El culebrón del PNC (III)

 

Jorge Ancor Dorta

 

El último episodio del culebrón es el congreso recientemente celebrado en Tenerife. Se le pidió al presidente insular Juan Jesús Ayala la celebración de un congreso insular extraordinario con la firma de tres comités locales (Orotava, Granadilla y Puerto de la Cruz) y más del 70% de los militantes. En dicho congreso se elige un nuevo presidente insular por el 90% de los votos. Es decir un 63% de todos los militantes, presentes y no presentes, votaron contra Ayala y a favor de Carlos García, el nuevo presidente insular.

 

No solo Ayala no convocó el congreso y trató de impedirlo junto a García Ramos, sino que a continuación Ayala declara ilegal el congreso insular de Tenerife y expulsa a 15 militantes de forma totalitaria. Acto seguido el ya ex-presidente, en una patética actuación se acantona en la sede del PNC de Santa Cruz, cambiando la cerradura.

 

La actuación de García Ramos, Ayala y Álvaro Pérez no solo vulnera los estatutos del PNC, vulnera la ley de Asociaciones y Partidos Políticos, pisotea y vulnera derechos civiles básicos recogidos en la constitución con expulsiones y purgas ilegales. Pero la justicia colonial mira para otro lado y aquí no ha pasado nada.

 

Todo ello con el beneplácito y la complicidad de Coalición Canaria y los tribunales españoles. García Ramos y compañía han dejado el PNC como un solar, lo han vaciado de militantes, han destrozado sus estructuras, creado gestoras ilegales, expulsando a todo aquel que se oponga a sus designios y como premio ha recibido el premio Canarias y otras dádivas por el pago de sus servicios.


García Ramos es un claro exponente del estamento universitario en las islas y constatación del nivel de podredumbre y corrupción al que han llegado tanto el estamento judicial como el estamento universitario en Canarias.

 

La contaminación informativa a los diferentes comités insulares y municipales ha sido bestial, poniendo a isla contra isla, norte contra sur, impidiendo una comunicación fluida entre los comités y manteniendo un estricto régimen autocrático y centralizado. 

 

Ahora asistimos a una campaña mediática de parte del periódico El Día que trata de hacer ver que Juan García (lo del García-Ramos es un guión que el mismo se puso para unir sus dos apellidos) es uno de los padres de la patria junto a José Luis Concepción. Ver para creer.


En el trasfondo tres escenarios, la vuelta a las AIC y los insularismos paletos, seguir prostituyendo las siglas del PNC para que nada cambie y los caciques de CC puedan seguir haciendo de las suyas…, o hacer valer los derechos de los militantes que sí quieren una verdadera refundación del nacionalismo en torno a un proyecto nacional. 

 

Artículos anteriores:

El culebrón del PNC (II)

Democracia ultraperiférica (I)

 

Fuente: menceymacro.blogspot.com