CRÍMENES
DE LESA HUMANIDAD COMETIDOS EN CANARIAS
(XXXI)
Chaurero
n Eguerew *
“La
esencia de la coerción psicológica consiste en que aquellos que actúan bajo
su efecto tienen la impresión de que están actuando por iniciativa propia. La
víctima de la manipulación mental no sabe que es víctima. Las rejas de su
prisión le son invisibles, y cree que es libre. El hecho de que no es libre, sólo
es aparente para los demás. Su esclavitud es estrictamente objetiva.”
Aldous Huxley, 1958.
Ante la opinión pública la iglesia católica, se presenta ante
centenares de millones de seres humanos, como defensores de dos principios éticos
del cristianismo: justicia y solidaridad humana. No obstante, la iglesia católica,
desde la Edad Antigua hasta nuestros días (Edad Contemporánea), ha tenido una
tarea fundamental en todos los fenómenos políticos, económicos y sociales de
la historia del cristianismo. La iglesia católica, usando las banderas del
cristianismo, ha sido uno de los instrumentos ideológicos de más éxito para
las sociedades clasistas -el esclavismo, el feudalismo y el capitalismo-, en su
afán de sojuzgar a los pueblos del mundo. Pero, no sólo ha sido el instrumento
ideológico de las clases sociales dominantes durante la historia de la era
cristiana, sino que también ha acumulado una inmensa riqueza. Esta riqueza
-como todas las mal adquiridas- tiene un origen sangriento.
Constantino
dio a los obispos las funciones de los gobernadores civiles y les reconoció el
derecho de jurisdicción disciplinaria sobre los clérigos. Y cuando dio a los
obispos la posesión de los bienes confiscados a los templos paganos, el
emperador converso convirtió a la iglesia católica en la mayor potencia económica
de la época.
Al llegar el siglo V, la iglesia católica había aumentado extraordinariamente
las propiedades. La extensión de la propiedad territorial y la cuantía de la
fortuna de la iglesia durante la Edad Media y en los tiempos modernos no ha sido
fácil cuantificarla.
Sin
embargo, algunos investigadores han revisado documentos a pesar de las fuertes
presiones de la iglesia católica-el Vaticano. En la Edad Media, o Medioevo, que
va del V al XV, el punto de partida de la economía se establece en el campo,
creando a su vez una organización jerárquica de la propiedad territorial, que
concedió autoridad a la nobleza y a la iglesia sobre los siervos y los
esclavos, pudiendo ejercerla gracias a los séquitos de gente armada de que se
rodeaban.
Asimismo,
la iglesia católica, con el arma ideológica del cristianismo, también ha
tenido, a través del tiempo, un papel político muy decisivo en el
derrocamiento de las sociedades pre-capitalistas. No se conciben ni la caída
del Imperio Romano ni la del feudalismo sin la participación decidida del
cristianismo. Por ejemplo, las Cruzadas tuvieron dos objetivos: el político, al
detener el avance de la religión musulmana hacia Occidente; y el económico, al
abrir nuevas rutas de comercio. De esta manera, se fueron creando las
condiciones materiales, que permitieron el surgimiento del capitalismo.
Estas
guerras o Cruzadas, más que poseer un carácter religioso, tenían un carácter
económico porque cambiaron la geografía política y económica de toda Europa.
Ahora
bien, esta riqueza se materializa en oro,[1]
acciones, consorcios, tierras y ciudades inmobiliarias.[2]
Las fuentes de acumulación han sido diversas, a saber, esclavitud, servidumbre,
bendiciones y títulos,[3]
comercio del perdón, inquisición y quema de brujas, falsificación de
documentos, herencias fraudulentas, el diezmo, venta de cargos eclesiásticos,
asesinato, ingresos laterales, prostitución y subvenciones de los Estados.
Recordemos
que la iglesia católica se consolidó en la Edad Antigua, se fortaleció en la
Edad Media, sobrevivió la Edad Moderna y aun, en nuestros días, parasita y
conspira, como lo ha hecho desde la Edad Antigua. En suma, la iglesia ha
manejado diversas fuentes de acumulación de capital, según las características
primordiales de cada período histórico. [4]
Jesús vivió de forma
sencilla y enseñó que el hombre “no debería acumular riquezas que corroen
el orín y la polilla”. Sin embargo a través de muchos siglos la Iglesia católica
que se autodenomina cristiana, ha acumulado inmensas riquezas, saqueando a los
pueblos, haciendo cobrar despiadadamente el diezmo, enriqueciéndose con la
fortuna de las víctimas de la Inquisición y de la quema de brujas, asegurándose
la liberación de impuestos y subvenciones fiscales, lo que en muchos países
como en España todavía sigue vigente.[5]
Lo que la Iglesia hace
de “bueno” en el mundo, jamás lo financia con su gigantesca fortuna, sino
que lo hace exclusivamente con los donativos de los creyentes, con las
subvenciones del Estado y con el cálculo de impuestos eclesiásticos, beneficiándose
también de enormes exenciones de impuestos.
