Canarias
y las Revoluciones del Norte de África (III)
Jorge
Dorta 'Ancor' *
Gadafi
en Libia es un régimen de izquierdas, mientras que Ben Ali en Túnez era un régimen
de derechas, y en ambos se produjo el mismo hartazgo Por tanto no es cuestión
de derechas o de izquierdas, debe ser algo mas. Tenemos que ir un paso mas
allá para entender como hemos llegado a esta situación en el Norte de Afrecha.
Los
"sanedrines" canarios son el equivalente al "Majzen" marroquí
y tunecino, representantes de una forma de gobernar y de entender las relaciones
que están en el origen del problema. Esa forma de pensar genera un capitalismo
clientelar y cleptocrático, un capitalismo "mafioso". Podemos pensar
que el problema es el capitalismo en si, pero Libia no es
"capitalista" y tiene similares problemas. Por tanto la respuesta ha
de estar en otro lado.
Existen
dos formas de producir crecimiento económico, la primera es incrementar los
factores productivos. Es lo que hizo China, captó capital internacional,
incorporo más chinos a trabajar y consume más materias primas.
La
segunda forma de crecer es incrementando la productividad. No se trata de
consumir mas, sino mejor. Este es el modelo de crecimiento de los países
desarrollados en el que prima la innovación.
En
Canarias hemos crecido incorporando más factores productivos. El modelo ha
consistido en incrementar la población, traer emigrantes, traer capital y
consumir mas suelo.
Este modelo de crecimiento produce una forma de pensar y de comportarse, unos
esquemas que hacen que se caiga en ese capitalismo fascista o mafioso, que en el
fondo es lo mismo. Para entenderlo recordemos el esquema político bidimensional
en el que representamos en los ejes la distribución de la riqueza y el grado de
intervencionismo.
Para
simplificar definamos un sistema en el que el comportamiento de un grupo o un
individuo sea función de tres parámetros que rijan sus acciones. El primer parámetro
es el "propósito" o fin, (es decir lo que trata de alcanzar). El
segundo parámetro será el principio de acción (lo que hace para conseguir el
propósito) y el tercero el principio de conservación (lo que hace para
conservar su posición).
El esquema mental que produce el crecimiento económico por medio del incremento de los recursos productivos en una situación de monocultivo la recogemos en el siguiente grafico. El propósito del sector empresarial es la puja por los recursos (en el caso de Canarias el suelo turístico). El principio de acción es el del clientelismo político y la corrupción que se asegura el "acceso" a los recursos.
El principio de conservación es el reparto,
en el que cada cual consigue su trozo de la tarta, y el inmovilismo
necesario para mantener los equilibrios. El "Sanedrín" es el coto
cerrado y hereditario que representa ese reparto y ese inmovilismo.
De
igual forma, ese modelo de crecimiento económico y ese comportamiento
empresarial genera en el sistema político un esquema cuyo propósito es el
poder y el control, cuyo principio de acción es el intervencionismo para
"repartir" la tarta y de esta forma mantener los equilibrios y el
inmovilismo (que es el principio de conservación).
Vemos
que todo esto confirma un sistema contrario a la innovación y al dinamismo.
Mientras no rompamos con esa forma de pensar no habrá nada que hacer. Esa forma
de pensar y de actuar es la que lleva a la situación actual, al capitalismo
mafioso, al intervencionismo fascista, a la obsolescencia.
No es cuestión de derechas o de izquierdas, el "capitalismo" cleptocrático y clientelar que se ha extendido en el norte de Afrecha, incluida Canarias, y que ha llevado al hartazgo a la población. Los sanedrines canarios y el Mazjen norteafricano responden a ese mismo esquema.
Cuando se ha intentado la vía
de la izquierda, como Gadafi en Libia, el resultado es similar. Por tanto un
intervencionismo de derechas no se arregla con un intervencionismo de
izquierdas, porque el problema es el intervencionismo en si.
Vemos
que todo esto genera un círculo vicioso cuyos comportamientos se refuerzan
mutuamente, y propicia la aparición de la vejezocracia, la pobrezocracia,
el estancamiento, la obsolescencia, etc...
Si
a los 5 minutos de estar sentado en una mesa de póker no sabes quien es el
tonto, es que el tonto eres tú. Igualmente, si no sabes cual es el problema,
probablemente el problema seas tú, o mejor dicho, tu propia forma de pensar.
Fuente:Mencey MACRO
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