EFEMERIDES
CANARIAS
UNA HISTORIA RESUMIDA DE CANARIAS
PERÍODO COLONIAL, DÉCADA 1761-1770
CAPÍTULO
-II-
Guayre
Adarguma *
1762. Dos corsarios de nacionalidad inglesa intentaron sacar los barcos
surtos en Puerto de Naos, e hicieron fuego al castillo al cual obligaron a
callar luego, cuyo fuerte aunque no nos lo explica
Los enemigos desembarcaron cien hombres, temerosos de
quienes, se huyeron los vecinos del puerto con lo que quiera que había,
igualmente que los barcos los cuales parece que por dentro de los mismos islotes
se les hubieron de escapar por entre las manos.
Este pasaje hace ver, que el
puente antiguo para comunicarse la isla a la
citada fortaleza era también levadizo, y pudieron las naves pasar por el canalizo natural que conduce desde
el Puerto de Naos al del Arrecife escapándose
por la salida o barra del poniente de este último. El desenlace de dicha
invasión fue de esta manera.
El capitán del denominado «Lord Anson», satisfecho
del descuido que reinaba en la defensa y del terror que había
causado a los naturales, se fondeó debajo del propio castillo de S. Gabriel.
Mas Dn. Carlos Monfort, teniente
coronel catalán avecindado en Lanzarote, se fue solo al islote de dicha fortaleza, se ocultó detrás de una peña de
la orilla, y apuntó con tal acierto, que mató de un fusilazo al capitán del
corsario que venía muy ufano en su chalupa a tierra. Este revés dio
temor a los enemigos, y se retiraron desde luego. La historia
hace mención del hecho aunque se le olvidó o no supo el Sr, Viera, el
nombre del sujeto escarmentador de los ingleses. El hijo de Monfort nombrado Dn
Mateo, Administrador de Tabacos de la isla, conservaba
con esmero el fusil afortunado que contribuyó eficazmente
a libertar la patria de un saqueo. (J.
Álvarez Rixo, 1982:46)
1762.
Entra en la historia de
1762.
Entra en la historia Taxo actual municipio de Valle Santiago, isla Chinech
(Tenerife) un guanche alzado. personaje legendario, Pedro Correa, un pastor de
Las Manchas que se enfrentó al colono Señor
del Valle, don Fernando Alonso del Hoyo Solórzano, por dar amparo en su casa
al cura del Valle de Santiago José Antonio de León Ferrer, en su
apresurada huida hacia Guía de Isora, al temer por su vida.
1762.
La ruptura de relaciones de las Españas con
1762.
El respeto que imponía los cañones de los castillos. Impedían en ocasiones a
los corsarios que azotaban el tráfico entre islas el acercarse demasiado al
puerto. Durante la guerra entre ingleses y españoles de 1762-63, los canarios
perdimos menos por los ataques directos, que indirectamente, en la toma de La
Habana (1762), se perdieron 4 navíos canarios y varios más fueron apresados en
el tornaviaje, en el mismo año, un corsario persiguió a una embarcación española
hasta que ésta logró ponerse al abrigo y amparo de la artillería del fuerte
de San Cristóbal en Añazu n Chinet (Santa Cruz de Tenerife).
1762.
En Hipalam (San Sebastián)
El
final del XVIII marca los inicios del desmantelamiento en la isla de La Gomera
del régimen señorial por la agitación promulgada por la pequeña clase social
caciquil terrateniente, que contempla el desigual desarrollo de la colonia entre
las islas denominadas señoriales y las de realengo, debido a los fuertes
impedimentos fiscales impuestos por los colonos señores feudales. En este
proceso Hermigua no estuvo al margen pues en 1762 se produce un motín antiseñorial
alentado por un amplio espectro de la sociedad criolla de la época. No sabemos
si como resultado de este hecho se resuelve conceder una pedanía, pero lo si
queda claro es que el régimen señorial tocaba a su fin, consumándose en el 26
de mayo de 1812 con la creación de los ayuntamientos. Estos se ratifican
fundamentalmente sobre la base parroquial, si bien en el caso de Hermigua, la
Encarnación segrega la parte de Agulo.
El
poder local pasa a manos de las principales familias de criollos, instaurándose
el sistema de domino conocido como caciquismo. Se declaran públicos los montes
y aguas de anterior propiedad señorial- asignando esta última a la tierra -
pudiéndose dar un nuevo impulso roturador que permite ampliar los viñedos e
instalar tuneras (chumberas) en los terrenos marginales, con la finalidad de
producir cochinilla. Esta situación de bonanza no llega a completar el siglo
XIX, de nuevo la crisis del viñedo y la aparición de las anilinas siembran el
pesimismo.
1762.
El Monarca español Carlos III dispone en el Buen Retiro de Madrid (España), en
junio de 1762, establecer en Añazu n Chinet (Santa Cruz de Tenerife),
“capital de esas islas", la primera Administración de Correos en la
colonia Canaria. Nombró a Pedro María Martín, primer jefe de este Oficio
dependiente de la Metrópoli, pero subordinado al Capitán General en la
colonia, superior jerárquico en todas las Reales Rentas. El jabeque Nuestra
Señora del Rosario, en calidad de correo oficial, dio fondo en la bahía añazera
(santacrucera) el diez de agosto de aquel año, inaugurando, al tiempo que lo
clausuraba, tal servicio, pues la novedad no prosperó por culpa de lo elevado
de los portes a pagar por los receptores de cartas, ya que entonces se estima de
mal gusto abonar el franqueo quienes las escribían.
1762.
La repentina guerra de la metrópoli
contra la Gran Bretaña, en ocasión que estaban las Canarias en la mayor
escasez de trigo, acabó de acongojar el ánimo de aquel buen jefe. Hallábase
con una real orden (1762) para embargar las embarcaciones inglesas que
estuviesen surtas en los puertos; y considerando que ellas habían conducido las
primeras partidas de granos que se compraban en el Norte con masa del caudal del
pósito, vecinos y comerciantes de Tenerife, se halló embarazado sobre lo que
debía ejecutar. Consultó al ayuntamiento; y, por acuerdo de éste, representó
al rey la infeliz constitución de la provincia, la falta de pan, la
imposibilidad de transportar trigo de España, las porciones que se esperaban
del Norte y el ejemplar de la guerra de 1741, en que se permitió la entrada de
víveres de Inglaterra bajo de banderas neutrales. [ ...]
Que
el valor de géneros y víveres se sacase en vinos y frutos del país. y que el
trigo del rey se vendiese allí al precio corriente, aunque saliese más caro
por sus costos. [...] (Viera y Clavijo, 1991)
1762.
En la isla de La Gomera se produce un alzamiento social contra el Conde por
parte de muchos vecinos, que tras reunirse en Hermigua, asaltaron el Castillo de
los Remedios, apoderándose de la artillería y la pólvora, y expulsando al
administrador del Conde. Ante la oposición de los militares destacados en la
isla, los sublevados decidieron abandonar su intento.
1762.
El colono Cristóbal Graf, natural de Rippermonde, naturalizado español por
real carta y establecido en Eguerew (La Laguna.) Pasó a Tamaránt (Gran
Canaria,) donde se estableció y casó con Antonia Huerta. Más tarde pasó a
las Indias, donde se avecindó en Curasao. En el Santo Oficio se le instruyó
causa por bigamia, por haber casado segunda vez en Curasao, en vida de su
primera mujer. En la Inquisición de Canarias se le formó causa en 1762 pero
parece que él no sobrevivió mucho.
1762.
El monarca de la metrópoli Carlos III, vino a encauzar debidamente el traslado
de la correspondencia, desde puertos de la metrópoli, para establecer en
"Santa Cruz de Tenerife, capital de esas islas", la primera
Administración de Correos en la colonia de Canarias. Nombró a Pedro María
Martín, primer jefe de este Oficio dependiente de la Corona, pero subordinado
al Capitán General, superior jerárquico en todas las Reales Rentas. El jabeque
Nuestra Señora del Rosario, en calidad de correo oficial, dio fondo en
la bahía añazera (santacrucera) el diez de agosto de aquel año, inaugurando,
al tiempo que lo clausuraba, tal servicio, pues la novedad no prosperó por
culpa de lo elevado de los portes a pagar por los receptores de cartas, ya que
entonces se estima de mal gusto abonar el franqueo quienes las escribían.