Los
valores y los medios de producción: Orchilla, Ganados, Cueros, Conchas, Miel,
Pez Etc., y los más degradante, el trafico de seres humanos, de que se
apropiaban los colonizadores, entre ellos los jerarcas de la iglesia católica
eran llevados a España, y sólo allí se convertían en capital, es decir, se
invertían en el fomento de la industria, el transporte y la agricultura. La
apropiación de las tierras dio lugar a la agricultura capitalista. Así pues,
la política colonial contribuyó al establecimiento de las nuevas relaciones de
producción, relaciones burguesas y caciquiles.
En
la colonia de Canarias la iglesia católica es la institución que más riqueza
acumuló en bienes rurales y urbanos, tanto el clero regular como las órdenes
conventuales. A pesar de la Desamortización de Mendizábal que en febrero de
1836 declaraban en venta todos los bienes pertenecientes al clero regular, y se
destinaban los fondos obtenidos a la amortización de la deuda pública en la
metrópoli, las propiedades de la iglesia católica en la colonia continúan
siendo fabulosas.
Quizás
la más singular de las propiedades usurpadas para la iglesia católica a raíz
de la invasión y conquista de la isla Tamarant (Gran Canaria) fue
El
asentamiento europeo en el territorio, tuvo lugar hace más de 500 años, nació
a raíz del reparto de los despojos de la invasión y conquista española y se
extendía además por toda la zona que actualmente ocupa el Municipio de Ingenio
y gran parte de Santa Lucía. Agüimes ostentó, desde los primeros tiempos y
durante más de tres siglos, un lugar privilegiado por su calidad de feudo
episcopal, otorgamiento singular que fue concedido por los Reyes Católicos el
20 de enero de 1487, dieron al
obispo para
Los obispos católicos que disfrutaron de la prebenda de ser Señores de
Agüimes fueron un total de cuarenta y cinco, siendo el primero Juan de Frías
(aunque este no pudo disfrutarlo por haber fallecido ante de la concesión) y el
último el obispo Verdugo en el siglo XIX. El Señorío de Agüimes era un señorío
territorial y bajo jurisdicción eclesiástica, donde el Prelado y sus sucesores
eran dueños absolutos de las tierras, de
sus frutos y de sus siervos, pudiendo arrendar, cobrar la renta y todas las
otras cosas del lugar y Heredamiento de Agüimes. Asimismo, les correspondía el
derecho de nombrar al alcalde, juntamente con otro de nombramiento real. Los
conflictos con el Cabildo de
Desde
los inicios de su establecimiento en la colonia la iglesia católica ha
funcionado como una maquina extractora de plus valía perfectamente engrasada y
con un control absoluto sobre los medios de producción, fiscalizando hasta el más
mínimo renglón productivo, hasta el último rábano cosechado en una huerta y
hasta el último huevo puesto por una gallina, un queso, nada escapaba a la
tributación del diezmo y otras cargas eclesiásticas. Como buena empresa
capitalista disponía de unos métodos contables y de control difícilmente
superables aún en la actualidad.
Buena
parte de los ingresos se recibían
en especie. Detallando la naturaleza y
el valor de estos, pues cada isla tenía sus productos
específicos con
los que
satisfacía la
obligación de pagar los
diezmos.
Sobre este tema el sacerdote jesuita e investigador Luís
Fernández Martín, nos legó un extenso y documentado estudio el vamos a seguir
en algunos de sus aspectos en torno a las finanzas de la silla episcopal de
Canarias y algunos de los altos clérigos, los cuales a juzgar por los fabulosos
ingresos económicos que obtenían en la época debía vivir como dioses,
mientras que el pueblo estaba inmerso en la más abyecta de las miserias.
“Por
valor del
obispado entendemos
la cantidad
global de
ingresos por
todos conceptos que
entraban cada
año a
No
se contabilizan bajo este título de “valor del obispado”
los emolumentos que correspondían
a las
prebendas canonicales,
a las raciones y medias
raciones ni a
las capellanías de la catedral.
Tampoco
se incluyen
en este
capítulo los
ingresos de
los beneficios curados de las
poblaciones, villas y lugares de las islas,
pues estos ingresos
provenían generalmente de
las rentas
propias de cada
beneficio.
Año
1570. Valió este obispado de la
moneda de Gran Canaria:[6]
6.706.147 maravedis.
