España
es insolvente
Según
los datos hechos públicos por el Banco de España correspondientes el mes de
septiembre de 2015 la deuda pública del Estado español correspondiente al
gobierno metropolitano, autonomías y ayuntamientos se sitúa por encima del
billón (con b de burro) de euros (€), exactamente en un billón sesenta y dos
mil millones de €, lo que supone el 99.3 por ciento del producto interior
bruto (PIB), la mayor cuantía de la serie histórica de deuda trimestral
iniciada en 1995, datos que hemos incluido en el gráfico adjunto y que incluye
la serie trimestral cerrada en septiembre desde el año 2008, que fue de
cuatrocientos dos mil millones, hasta el 2015.
En
términos interanuales la, desde hace tiempo, insostenible
deuda pública española se incrementó
un 4.1 por ciento mientras que el del PIB interanual fue de 1.8, al pasar de 1.6
en el tercer trimestre de 2014 a 3.4 en el mismo periodo de 2015, pese a que se
trata de un año electoral como sostiene el economista
del IESE Busness School Toribio, J.J., de tal manera que con la
pretendida recuperación económica no sólo no se reduce deuda sino que se
incrementa.
Para
el servicio de análisis de Bankia, que incluye como deuda pública no sólo la
deuda oficial del gobierno, las autonomías y los ayuntamientos, sino que
incluye además la seguridad social y otros organismos estatales (la Sareb entre
ellos), la deuda pública ascendería al 133.5 por ciento del PIB al cierre del
ejercicio del 2014.
Por
si no fuera suficiente el déficit público se mantiene por encima del 5 por
ciento, pese a las tres prórrogas que ha dado Bruselas al gobierno
metropolitano presidido por Rajoy, que desde que se inició el ciclo electoral
con las convocatorias al parlamento europeo del año 2014, las autonómicas y
municipales de mayo de 2015 y las elecciones generales del próximo 20 de
diciembre no para con el embaucador mantra de que “dejamos atrás la
crishish” y es cierto: ellos dejaron atrás la crisis, pues durante el periodo
2008-2015 los ricos se han incrementado en un cuarenta por ciento y las treinta
y cinco empresas españolas más capitalizadas, el IBEX-35, ha multiplicado sus
beneficios un 21 por ciento en los cuatro años de legislatura de los
conservadores del PP.
Cuando
se produjo el rescate a España en el año 2012 el déficit público se situó
en el 10.6 por ciento, aunque ya en esa época el gobierno metropolitano se apresuró a
afirmar que si no fuera por el rescate, perdón, ellos prefieren llamarlo
“ayuda bancaria”, el déficit sería del 7 por ciento.
A
la deuda pública hay que añadir la deuda privada, que al cierre del 2014
ascendía al 182 por ciento del PIB, porcentaje que sumado al 133.5 por ciento
de la deuda pública ( en este caso sin considerar todo el incremento generado
durante el ejercicio del 2015) asciende a más de tres billones (otras vez con b
de burro) de €. España es insolvente ¿Qué
hacer? “Get your money out while you still can”.
Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario