CANARIAS HACIA SU DESCOLONIZACIÓN E INDEPENDENCIA

Canarias es un archipiélago situado en el océano atlántico frente a la costa occidental africana y alejado 1.500 kilómetros de Espana (la metrópoli colonizadora), desde el siglo XV es colonia del Reino de Espana, cuando las tropas castellanas invadieron, conquistaron, esclavizaron y asesinaron a gran parte del pueblo guanche, antiguos habitantes del archipiélago, que provenientes del norte de África poblaron el archipiélago hacia el año 5.000 antes de la era actual.

De las 17 Comunidades Autónomas que actualmente constituyen el Reino de Espana, Canarias es la única tratada como Región Ultra Periférica (RUP) por Espana y la Unión Europea (UE), lo que constituye un eufemismo de colonia.

La superficie geográfica de nuestro archipiélago es de 7.492 kilómetros cuadrados[1]  con una población de 2.108.121 habitantes (datos del ISTAC: Instituto de Estadística de Canarias, para el 1 de enero de 2017), lo que arroja una densidad demográfica de 281 habitantes por kilómetro cuadrado, la más alta de toda la UE y de toda Espana. Además el número anual de turistas que visitan Canarias es de 16 millones de personas (datos del año 2017). Además, la UE constituida por 27 países totaliza 510,3 millones de habitantes con derecho a libre circulación y libre asentamiento en Canarias (datos de EUROSTAT: Comisión Europea de Estadísticas para el año 2016).

La riqueza económica generada con el negocio turístico no se queda en Canarias (se va a Espana y a los países de origen del turismo) y el pueblo canario sufre las peores condiciones de vida de Espana y Europa, la tasa de desempleo es del 20,1%; pobreza del 40,2%; emigración forzosa al exterior, alto fracaso escolar (menos del 3% del PIB, Producto Interior Bruto, dedicado a educación); fuerte alienación cultural; saqueo y destrucción de nuestros yacimientos arqueológicos; estructura socio-económica frágil y nada diversificada (más del 80% de la economía está concentrada en hostelería-turismo y cemento-edificación); alta desigualdad social; alta dependencia alimentaria exterior (más del 90% de los alimentos son importados); desnutrición superior al 20%; fuerte división administrativa en dos provincias enfrentadas y en pleito permanente; la clase trabajadora con los salarios más bajos y las jornadas laborales más altas del Estado espanol; alta prevalencia de las enfermedades mentales y alto consumo de psicofármacos (ansiolíticos, antidepresivos y somníferos); ausencia total de banca pública, hacienda y política fiscal canaria propia.

El saqueo actual de las riquezas económicas generadas en Canarias con la actividad turística debemos añadir el futuro y potencial expolio por parte del Reino de Espana de los hidrocarburos (petróleo y gas) y múltiples metales contenidos en los fondos oceánicos  canarios, especialmente níquel, cobalto, hierro, manganeso, hafnio, telurio y otros.

La solución a los problemas del pueblo canario está en la descolonización. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró el período 2011-2020 Tercer Decenio Internacional para la eliminación del colonialismo, delito de lesa humanidad que jamás prescribe, con el paso de los siglos el delito no desaparece. El Comité de Descolonización de la ONU está presidido por Antigua y Barbuda, y formado por 29 países, entre los que se encuentran China, Rusia, India, Irán, Siria, Etiopía, Nicaragua, Cuba, Bolivia o Venezuela. En Canarias nos acogemos a la Resolución 1514 (XV), del 14 de diciembre de 1960 de la ONU, que exige al Reino borbónico de Espana cumplir un protocolo y calendario de descolonización de nuestro Archipiélago, que permita la conquista de nuestra anhelada independencia, que dará paso a la constitución de la República Federal Canaria (RFC).

 

Movimiento de Liberación Nacional Canario (MLNC)

[1] http://elcanario.net/Secciones/geocanarias.htm