Soberanía Alimentaria IV
Política Forestal
Rukaden Ait Anaga
Incendio
forestal en el Norte de Tenerife
Lo primero que
debe tenerse claro, es cuanta tierra de la que ahora mismo está improductiva y
en el pasado se usaba, de alguna forma, en las políticas agrícolas y
ganaderas. Una cosa debe ser el mantenimiento de nuestra actividad ganadera
tradicional y otra muy distinta, intentar diseñar una ganadería como la de
nuestros antepasados, que sería ahora mismo imposible de acometer y repercutiría
de forma muy negativa sobre nuestros ecosistemas, bueno, lo poco que queda de
ellos y que debemos Proteger.
El resto del
suelo, y los actuales Montes y Espacios, y el Suelo Rústico no Urbanizable en
general, los de Especial Protección, etc., debe planificarse una Recuperación
de los diferentes Ecosistemas Primigenios, a partir del Bosque Termófilo hasta
el Pinar, de forma que donde hubo bosque, haya bosque. Debe erradicarse la flora
introducida de nuestra superficie forestal, la actual y la futura, y recluirla
donde debe estar, en los jardines públicos y en los Botánicos, pero nunca
asilvestrada; A esto y de forma paralela, políticas de repoblación por pisos
de vegetación, respetando la distribución natural de la misma, aunque aquí
resulta algo difícil, pues en zonas se entremezclan especies de distintas
alturas.
Repoblar es una
cosa sencilla; Hacer Monte es algo más complicado. Es cuestión de una atención
y cuidados dilatados en el tiempo, en varias generaciones, no es cuestión de
plantar y regar cada cuatro años o así. Es una labor continua de trabajos de
Silvicultura hasta que el árbol o arbusto sea lo suficientemente fuerte como
para “dejarlo libremente a su albur”, es decir, de sobrevivir por sí mismo.
Especial cuidado se debe tener también con el riesgo de Incendios Forestales,
porque más monte significa más riego de incendio, y más excelentes pastizales
puede significar también más peligro, pues los incendios más peligrosos son
los que parten desde medianías, porque van cogiendo cada vez más fuerza en el
matorral, enviando una masa de aire caliente por delante, capaz de secar la
humedad del bosque, de forma que cuando el fuego llega a su linde, se encuentra
una enorme cantidad de combustible cuasi seco que arde rápidamente, absorbiendo
más oxígeno, calentando más el combustible circundante, en una reacción en
cadena difícil de romper.
El caso es que
estos trabajos Silvícolas y la protección contra incendios alrededor de las vías
de comunicación y asentamientos humanos, lugares de concentración de
visitantes, y limpieza y conservación de todo esto, junto a la erradicación de
la flora invasora, produce una enorme cantidad de materia vegetal que, mezclados
con los detritus procedentes de la ganadería, forman un precioso estiércol; [¡Uy,
perdón! Quise decir moderno abono orgánico] Perfectamente adecuado para
sustituir aunque sea en parte los abonos químicos en nuestra Política Agraria.
Acrecentar y
Regenerar nuestra cubierta forestal allá donde fue degradada y se puede
recuperar, no solo estaría beneficiando a nuestra Agricultura/Ganadería y al
Acuífero Subterráneo. Además estaríamos facilitando que aquellas escasas y
pequeñas Reservas Naturales de Especial Protección, esos pequeños reductos de
cuasi virginidad que todavía quedan y que son precisas y preciosas muestras de
nuestra pasada Grandeza Natural, se vayan extendiendo y se hagan más puras, y
eso significa asegurar la Biodiversidad animal y vegetal, genética. Y todo esto
se puede autofinanciar con Proyectos y Estudios de todo tipo a nivel
Internacional con una presencia de estudiosos cuanto más restringida, más
cara, porque un Laboratorio Natural de este calibre solo podía encontrarse en
el Bosque más primigenio de Laurisilva o Bosque Termófilo y Sabinar y Pinar o
Alta montaña. Y porque un turismo especializado y poco masivo, pero “bien
exprimido, pero también bien atendido, no solo para que vuelvan, sino para que
nos sirvan de voceros en sus lugares de residencia, que es la mejor publicidad.
Eso es factible, claro que no de la noche a la mañana, lleva su tiempo [Más de
cuatro años] para apreciar los cambios.
Hay todo un riquísimo potencial turístico
encerrado en una adecuada gestión forestal y agrícola ganadera, en estos
tiempos en que la mayor parte de la gente busca cosa más Naturales y novedosas
al clásico de Sol, Playa y borrachera, aunque aquí, éste sea la única oferta
generalizada, pues esto es lo más cercano a lo Tropical que pueden permitirse
la mayor parte de los europeos. Esto sería invertir en una Política de Turismo
de un volumen controlable, de un índice económico Medio-Alto aunque se conviva
con el tradicional puesto que lo hecho, hecho está y ya solo queda remodelar,
reacondicionar, etc. Pero de eso ya hablaré en otro momento.
3
Abril 2015
Anteriores: