populares de
cualquier pueblo o ciudad, era la elevación de globos aerostáticos o
“indirigibles”. En Tejina se
constatan varias oportunidades en las que se incluye en el programa este espectáculo.
Otros actos muy concurridos eran las
verbenas, que en varias ocasiones se realizaban “con iluminación a la
veneciana” (farolillos y gas acetileno), y los bailes, organizados en la
plaza, “casas particulares” o salones “adornados al efecto”. Se
consideraban, además, números con raigambre las parrandas, siempre presentes
en las fiestas populares.
Como
es fácil suponer, el lugar donde se desarrollaban todos estos actos era
En 1904 igualmente se publica lo
siguiente en referencia a la fiesta de San Bartolomé de Tejina: “El 24 habrá
función religiosa y procesión. La plaza estará engalanada con arcos llenos de
los acostumbrados panes en forma de corazón, y no faltarán los bailes de la
tierra”. Esta cita corresponde con la primera referencia cronológica
alusiva a la fabricación en Tejina
de alguna manifestación relacionada con los Corazones. La colocación de arcos
en las plazas de los pueblos fue una costumbre generalizada durante las
celebraciones festeras, que ha perdurado hasta nuestros días. Sin
embargo, sí resulta significativo que la fiesta de Tejina contara con espacio
en los periódicos desde el año 1890, sin que hasta 1910 se hiciera mención
a los Corazones, tal como son entendidos hoy.
Las ofrendas con flores, frutos y ramas
son comunes en las fiestas patronales de los pueblos, no sólo de Tenerife y su
provincia, sino en toda la geografía de nuestra región.
Como ejemplos considérense la fiesta de
Sin embargo, ninguna de estas
manifestaciones populares, íntimamente relacionadas con el sentimiento
religioso, resulta tan peculiar, expresiva y espectacular como los Corazones de Tejina.
· (Aso. Corazones de Tejina)
Expediente
de declamación de Bien de Interés Cultural (BIC) para los corazones de Tejina
Año
1997.
Solicitud de incoación ante el Excmo. Cabildo Insular de Tenerife (ECIT)
por la AAVV Las Tres Calles de Tejina.
Año
1999.
Solicitud por la AAVV Las Tres Calles de Tejina
ante el ECIT para que se retome la incoación del citado expediente.
13-3-2000.
Declaración
de cesión de los derechos derivados de la resolución del expediente de la AAVV
Las Tres Calles a la Asociación Corazones de Tejina.
19-5-2000.
Solicitud al Excmo. Ayuntamiento de La Laguna (ALL) sobre acuerdo o
pronunciamiento del Pleno sobre la Fiesta de San Bartolomé de Tejina.
21-11-2000.
Solicitud de certificación por el ECIT de la fecha de inicio del expediente.
21-11-2000.
Solicitud de personación en el expediente por la Asociación Corazones de Tejina.
10-1-2001.
Publicación en el Boletín Oficial de Canarias (BOC) de la incoación del
expediente
9-2-2001.
Envío al ECIT de reportaje fotográfico sobre los Corazones, así como
1.184 firmas de apoyo recogidas, para incluir en el expediente.
23-7-2001.
El ECIT abre plazo de exposición pública y de presentación de
documentos sobre el expediente.
20-8-2001.
Presentación del libro “Fiesta de San Bartolomé de Tejina” para incluir en el expediente.
12-3-2002.
Consulta telefónica solicitando información sobre el estado del expediente.
13-6-2002.
Notificación del ECIT de la remisión del expediente a la Direc. Gral de
Patrimonio del GAC para su aprobación definitiva y posterior publicación en el
BOC.
El día 25
de noviembre de 2005 en el Castillo del Camino Largo (
Conceder a
los Corazones de Tejina el
Reconocimiento como Distinguidos del Centro de Iniciativas y Turismo del
Nordeste de Tenerife del año 2005, y la entrega de
La
lucha por la recuperación del Ayuntamiento
Durante
las últimas décadas un importante sector del pueblo tejinero ha estado
luchando por recuperar el Ayuntamiento constitucional perdido el 28 de enero de
1850 en que por razones económicas derivadas del crak de la cochinilla fue
absorbido por Laguna.
La
segregación de la localidad de Tejina no
es un debate nuevo. Esta reivindicación histórica se trató por primera vez en
un pleno del Ayuntamiento de
El
pleno del Ayuntamiento de
“La
petición de segregación del pueblo lagunero de Tejina
que ha solicitado
La asociación
dio un primer paso intentando redactar el expediente de segregación con los
datos económicos sobre Tejina del
propio Ayuntamiento de
Diputado
del Común, quien hizo valer
Un año
después, en 2002, el Cabildo, apoyándose en un informe del catedrático
Luciano Parejo, también rechazaba la segregación por entender que “no esta
suficientemente acreditado en el procedimiento que el nuevo municipio resultante
vaya a tener una capacidad de gestión municipal, no ya igual a la previamente
existente, sino incluso mayor o incrementada”.
