Soberanía Alimentaria (IV)

Política Hidrológica [II]

 

 

El efecto esponja de nuestros montes

 

Rukaden Ait Anaga

   

 

Decía en mi anterior escrito[1], que nuestro Acuífero Subterráneo depende de la absorción del agua que nuestros montes captan de las nubes; Al mismo tiempo, la cubierta vegetal, por pequeño que sea su porte, hace que el agua de lluvia se filtre en el terreno hasta llegar a las grandes bolsas de agua subterránea.

 

Pongamos un ejemplo fácil de entender:

 

Todos conocemos una esponja de baño, con sus múltiples agujeritos; Nuestros montes y en general toda la capa vegetal [Bien robándosela a las nubes como los montes, bien absorbiendo la lluvia como el resto de vegetales], son como una esponja. Son un escudo protector que fija el terreno para que la lluvia y los elementos no se lleven la tierra, pues la lluvia pierde su violencia contra los vegetales, por lo que el agua “llega mansa al suelo, más o menos lentamente”, dando tiempo a que una buena parte sea absorbida por la tierra, cosa que se facilita bastante al deslizarse por los troncos y raíces”. ¿Y el agua, una vez que llega a la roca? Pues sigue bajando, más lentamente, pero igual que en una de nuestras tradicionales destiladeras, ni más ni menos... Hasta que llega a rocas verdaderamente impermeables o capas arcillosas, donde se acumula [¿Sabían que nuestros campesinos pobres, en tierras arcillosas o de masapé, simplemente excavaban un hoyo grande y recubrían las paredes y el fondo con el mismo masapé arcilloso y se hacían un pequeño estanque?]

 

Entonces, es fácil comprender que una parte importante de una Política Hidrológica sensata, sería por un lado recuperar en lo posible, en aquellos lugares que no sean, o no puedan ser aprovechados para otros fines, nuestro antiguo esplendor forestal, especialmente en lo que fueron los dominios de la Laurisilva, que como se ha demostrado científicamente hasta la saciedad, favorece la captación de agua de las nubes [El mítico Garoé no es Leyenda, es Historia viva], y regenerar nuestros montes en el sentido de tratar de invertir el proceso de degeneración que han seguido; Esto significa que la Política Forestal debe estar en sintonía con la Hidrológica y no en contradicción. Si queremos contar con un Acuífero sano, una vez que conocemos el mecanismo por el que funciona, como nuestra intención es conservarlo y mejorarlo, lo menos que puede hacerse es asegurarnos que el proceso de captación aumente, y que el de filtrado se produzca en condiciones de efectividad, es decir, favoreciendo el filtrado mediante la extensión de una buena capa vegetal, tanto cultivada como silvestre. Y, claro está, que se desarrolle en unas condiciones sanitarias y fitosanitarias seguras, para lo cual es imprescindible no solo canalizar todas las aguas fecales sino un adecuado control y uso de productos fitosanitarios, abonos químicos, etc. Además, no son incompatibles el uso de nuevos dispositivos “captadores de agua” en las zonas de influencia del mar de nubes, pues camuflados entre la vegetación se reduce el impacto visual de los mismos y se contribuye a la captación del líquido elemento.

 

Al mismo tiempo, se necesita una red de almacenaje “en las zonas de aprovechamiento agrícola-ganadero y forestal [Lucha contra incendios forestales]; Para la correcta rentabilización de Recursos, y la reducción del impacto paisajístico negativo, estas infraestructuras estarían enteramente soterradas o enterradas, perfectamente camufladas en el entorno, y unidas mediante las correspondientes canalizaciones de distribución.

 

En tanto en cuanto que la Tierra en su conjunto, incluida nuestra parte chiquita, es un enorme ecosistema vivo, en la que todas sus partes están interrelacionadas y dependientes unas de otras, por lo tanto y en consecuencia, nuestra medidas, las Políticas Sectoriales de un futuro Gobierno de Canarias Libre, deben estar igualmente relacionadas y depender unas de otras, si queremos generar nuestra propia comida sin morirnos de hambre o terminar de cargarnos esta Tierra que es Nuestra, que aunque chiquita en territorio, es grande en todo lo demás.

 

31 Marzo 2015

 

Desde la Vieja Fortaleza

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