1762
Enero 1. Concurri al
Cabildo Gral.
para la
eleccion de
empleos en
el año,
i huvo
varias protextas
con motivo
de ellas,
i se
presentó una
Prov.on de
la Aud.a
paraque en
las elecciones
por Zedulas
no se
expresase el
nombre del
que las
daba, ni
hizieron otras
señales, para que
se vinicsse
en conocim.to
del que
las escribia. (Lope Antonio
de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Enero 8. Haviendo
llegado en
8 de
Enero de
este año
por una
Embarcacion de
España el
rumor de que
se declararia luego
la Guerra
con los
Ingleses, se
verifico luego
por los dectos,
pues un
corsario apreso
un .Barco
de los
que trafican
entre estas
Islas. Hasta
principio del
Mes de
Febrero no
llego la
orden para
declararla, como
en efecto
se declaró luego, i
se comenzaron
á reparar
los Castillos
i Fortificaciones.
El Ayuntamiento
tambien comenzo
á prevenir
Municiones para
los Castillos
de su
dotacion, i
demas Milicias,
i el
diez de
Mayo hizo
señalamiento de
los oficias,
que habian
de estár
al cuidado de
cada Regidor,
en caso de
que invadiesen
esta Isla:
a mi
cargo se
pusieron las Municiones,
i hizo
instrucion del
modo de
distribuiras. La
Isla se
hallaba en.un
estado muy
misserrible á
causa de
faltar los
mantenimientos, i
se vio
en la
precission d:
ocurrir á
S. M.
suplicandole se
sirviesse permitir
algun comercio
con las
Embarcaciones Inglesas
que, con Vandera
neutral tragessen
comestibles, i
S. M.
se digno
concederlo, atendiendo
á la
fidelidad de
los Isleños,
i que aun
se pudiessen
admitir bajo
Vandera enemiga,
i mandó traer
de sus
Reynos seis
mil fan.s
de Trigo
haziendo la
gracia de
que pudiessen
venderlas á
un precio
moderado, siendo
el costo
restante á
expensas de
su Real
Hacienda, i
hizo tambien
gracia de Cañones,
Escopetas, Polvora,
i otras
Municiones para
la Defenza.
No obstante
todas estas
concesiones, se
hallan las
Islas muy
infelices; pues los Ingleses
apresan los
Navios, q.e
vienen a ellas, retardan
el comercio
de la
America, persiguen
á los
Barquitos de
su trafico,
i han
tenido los
corsarios el
atrevimiento de seguir
las Embarcaciones,
aun bajo
la artilleria
de los Castillos. (Lope
Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Enero 8. Llegó
embarcacion de
España, en
que vino
el Titulo
de Cor.
del Regimiento
de Forasteros,
vacante por
muerte de
Dn Melchor
Prieto del
Hoyo, á
Dn Roberto
de la
Hanti Reg.ar
perp’ de
esta Isla
Then.te Cor. del
mismo -Regimiento.
En
9 de
Enero murio
en el
Lugar de
Sta Cruz
el Exc.mo
Sor Dn
Antonio de
Benavides Then.te
Gral. de
los R.s
Exercitos, cuyos
servicios en
la Guerra,
Aen tpo.
del Reynndo
del Sor
Dn Phelipe
V, i
servicio de
otros distintos
empleos con
un extraordinario
desinteres, le conduxeron
á dho.
grado. Retirose
ya cargado
de años á
esta Isla,
como que
era su
Patria, hizo
habitacion suya
el Hospital
de Sta
Cruz, i
gastó todo
su caudal
en socorrer
á los
Pobres, i
murio como
tal, i
amortajado en
el habito del
Patriarcha Sn Francisco
le enterraron
en la
Pa: rroq. de
dho Lugar
sin mas
aparatos que
los precisos
pa yua1y.l particular. ( Fue
su Bautismo
en la
Matanza en
15 de
Diciembre de
l778, hijo
del Ayud.te
Andres de
Benavides, y
de Maria Molina.) (Lope
Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Febrero 23. Murio
en el
Pago de
Geneto jurisdiccion
de esta
Ciudad Dn
Roberto de
la Hanty
Cor.1 del Regim.to
de Forasteros,
Reg.or perp.
De esta Isla,
Castellano del
Castillo pral.,
- Familiar
del Sto
Oficio, i
Syndico gral.
de la
Provincia de
Sn Francisco.
Era natural
de Irlanda,
i casó
en esta
Isla con
Dña. Cathnlina
Mxharty tambien
oriunda de
Irlanda, de
cuyo matrimonio deja
dos hijos
Dn Francisco
i Dn
Bernardo menores
de 22 años.
La
Fortuna favorecio
A dho.
Dn Roberto
hasta conducirle
a los
empleos mas
honorificos de
la Isla;
pero casi
que no
le permitio gozarlos,
pues la
fatal Parca
corto el
hilo de
su vida quando
parece estaba
á la
mitad de
su carrera. (Lope Antonio de
la Guerra y Peña. 1762)
1762
Marzo 28. En el archipiélago, enviándose
personal de la metrópoli quedaron
en Gran Canaria dos compañías de Artillería de 120 hombres cada una.
1762
Junio 27. Llegó
al Puerto
de Sta
Cruz un Navio
de Guerra
que venia por
los caudales
del Rey: en
él vino
el Then.te
Cor. D.n
Agustin Gabriel
del Castillo
Ruis de
Vergara natural
de la
Isla de
Canaria por
Correg.or i
Cap.n á
Guerra de
esta i
la de
la Palma.
En Prim. de
Julio por
la tarde
subio á
esta Ciudad:
salimos a caballo algunos
Regidores á
acompañarlo: fue
á visitár las dos
Parroquias, i
despues á
la Casa
que le
tenia prevenida
el Cabildo,
i al
dia siguiente
presentó en
él sus
Despachos, i se le
recibio. Su antecessor el
Sor Dn
Martin Joseph
de Roxas, se retiró a
su Teruel,
bajo a Sta Cruz para
embarcarse el 12 de
Julio con la Sra
su Muger
6 hijos:
acompañaronle muchas
personas de distincion
de esta, Ciudad:
embarcose el 13 para España,
i se, dice
le darán
el Corregim.to de
Xereaz. Fue
muy. desínteresado, por lo
que no le sobró caudal del
Corregim.i solo
se le
notó de
demassiado compassivo, por
lo que en el
tpo. de su govierno no
se azotó, ni ahorcó á
persona alguna,
haviendose cometido males dignos
de Castigo, i
comprehendidose á los
delinqüentes.
1762
Junio 30. Al tiempo que
yo me
hallaba en
el Castillo
pral., fue
precisso hazer
de fuego
á un
Navio de
30 cañones,
que, bajo
la artilleria
de dho. castillo
persiguio una
Polaca Española,
que entraba cargada
de Trigo. (Lope Antonio de la
Guerra y Peña. 1762)
1762
Agosto 7. Se presentó
el Liz.do
Dn Joseph
Maria Bueno
Abog.” de
los R.s
consejos natural
de la
Isla del
Hierro su
titulo de
Then.te gral.
de Correg.or
de sta,
i obedecido
le recibio
el Cabildo,
en el
que izo juramento
acostumbrado. Fue
su antecessor
el Dr
Dn Salvador
Ant.’ Morera
nat. del Lugar de
Sta Cruz,
que fue afecto
á dho.
Cabildo. (Lope Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Agosto 8. Entró
Embarcacion de
España con
la orden para que
se declarasse
la Guerra
con los
Portugueses, por
ser enemigos
declarados de ntro.
Rey, i
haver, que
se declararon,
mutilado, i
hecho otras
extorcionees á
los Españoles,
qué se
hallaban en su dominios.
Promulgose en
esta Capital
el 17
de dho.
mes concediendo termino
de 15
dias, para q.e
se apro[n]tassen
á salir
los portugueses,
que se
hallassen en
la Isla,
á excepcion
de los
que tuviessen
oficios mecanices,
que estos
pudieran permanecer sin
que se les molestasse.
En
la citada
Embarcacion llegó
Dn Pedro
Maria Martin
con el
encargo de
administrar el
correo, que S. M. havia dispuesto
establecer en
estas Islas
interin de
la Guerra,
manteniendo un Javeque, que
cada poco tiempo passase a
los Reynos de España,
i tener
con facilidad
en aquel
continente noticias
utiles á
la presente estacion de
Guerra. Mucho
displicentó á
los Isleños
este establecimiento, i
mas en un tpõ:
tan calamitoso, i con unos
portes demasiado gravosos.
Las Islas
por medio
de sus Ayuntam.tos,
suplicaron de él,
i propusieron arbitrios
para la facilidad
de conducir
las noticias
sin este gravamen. (Lope
Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Septiembre 18. El
Sabado 18 de Septiembre por
la tarde
fui al
Lugar de Tacoronte acompañando
á la
c;l.ra D.”
Isabel Botello, á mi hermana,
que fueron
para gozar de la
Fiesta del
Sor
de los Dolores, que se haze en el
Conv.to de Sn Agustin: Hospedamosnos
(sic) en una casa de sus
cercanias, goze aquella noche
un poco del Patio, vi
la furicion
de las Tribunas de
la casa del
Cor.1 D.n
Francisco de
Castro Patrono del
conv.to, de
la que
tambien vi
1a Procession. Por la tarde
nos bolvimos
á esta
Ciudad, ti
tpo. que
por In
mucha gente qut: venia de la
funcion estaba el
camino divertido,
como lo
es qualq.ra concurso, i á esta db.-
funcion vá mucho,
assi ‘de
esta Ciudad,
como de
todos los Lugares
circunvecinos. Es
la Prim.”
ocacion que
asisto á
ella, i
todo el
viage fue
con felicidad. (Lope Antonio
de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Septiembre 21. […]La
Gomera estuvo mucho tiempo sujeta aun fatal astro que la agitaba y la hacía
mirar la independencia como su sumo bien. Ya en enero de 1699 hubo algunos
principios de inquietud. En diciembre de 1743 sofocó otra el cristianísimo don
Diego Bueno, y previó desde entonces, como quien no ignoraba la raíz de aquel
mal, que no tardará en encenderse mayor llama. Verificóse esta profecía política
en 1762.
Había
en Canarias un hombre, revestido de un empleo muy importante, sombrío,
turbulento, de cortas miras, versado en las cavilaciones forenses y que, siendo
buen calculador y mal estadista, creía ver la hacienda del rey en todas las
haciendas. No estaba éste muy bien con las islas del señorío y, por
consiguiente, se lisonjeaba sería un gran servicio agregarlas a la corona. Este
modo de pensar de Tenerife hizo fortuna en la Gomera, tanto que algunos espíritus
alucinados, al abrigo de aquella autoridad, trataron de perfeccionar la
imprudente obra de la sublevación o, por mejor decir, la obra de perpetuar la
calamidad pública.
Empezaron
las juntas preparatorias y conciliábulos en las playas de Hermigua, antigua
oficina de alborotos y proyectos de desobediencia. Dispúsose desde luego el
modo de apoderarse del castillo principal, disparar los cañones con voz de
enemigos, batir los tambores, conmover las gentes. El señorío, quintos y demás
derechos, esto es, la herencia de sus padres, se había de sustraer al conde,
dando por sentado que para esto sería bastante proclamarse únicos vasallos del
rey, pues tal era la moda de España. El administrador del estado moriría o,
por lo menos, se le embarcaría "en manga de camisa". Todos los
empleos se proveerían en otras personas, y se acudiría a la corte para obtener
la aprobación. Se convocaría un cabildo general; se elegiría personero; se
acopiarían víveres para sustentar en la Villa los vecinos de los demás
lugares.
Reventó
la mina en los días 21 y 22 de septiembre [1762]. Ya la fortaleza estaba
ganada. Quitan al condestable las llaves del almacén de la pólvora y cargan un
cañón de modo que se pueda oír hasta Adeje. levántase el tumulto. Hácese un
cabildo general y precipitado en el ayuntamiento. Llevan al alcalde de forzado.