Tras dicho
varapalo, la asociación decide remitir el expediente al TSJC, para lo que buscó
un técnico que avalara la viabilidad económica y jurídica del proyecto, basándose
para ello en que el ayuntamiento "había sellado los datos presentados por
la asociación y porque las leyes económicas y jurídicas veían viable el
proyecto”.
Así, los
argumentos del Cabildo en contra de la segregación fueron rebatidos en un
informe por otro catedrático de derecho Administrativo, Tomás Ramón Fernández,
quien resaltó que la resolución de
El informe
de este catedrático avala que “la suficiencia de los recursos del núcleo de Tejina
debe considerarse acreditada en los términos de racionalidad probabilidad que
exige la jurisprudencia del Tribunal Supremo. Por ello, la argumentación
utilizada por el Cabildo para negar la segregación tiene graves defectos, por
lo que no puede considerarse objetivamente fundada e incurre en la arbitrariedad
que categóricamente prohíbe el artículo 9.3 de
Otro de los
informes con los que cuenta la asociación es del catedrático de Hacienda Pública
y Sistemas Fiscales de
Caramés Viéitez
estima que el proyecto de los promotores de la segregación “presenta un buen
nivel de autonomía financiera (39,00%), índice que se superior a los
municipios de
La asociación
resalta que, según dicho informe, el nuevo ayuntamiento sería viable “porque
su economía financiera alcanza el 54,50 por ciento y el ahorro neto el 16,88
por ciento”. Resalta, asimismo, que “la segregación de Tejina
no repercute de modo relevante en el municipio matriz, no afecta a su
viabilidad económico financiera, y cumple con la legislación vigente”, y añade
que el presupuesto de ingresos y gastos garantiza la prestación adecuada de los
servicios públicos municipales que le son obligatorios, por lo que no sería
necesaria la asignación presupuestaria prevista en
Gran
peso económico
En lo que
respecta a la historia, recuerda que desde el siglo XVI Tejina aparece como núcleo de población singular, con iglesia,
ermitas, pósito, plaza y, sobre todo, conciencia de identidad singular.
Tejina
aparece en los primeros documentos históricos de la isla de
Tenerife. Fray Alonso de Espinosa habla en su obra, en unos escritos que datan
de 1594, de que Tejina compite con Tegueste
el Nuevo y el Viejo en aspectos relacionados con el cultivo y la producción de
la viña.
En 1813
funcionaba ya el Ayuntamiento de Tejina,
cuya sede estaba en el piso alto del Pósito. La agregación del consistorio
tejinero al de la ciudad de
Milán
en Tejina
Como
consecuencia de la invasión y conquista castellana, la lengua guanche fue
cercenada y los topónimos se castellanizaron; no obstante, la mayoría de ellos
siguen denunciando su origen autóctono, como Garachico, Taoro, Tahodio,
Tejina, Tacoronte, Tegueste, Chasna, Adeje etc. etc.
Una
incógnita en el Achimenceyato de Tejina
la constituye el origen del topónimo Milán, como es sabido, muchos de los
nombres castellanos aplicados a determinadas zonas o territorios de nuestra isla
fueron tomados de los nombres de los colonos datados, llamados topónimos
patronímicos, que derivan de nombres propios de persona, como por ejemplo
Ruiz Gómez,
Ello
nos hace suponer que el topónimo Milán, que abarca un amplio territorio de Tejina
pudo haber sido aplicado por la posesión del mismo de algunos de los
primeros colonos datados o afincados en el terreno y que debió tener cierta
importancia en la incipiente sociedad colonial, pues no sólo dio nombre a
dichos terrenos sino que demás lo dio a un tramo importante del barranco del
agua de Diyos-castellanizado como barranco del agua de Dios- a partir de la
altura de donde se encuentra el templo católico de la parroquia de San Bartolomé.
Es
sabido que cuando algunos de los colonos decidían construir una ermita,
generalmente la ponían bajo la advocación de algún santo de su devoción,
pero principalmente lo hacían en honor de la onomástica de su fundador, cuando
eran propietarios de abundantes tierras en la zona.
Indagando
en las datas de Tenerife por si figura algún datado en Tegueste
o Tejina apellidado Milan, nos
encontramos con un individuo de este nombre al que se le concede tardíamente,
el 30 de mayo de 1511, cinco fanegadas de tierra en pago de San Lázaro en
Aguere, pago perteneciente al menceyato de Tegueste,
pero no figura ninguna otra data a su nombre, aunque si comprando algunas
tierras como veremos.
Ello
nos hace suponer que de tratarse de nuestro personaje quien dio nombre a Milan,
debió ser por compra de las tierras, ya que por esas fechas estaba superada la
condición de no poder vender las tierras recibidas
hasta pasado cinco años de la concesión de las mismas. Por otra parte,
es el único individuo con este nombre recogido en la documentación colonial
generada durante el siglo XVI en la isla Chinech
(Tenerife).
En
el censo efectuado por el Cabildo colonial de
En
sesión del Cabildo de 7 de marzo de 1511, se puede leer: “A Bartolomé de Milán le dieron licencia para
tomar de los pinos caídos
las tozas que hubiese menester y envió dos hombres a
buscarlas y no las halló; pide le den licencia para que lo corte. Que juren los hombres que no lo hallaron y
que si así fuere le dan licencia para dos
pinos.”
Este colono arribado a la isla después de la invasión
y conquista, era mercader, especializado en paños como buen milanés, de sus
actividades mercantiles dejó testimonio en los protocolos del escribano Hernán
Guerra de los cuales trascribimos algunos:
El 26 de diciembre de 1510 al fol. 564 r.: Bernaldino
Justiniano, est., dice que Bartolomé de Milán, mercader, tiene preso en la cárcel
pública del Concejo a Alvaro Rodrigue,
maestro de azúcar, por 4.500 mrs., que le debe por un contrato público
ejecutorio; ahora, por hacer buena obra y bien a Alvaro Rodríguez
le pide que lo deje salir, con la condición de que le da una
cédula de Bernaldino Justiniano aceptada por micer Cosme para
pagar los mrs., a mediado del mes de diciembre de 1511, que tiene
que dar aceptada a final de enero de 1511. Ts.: Francisco Jiménez
y Alonso Méndez, ests.—Bernaldino Justiniano.
En 3 de enero de 1511 al fol. 3
r., se recoge: Bartolomé de Milán,
v°., reconoce deber a Pedro Afonso, portugués, v°., 28 doblas por unas casas y una atahona, a pagar en dineros
de contado, en marzo. Ts.: Juan Galán, Fernán Esteban Cárdeno
y Fernando Tacoronte.—Bartolomé de Milán. En
12 de mayo de 1511, Pedro Afonso se dio por pagado de esta
deuda. Ts.: Diego Amarillo y Alonso Manuel. Ruiz
y Gonzalo Yanes, por precio de 29 doblas de oro, las cuales
recibe. Ts.: Alonso López, Fernán Esteban Cárdeno y Juan Galán,
vs y ests.—Fernán Esteban Cárdeno.
Al fol. 418 r, de fecha 17 de
enero de 1511, Bartolomé de Milán,
mercader, v°., otorga poder general a Manuel de Gibraleón. Ts.: Lope Fernández y Juan Galán.—Bartolomé
de Milán.
En 8 de febrero de 1511 al fol.
84 r.: Sebastián Páez, esc. púb.,
traspasa a Juan Jácome de Carminatis,
mercader, v°., 5.500 mrs. que le debe Fernando Yanes por un contrato,
otorgado ante Hernán Guerra, escr. púb., que debía a él
y a Bartolomé de Milán por ropa. Ts.: Gonzalo Muñoz y Mateo
Juan Carbón.—Sebastián Páez. Ese mismo año el 15 de febrero al fol. 111
r., el clérigo invasor y colono portugués Ruy
Gómez, v°., reconoce deber a Bartolomé de Milán 4.400 mrs.
por ropa que le compró; los pagará en dineros de contado o
en tanto azúcar blanco, a 300 mrs. la arroba, en esta villa de San
Cristóbal, a final de julio. Ts.: Juan Galán, Fernán Esteban Cárdeno.—Ruy
Gómez.
El 18 de febrero de 1511 al fol.
114 r.: Juan
de Armas, v°., reconoce deber a Bartolomé de Milán, mercader, 3.000 mrs. por
ropa que le compró; los pagará en dineros
de contado o en tanto azúcar blanco, a 300 mrs. la arroba, en
el mes de junio, en esta villa de San Cristóbal. Ts.: Juan de Castro y Juan
Franco.—Sin firma.
El gomero Pero Negrín, al fol.
117 r., de fecha 19 de febrero de 1511, reconoce
deber a Bartolomé de Milán, mercader,
3.800 mrs. por ropa que le compró, a pagar en dineros de contado,
a final del mes de julio. Ts.: Fernán Esteban Cárdeno, Diego
de Torres, vs. y ests.—Pedro Negrín. En las mismas fecha al fol. 118 r.
