RESURGIR DEL DEBATE NACIONALISTA
"Lo
que ha hecho CC hasta ahora
es
un compadreo con el Estado español"
O.G.,
Tenerife
Pese
a los últimos resultados electorales, nada favorables para los intereses
nacionalistas, Álvaro Morera, presidente del Centro de Estudios Imazighen de
Canarias y miembro del Congreso Nacional de Canarias, respira optimismo puesto
que considera que con el resurgir del debate nacionalista en la calle se rompe
el tabú de que hablar de soberanía era para gente radicalizada.
-Se
encuentra en pleno debate, e, incluso, se puede decir que cualitativamente ha
dado un paso enorme porque es motivo de discusión, está en la calle y en los
medios de comunicación. Se rompe el tabú en el que hablar de independencia, de
soberanía y de descolonización parecía que era para gente más o menos
radicalizada. El debate está en los medios, en las tertulias, y el salto
cualitativo es en cuanto que la perspectiva de llevar el asunto de Canarias a
las Naciones Unidas, al Comité de Descolonización, que quedó truncado en un
momento determinado[1]
y que erróneamente se dice que fracasó, cuando Antonio Cubillo estaba
comisionado para ir a las Naciones Unidas y presentar el proceso de
descolonización de Canarias. Ese parón no significó en absoluto que el
independentismo en Canarias estuviese dormido.
-¿Ha
sido el pleito insular una de las razones para que la conciencia nacional
canaria se haya debilitado con el paso del tiempo?
-Desde
luego que está en contra de ese sentido unitario. Yo soy palmero, y desde
-¿Cree
que en estos momentos existe un déficit de conciencia nacionalista en las
Islas?
-La
conciencia nacionalista se da cuando se dispone de los medios para que llegue a
la gente. Cuando se dice que en Canarias nunca hubo conciencia nacionalista,
habría que decir que en Canarias siempre la hubo. Cuando tienes la posibilidad
de expresarla, lo haces. Eso es una constante histórica[2],
ya se hizo durante la República[3].
Cuando hay una posibilidad de que se pueda manifestar libremente el derecho a la
autodeterminación, a la descolonización e independencia, la conciencia de ser
y estar colonizado sale a relucir. En este momento, una serie de factores
externos e internos dan lugar a que el debate esté en la calle y que sea una
cuestión que se considera y discute.
-Canarias
ha estado gobernada los últimos 20 años por una formación que se dice
nacionalista. ¿Defiende CC los intereses del nacionalismo canario?
-Ni
mucho menos. Visto desde fuera, la impresión que da es que se sirve de esos
derechos nacionalistas más que los defiende. CC ha funcionado a base de hacer
encuestas públicas. Las encuestas y sociobarómetros[4]
en
los que ve esa tendencia de la gente que mayoritariamente se considera más
canario que español. Sabiendo cuál es ese sentimiento de la gente lo proponen,
pero hasta ahora lo que han hecho es una especie de compadreo de los dirigentes
de CC con el Estado español, y una cuestión que llama la atención es que lo
mismo forma coalición con el PSOE como con el PP. Hay una cosa curiosa: cuando
el PP está en la oposición parece pro canario y cuando está el PSOE en el
poder restringe la condición de canariedad, y, en cierto modo, amarra la
dependencia con el Estado español.
-Dirigentes
de CC han manifestado, tímidamente, la posibilidad de dar un paso más hacia
sus reivindicaciones nacionalistas. ¿Cree que son ciertas?
-No
sólo hay nacionalistas en Coalición Canaria, sino que también los puede haber
en el PSOE y en el Partido Popular, aunque parezca una contradicción. En CC hay
nacionalistas, como en todas las organizaciones, pero la cúpula, la que lleva
la política de partido, no sólo está dirigida al interior de su país, sino
que tiene condicionantes externos con el Estado español que parece que la
agarrotan y la condicionan. Y no sólo porque pueda haber una cierta amenaza por
parte de los sectores que tienen el poder, militar, policial y político, sino
que da la impresión de que CC tiene esos dos condicionantes: económicos, de
ciertas familias empresariales, y otro hacia el Estado español, que es el que
tiene y ejerce la fuerza en todos los sentidos. El romper con esa situación los
tiene preocupados porque son esas circunstancias favorables a la descolonización
las que se están dando actualmente. Se ve que CC, con respecto a las
reivindicaciones propias de los canarios, está a la defensiva, titubeando y
contradiciéndose, con declaraciones y actuaciones impropias de nacionalistas.
Dicen una palabra para contentar a los canarios y otra para congratularse con el
Estado español.
-Algunos
miembros de CC han propuesto la posibilidad de que CC se convierta en un estado
libre asociado. ¿Cree que es esa la formulación correcta?