Nombran un personero eclesiástico por aclamación. Don Miguel Echaverría,
administrador del conde, se escapa y sale de la isla. En fin, aquellos
"hombres de bigote", como ellos se llamaban, presentan en el
ayuntamiento una memoria de agravios contra el conde, contenidos en 16 capítulos.
Que
el conde compraba la orchilla barata y vendía cara. Que la aduana estaba en
medio de la Villa. Que las tierras dadas a tributo pagaban más censo del que
podían sufrir. Que había mandado arrendar y cultivar los montes. Que los
ministros de justicia se ponían a contemplación del mismo conde, etc. Pero én
la realidad no había otro agravio verdadero que el triste derecho de quintos,
aunque reducido ya entonces a un seis por ciento de salida y tres por ciento de
entrada. ¿ y bajo de qué dominio dejarían de ser contribuyentes? ¡Cuánto
mejor hubiera sido quejarse de que no se protegían sus manufacturas, sus fábricas
y otros ramos de industria popular y de comercio!
Como
conocían que para afianzar esta gran revuelta era menester seguir un largo
recurso, no faltaron sujetos que ofrecieron pasar a España, y aun mantener la
gente armada un año entero. Otros acordaron escribir al conde una arrogante
carta, pidiéndole que les aconsejase y diese alivio, pero que no se propasase a
hacer pesquisas ni inquisiciones. El primero que con noticia de esta crisis de
sublevación se transfirió a La Gomera fue el visitador general de la renta del
tabaco con su escribano y guardas.
Y
aunque a su llegada publicó que sólo iba a diligencias del real servicio, se
renovó no obstante el tumulto, de manera que hubieron de echarle de la Villa.
Con todo eso, don Antonio Estévez se mantuvo constante y se empeño en
apaciguarlos. Recibió una sumaria de lo acaecido. Otra se hizo después por la
Real Audiencia. Otras dos por el ordinario eclesiástico. Hubo presos en los
castillos de Tenerife, hubo destierros, hubo comparendos a Canaria, hubo
procesos contra eclesiásticos y legos. Fijóse en La Gomera un edicto del
comandante general, a fin de calmar la discordia. Pasó una diputación de parte
de la isla a impetrar la amnistía y perdón del conde. Pero sólo el tiempo
pudo sosegar la fermentación de los espíritus. La benignidad de don Domingo de
Herrera dejó de seguir tan funesta instancia, porque conocía que sus buenos
vasallos, sorprendidos de ajena astucia, sólo habían sido meros instrumentos
de una oculta maquinación.
Nadie,
pues, debe escandalizarse ni aun admirarse de semejantes desmanes y llamaradas
de los pueblos. Estos acontecimientos son los acontecimientos de Grecia y Roma;
son la historia antigua y moderna de los hombres en pequeñas y grandes
sociedades. Pero observemos que, cuando La Gomera se quejaba de su señor, no
sabía que estaba ya para perderlo, y que el antiguo expediente de quintos se
debía sentenciar a favor del conde. Echóse este fallo en el consejo de
hacienda, año de 1706. Pero no era tan afortunado aquel único varón de la
casa de Herrera en materias de gracia como en las de justicia. [...] (Viera y
Clavijo, 1991)
1762
Noviembre 8. Llegó Embarcacion
de España al Puerto de Sta
Cruz con
la noticia
de haver tomado
los Ingleses
la Ciudad
de la Havana
desde el
12 de
Agosto. Esta
noticia, que no
se esperaba, porque
los Isleños tenian
por inconquistable
dha. Ciudad,
aumentó la
aflicion de las
Islas, i
las puso en mayor
consternacion: perdieron alli quatro
Navios, i
algunos de ellos ya
cargados, i
se regula
á un Millon
la perdida
de las
Islas, i
todo lo
que tomaron alli
los Ingleses.
Supose, tambien,
que estos havian
‘apresado quatro Tartanas del
trafico entre
estas Islas. (Lope Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Noviembre 26. Murio en esta
Ciudad (La Laguna) el
.Then.te Cor. Dn
Christoval del
Hoyo Solorzano
Marq.s de
la Villa
de Sn
Andres, i
Vizconde de
Buen passo, casó
en Galicia, con
Da Teresa
Roxo (1)
Suarez de
Deza, de
cuyo matrimonio
dexo á
su hija
Dn Juana
del Hoyo
(2), que
aun no
ha tomado
estado. Las
demas particularidades,
que pudiera decir
de él
las refiere
el siguiente
Epitaphio que
salio quando
murio:
EPITAPHIO
En
fin en
esta Iglesia,
en este
Hoyo
sin
Lapida, sin
Marmol, ni
Epitaphio,
sin
Ofrenda, sin
Tumba, i
sin Escudo
Don
Christoval del
Hoyo halló
de[s]canzo.
Solo
assi descanzara
aquel segundo
Marques
de San
Andres i
de Buen-passo,
Vizconde
sin igual,
que dexó
todo
su
nombre, fama,
i Titulos
dejando.
Nacio
en la
Palma; pero
sin manias:
crecio
en la
Palma; pero
no estirado,
i
juntando lo
afable ó
lo festivo
martyrisó
a la
Palma en
tiernos años.
Garachico,
é Icod
de sus
vivezas,
gr[a]cias,
Chistes, i
enredos fue
el Estadio,
la
Orotava, i
el Puerto
fue su
Circo,
i
su Valle
de lagrimas
Salthiagu.
Logro
Portugal, Inglaterra,
España,
Francia, y
los Payses
bajos,
i
en todas
Cortes, Reynos,
i Naciones
al
bullo fue
atendido este
Canario.
Sufrio
prissiones; sustos,
contratiempos,
odios,
delataciones, i
aun embargos;
mas
las tranquilidades
de su
Espiritu
las
dice allá
un Convento,
acá Passo-alto.
Perdio
la Poesia
su acrimonia,
su
pimienta, su
sal, i
su hablar
claro,
el
cuento sus
afeites, i
hermosura
el
Juego su
bullicio, i
su regaño.
Perdio
la Medicina
al que
en su
vida
una
vez por
dar gusto
fue sangrado,
i
la Ley
un pleitista,
cuyo puno
pobló
de escritos
proprios muchos
autos.
Perdieron
los embustes
su enemigo,
loa
hechizos, i
brujas en
contrario,
el
comercio, i
las Indias
su insensible,
i
todas las
Imprentas su
Gonzalo.
Perdieron
las Canarias
con perderlo
su
Historia de
dos Siglos.
Ya Paisano
no
sabras el
caracter ni
los hechos
de
quantos nuestras
Jslas habitaron.
Ya
no sabrás
que General,
ú Obispo
dixo
tal cosa,
o resolvio
tal caso,
ya
no sabrás
que Damas
fueron lindas,
ni
sabrás quien
fue tonto,
ó quien
fue sabio.
Porque,
al fin,
ya murio
quien tantas
vezes
Vio
mudár Personages,
i Theatros;
i
con alma
philosofa, i
risueña
aprendio
en cada
seena un
deseagalio.
En
ochenta y
cinco aiios
que veria!
pero
como este
tiempo es momentaneo
el
murio confesando
que su
vida
un
puro sueño
fue de
poco rato.
Encomiendalo
a Dios, tu
Passagero,
que
al Sepulchro
tambien vas
caminando,
i
sabes que
vivir ocho,
ú ochenta
lo
mismo viene
ser tarde,
o temprano.
(Lope
Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Diciembre 24. Para
estorvar litigios
con la
parroquia de la
Concepcion se acordó se
erigiesse nueva
hermandad, con
nuevas constituciones,
cuyo plan
se encargó
á un
Abogado, que fue
al Liz.do
Dn Thomas
Saviñon Reg;.or
perp. de esta Isla,
i á
D.n Joseph
Bernardo Romero
Beneficiado Rector
de dha.
Iglesia, i
con efecto
lo formaron,
i firmado
de muchos Feligreses
se embio
ál Sor
Covernador, que con
singular complacencia
aprobo el
referido plan
de Hermandad.
