Salud, drogas y medios de comunicación
A. Enciso
Son muchos los preadolescentes que tienen triglicéridos y colesterol. Son muchos los adolescentes con problemas derivados de la bulimia y de la anorexia. Un porcentaje muy elevado de nuestros jóvenes consume de manera frecuente marihuana y, aunque en menor proporción, drogas de diseño y cocaína.
Ya se sabe que la anorexia consiste en una pérdida de apetito, que la cocaína es el alcaloide de la coca, que la marihuana son las hojas del cáñamo índico fumadas como si fueran tabaco.
Con mayor o menor grado de intensidad, las drogas generan entre los jóvenes adicción, disminución de las neuronas (marihuana), pérdida de capacidad de concentración (marihuana), sobreexcitación (cocaína). Con frecuencia las drogas producen ansiedad, desarreglos psíquicos así como una dramática situación familiar.
Por su parte la anorexia y la bulimia generan en las familias incertidumbre, angustia y diversas preocupaciones cotidianas y entre los jóvenes que la sufren, deterioros físicos y psíquicos, con frecuencia irreversibles. Finalmente los triglicéridos y el colesterol son expresión de incorrectos hábitos de alimentación, muy generalizados.
Los jóvenes con adicción a las drogas, los jóvenes que practican dietas perjudiciales, los jóvenes con graves desarreglos alimenticios (anorexia, bulimia) nos producen mucha preocupación colectiva, mucha solidaridad y afecto. Quien nos proponen los hábitos alimenticios inadecuados y los valores estéticos y sociales que hacen posible la bulimia y la anorexia, el colesterol y los triglicéridos, la adicción y el consumo mas irracional y compulsivo, nos producen profunda indignación y rechazo. Esos valores (el individualismo, el hedonismo, la resignación, el escepticismo social, el superconsumo) se propagan a través de los grandes medios de comunicación, fundamentalmente televisión y diversos aparatos electrónicos. Si los medios de comunicación son el soporte técnico, quienes elaboran y deciden la propagación de mensajes son grandes centros de poder económicos nacionales o transnacionales. Grandes centros de poder que no solo producen gravísimos desordenes ambientales y desregulaciones económicas y laborales producidas por pequeños y medianos empresarios, por trabajadores y por sectores muy amplios de ciudadanos; que producen también graves deterioros en la salud física y psíquica de muchos jóvenes.
¿Qué hace la Conserjería de Sanidad y la de Educación para abordar esta situación?.
Muy poco. Quizá, sería mejor, decir nada. ¿Qué podría hacer la Consejería de Sanidad y la de Educación para abordar y contribuir a la solución del problema?. Mucho. Por lo pronto sistematizar la impartición de conocimientos que tengan que ver con la salud (deportes, nutrición, drogas, consumo, valores) y adiestrar a los jóvenes para que puedan realizar una visión racional y crítica de los grandes medios de comunicación.