-Lo
que ocurre es que cuando se tiene el miedo o hay esos condicionantes para
afrontar esa descolonización se buscan vías intermedias. El único caso de
estado libre asociado sería el de Puerto Rico y no deja de ser una colonia más
de EEUU –con un movimiento independentista que no se arredra ante el poderoso
USA-. Por tanto, Canarias como estado libre asociado al Estado español es una
figura que no se contempla en el derecho internacional. Por eso Canarias, que es
un Archipiélago colonizado, según el Derecho Internacional, es sujeto para la
descolonización. Otra cosa es que España lo quiera reconocer[5].
De las declaraciones del Presidente del Cabildo de El Hierro, por ejemplo, se
deduce que lo que plantea es salvaguardar, en unas Canarias independiente, la
participación de su isla en igualdad de condiciones en relación con las otras,
y eso como se consigue realmente es una República Federal Canaria[6].
-Usted
que fue miembro del PNC. ¿Cuál cree que es el papel que está jugando ahora,
asociado a CC?
-Cuando
el Partido Popular Canario (PPC) -uno de los primeros en acogerse al registro de
partidos políticos-, tras las primeras elecciones generales, en las que
participó, en 1978 se integró en el Partido Nacionalista Canario y,
posteriormente, ya en el congreso constituyente del renovado PNC, celebrado en
Bajamar en el año 1982, se volvió a las líneas que dan sentido a un partido
nacionalista, adoptando la bandera nacional tricolor con siete estrellas verdes,
y como himno, ‘A Tierra’ de Taburiente, expresamente invitados y que lo
interpretó en primicia en dicho congreso. Lo que ocurre es que una vez que Juan
Pedro Dávila y Bernardo Cabrera desaparecieron físicamente -aunque permanecen
imperecederos en nuestro recuerdo-, el PNC ha ido dando pasos cada vez menos
definidos, y creo que se ha ido produciendo una desbandada. Se pueden contar por
centenares los militantes que, decepcionados con esa línea entreguista, se han
marchado de él. Tenían una oportunidad en bandeja y esa coalición PNC-CC podía
haber dado lugar, y todavía estarían a tiempo, de tomar la verdadera
conciencia nacionalista. No que el PNC se vuelva autonomista o regionalista,
sino que CC tome la bandera del PNC y luche realmente de una manera pacífica y
civilizada con el Estado español y con las instancias internacionales por la
descolonización de Canarias, que es lo que realmente da significación a un
partido nacionalista[7].
Por cierto, que el PNC fue el primer partido político que enarboló visible y
ostensiblemente en el mástil de su sede -dando al exterior- la bandera nacional
canaria, tricolor con siete estrellas verdes; primero en la calle Villalba Hervás
y posteriormente en la calle Castro, la cual, hay que decirlo, permanece
igualmente en su actual sede.
-¿Apostaría
por una fusión de todos los partidos que se dicen nacionalistas en Canarias?
-Las
fusiones son difíciles. No necesariamente tendría por qué ser esa la función
de todas las organizaciones nacionalistas. Lo que sí deberían hacer todos los
partidos nacionalistas, de cualquier tendencia, es ponerse de acuerdo para -sin
hacer dejación de sus posiciones ideológicas- poner como prioridad la
descolonización de Canarias, como ha ocurrido en los procesos de descolonización
de las que fueran colonias, actualmente independientes y soberanas.
República
federal
-
¿Cuál debería ser entonces el sistema de gobierno que se debería implantar
en Canarias?
-
Esa necesidad que tiene cada isla de
defender los intereses insulares, sin caer en el insularismo insolidario, pasaría
por una federación, por una república federal canaria, que justamente una de
las cuestiones que están sobre la mesa es el articulado de una Constitución de
-¿No
cree que este debate que se ha reabierto no ha llegado a calar en la juventud?
-Modernamente,
está pasando de ser los educadores y formadores de la personalidad de las
nuevas generaciones los padres, el entorno familiar o local, a que los que
influyan en la cultura y en su formación, en mayor medida, sean los medios de
comunicación. Hay un cierto internacionalismo en el que prima el divertirse, un
cierto egoísmo personal y, consecuentemente, ausencia de solidaridad. Aún así,
en nuestras universidades hay actualmente movimientos independentistas dentro
del estudiantado y también, más soterradamente y con precaución, en sectores
del profesorado. Aunque siempre los ha habido, ahora, entre todos los sectores
de la juventud, ya sea trabajadora o estudiantil, hay un renacimiento del
sentido independentista. En todos los sectores culturales canarios los jóvenes
se están implicando cada vez más en la lucha emancipadora.
Delimitación
de las aguas
Publicado en el periódico El Día, domingo 11-05-2008