Diego de Torres, v°., reconoce deber a
Bartolomé de Milán 3.400 mrs. por ropa que le compró, a pagar en dineros de
contado, a final del mes de julio.
Ts.: Fernán Esteban Cárdeno y Juan
Galán.—Fernán Esteban Cárdeno. El mismo
día y al fol. 119 r., Juan
Rodríguez, maestro de azúcar, v°., reconoce deber a Bartolomé
de Milán 4 arrobas de azúcar, o su justo valor, porque se los prestó, a pagar en octubre, en esta villa de San Cristóbal. Ts.:
Diego Fernández, Luis Fernández, Juan García y Juan de
Fol. 136 r., de 3 de marzo de
1511, Juan López, deudor, y Jorge Báez,
zapatero, fiador, reconocen deber a
Bartolomé de Milán 2.800 mrs. por ropa que le compró López;
los pagarán en dineros de contado o en tanto azúcar, puesto
en esta villa de San Cristóbal, a como valiere de contado, a final del mes de agosto. Ts.: Jácome de Inarte, Juan López Franco.—Juan
López. En 29 de abril de 1511, al fol. 206 r.,
Alonso Márquez y Rodrigo Álvarez,
vs., reconocen deber a Bartolomé de
Milán, mercader, v°., 4.263 mrs. por bayón que le compraron,
a pagar en dineros de contado o en tanto azúcar blanco,
a como valiere, en el mes de julio. Ts. Cristóbal Carrasco, Fernán Esteban Cárdeno y Juan Galán, vs. y ests.—Alonso Márquez
y Rodrigo Álvarez. En 23 de agosto del mismo año al fol. 359 r., Pero
de Vera, v°., reconoce deber a Bartolomé de Milán, v°., 1.300
mrs. por ropa que le compró; los pagará en dineros de contado,
en el mes de julio de 1512. Ts.: Alonso López y Fernán Esteban
Cárdeno, ests.—Por no saber, Fernán Esteban Cárdeno.
Tomás de Morales, v°., con fecha 23 de agosto de
1511, reconoce deber a Bartolomé de Milán, v°., 1.367 mrs. por ropa que le compró; los pagará en dineros de contado y no en otra cosa, en el mes de julio
de 1512. Ts.: Alonso López y Fernán
Esteban Cárdeno, ests.—Por no saber, Fernán Esteban Cárdeno. En 11 de
diciembre de 1511, al fol. 705 r.: Pero
de Vera, v°., debe a Bartolomé de Milán, mercader, 3.284 mrs.
por ropa que le compró; le pagará en dineros de contado, por
San Juan de junio de 1512. Hipoteca un esclavo que se llama Rodrigo, de color
negro. Ts.: Pero Fernández y Fernán Esteban.— Fernán
Esteban. En las mismas fechas al fol. 706 r.: Pero Hernández de las Islas reconoce deber a Bartolomé de Milán,
mercader, 847 mrs., por ropa que le
compró; le pagará en dineros de
contado, por el día de San Juan de junio de 1512. Ts.:
Juan Donaire y Fernán Esteban, vs. y ests.—Fernán Esteban. Jerónimo Hernández, v°., debe a Bartolomé de Milán, v°., 2.231
mrs. por ropa que recibió Catalina Fernández, mujer de Sebastián
Ormán; le pagará en dineros de contado por San Juan de junio de 1512. Ts.: Alonso Velázquez, Fernán Esteban Cárdeno
y Pero Estévez, vs. y ests.—Fernán Esteban Cárdeno.
En
18 de diciemgbre de 1511 al fol. 727 r.: Juan Afonso, trabajador, v°., debe a Bartolomé
de Milán, mercader, 2.620 mrs. por ropa que
le compró; le pagará en dineros de contado, a
primero de agosto de 1512. Ts.: Alonso López y Gonzalo Espino, ests.—Alonso López. El mismo mes y año el día 19,
al fol. 730 r., el gomero, Pero
Negrín, v°., debe a Bartolomé de Milán 3.245 mrs., por ropa
que le compró, a pagar en dineros de contado, por San Juan
de junio de 1512. Ts.: Fernán Esteban y Juan Galán.—Pero Negrín.
(Fernando Clavijo).
La bibliografía y fuentes consultadas están
recogidas en el libro, de los que estos capítulos son una separata especial
para
www.elcanarios.net
Capítulos anteriores:
Menceyato
de Tegueste - Tejina (VII)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (VI)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (V)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (IV)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (III)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (II)
Menceyato
de Tegueste - Tejina (I)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (y IX)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (VIII)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (VII)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (VI)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (V)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (IV)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (III)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (II)
Menceyato
de Tegueste - Valle de Guerra (I)