En 24
de Diz.e
vispera de
Pasqua de
Natividad llego
la aprobacion
de dho.
plan, i
constituciones, i
al dia
siguiente huvo
junta de
feligreces, en
que se
recibieron muchos
de Hermanos,
i eligieron
por tal
Hermano mayor
á Dn
Thomas de
Nava Grimon
Marq.s de
Villanueva del
Prado, que
lo era
quando se
extinguio la Hermandad
anterior. (Lope Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Diciembre 31. Por
la tarde
baje al
Lugar de
Sta Cruz, acampañando
al Cav.”
Correg. i
Diputados:del 1lt.q:
Ayuntam.to que
fueron, segun
constumbre, á
dár la
possession de
los.Ca[s]tillos a
los electos
el 30
de Noviembre,
que lo
fue del
pral. el
Cap. D.n
Antonio Riquel
i Angula
Reg.or perp.”
de esta
Isla, que
por muerte
del Cor.1
Dn Roberto
de la
Hanty estaba
de Castellano
interino con
nombram.to del
Exe.mo Sor
Comand.te Gral.:
i del
de Sn Juan
el Cap.
Dn Antonio
Thomas de
Castro los
que hicieron
pleito homenage
para el
año de
1763. Dadas
las possessiones
huvo en
el pral.
un explendido
refrezco, á
que asistio
el Exc.mo
Sor Comand.te
Gral. Dn
Pedro Moreno, i
distintos sugetos
de la
Prim.” distincion
assi de esta
Ciudad, como
de aquel
Lugar, á
que se
siguio un
asistido Sarao. (Lope Antonio
de la Guerra y Peña. 1762)
1762
Diciembre 31. Resumen del año.He
tenido si, mucha
tarea por haver sido
precisso estar la
mayor parte
del año,
fuera de mi
casa acompañando, i
ayudando á mi Padre, á
quien- el
Excmo Sor
Dn Pedro Moreno queria tener spre.-
en el
Lugar de
Sta Cruz
para las assesorias,
á esto se
añadieron distintos
encargos del Ayuntam.to
para suvenir á
la mucha
escazes de mantenimientos,
aviendo sidome
inescusable en
los Meses
que fui
fiel exccutor
repartir por Zedulas el
trigo de los proprios, con arreglo á las
familias i
sugetos, ademas de ir personalmente
á los
puestos señalados á repartir
el pan, i aver asistido con el Correg. Dn
Martin de Roxas
á visitár los graneros de
esta Ciudad i Sta Cruz
para escusár monopodios,
i que el q.e huviesse de
sobra en
cada casa, se
repartiesse, i
vendiesse á las que
tuvieran falta,
Fui tambien
con algunos Labradores á
examinar los
parages, en
que iba
naciendo mucha
cigarra, para tomár
los arbitrios
de destruirla,
i el
que se
tomõ .fue dár
un almud
de trigo
al que
entregase un costal de ella.
Este año parece que
Dios por su inexcrutable
providencia ha querido
afligir esta
Isla; pues
se han unido
la hambre,
la Guerra,
los nuevos
impuestos, i
otras muchas desgracias
á constituirla
en el mas
lastimoso estado, En 5
de Mayo de este año me nombró el
Ayuntam.to por
su Tenedor
de municion, mandando se me
entregasen la polvora,
balas, cuchillas,
i otros
utencilios de Guerra, i
disponiendo el
orden que avia
de observar en distribuirlas, en
.caso de invadir
la Isla
los Enemigos. En 11
de Julio
de este año
fue la
primera ocacion que puse el
pie en el
agua por ir
á bordo,
acompañando al Cap,” D.n
Joseph Pacheco
Solis, que
passaba á
España á
algunas pretensiones,
i el
20 del mismo
á visitar,
como Diputado por
indisposicion de Dn Joseph
Tabares, una embarcacion que salió
para la
Havana, del
cargo de
Dn Joseph Garcia. (Lope
Antonio de la Guerra y Peña. 1762)
Taxo
*
Guayre
Adarguma Anez Ram n Yghasen.
---»
Continuará