Año
1571. Valió 5.774.553
maravedis de la misma moneda. Montan
los frutos
de la Mesa
Episcopal en
1575: 7.146.061 maravedis de
la moneda de Canaria,
que en
la de Castilla
son: 5.216.625 maravedís. Hubo
de “hacimientos” 87.537 maravedis de la moneda de Canaria, que son de
Castilla: 63.902 maravedís, que con los
5.216.625 montan: 5.280.527 maravedís.
Año
1576. Vale este obispado 5.964.265 maravedís de moneda de Canaria,
que son en
moneda de Castilla: 4.353.913
maravedís, más los 47.085 maravedís de moneda de Castilla provenientes de los
“hacimientos”, dan un total de
4.400.913 maravedís.
Año
1577. Valió este obispado 5.373.823 maravdí de moneda de Canaria,
que son
de la
de Castilla: 3.922.860 maravedís. De
esta cantidad
se saca 110.987 maravedís
de moneda de
Castilla, que son los 152.037 maravedís de moneda
de Canaria que son de los años 1575 y 1576, y
restan este dicho
año de 1577, 3.811.873 maravedís.
El
año 1586 valió la Mesa Episcopal: 14.500 ducados.
El
año 1587 valió la Mesa Episcopal: 14.300 ducados.
Que
todos juntos los dichos tres años
suman y montan 43.150 ducados.[7]
Sacado el tercio viene a ser la renta de cada año: 14.383
El
año 1592 valió la Mesa Episcopal: 7.993.698 maravedís.
El
año 1593 valió la Mesa Episcopal: 7.442.832 maravedís.
El
año 1594 valió la Mesa Episcopal: 7.650.768 maravedís.
Los
dichos tres años suman: 23.087.568 maravdís de moneda de Canaria, y viene a
salir un año con otro a 7.695.856 maravedís, que en moneda de Castilla son:
160.330 reales, y valen 14.575 ducados de a once reales por ducado, y son las
doblas de estas islas: 65.392 doblas y
3/4 de
dobla. 13
de abril de
1956. Juan
de Ondaro Artiaga, contador
mayor.
De
abril de 1596, pocos meses después de la invasión de Sir Francis Drake,
en carta dirigida al rey: “Tomando
tres años -92, 93 y
96 y sacando
el tercio
de ellos,
es al justo
con lo que
renta Agüimes, cámara del obispo,
160.330 reales, y
se ha de advertir la isla
de Fuerteventura
que fue atacada por moros
que la saquearon y
el daño que hizo
la langosta no hubo renta de
ella antes fue necesario dar
limosna a los vecinos como se
dio para que pudiesen comer y sembrar y fue
Dios servido que una pobre
de fanega y media de cebada que sembró, cogió más de ciento,
según me dijeron.
Esto digo porque
se entienda
la fertilidad de la
isla cuando
responde algún año, y
así se puede poner lo que suele valer por un año
la dicha isla de Fuerteventura 8.000 reales,
que tomado el tercio son 2.666 que
puestos con los 160.330 reales
son 162.996 reales.
Este es el valor
de un
año de los tres.
Aunque
ha valido más, entiendo
y tengo por
cierto que su
justo valor un año con otro
son 15.800 ducados antes más que
menos.
Hay
que advertir que “la administración
del obispado la tiene el deán
y cabildo dél, y
a mi se saca de masa comían
gastos para hacer las rentas,
juntar el
pan y para
otras cosas”.
“Por
encargo del obispo don Cristóbal Vela en
30 de agosto de 1578
los señores Baltasar
de Santisteban, regente
de la
casa de cuentas, de la
catedral de Canaria, y Gaspar Fullana, contador de la
dicha casa
de cuentas, hacen
relación conforme se lee
de los libros de los dichos años:
Casilla
del señor obispo, don Cristóbal Vela. Año de 1575.
Por
los menudos de Canaria: 768.186 maravedís.
Por
los menudos de
Tenerife: 1.930.611 maravedis.
Por
los menudos de La Palma:
952.074 maravedís.
Por
los menudos de La Gomera:
126.341 maravedís.
Por
los menudos de Hierro: 159.618 maravedis.
Por
los menudos de Lanzarote: 46.030 maravedis.
Por
los menudos de Fuerteventura:
40.122 maravedis.[8]
Por
los azúcares de Tenerife:
86.728 maravedis.
Por
los azucares de La
Palma: 125.430 maravedís.
Por
los azúcares de La Gomera:
2.877 maravedis.
Por
3.378 fanegas y
4 celemines de
trigo que perteneció a Su
Señoría
en estas
islas, maravedis, 1.783.760.
Por
1.594 fanegas y 9 celemines de cebada
a la
tasa: 421.019 maravedis.
Por
907 fanegas y
16 celemines de centeno a la tasa: 255.935 maravedís.
Por
764 quesos a 2 reales
cada uno chico con grande de
Lanzarote y
Fuerteventura: 13.311 maravedís.
Por
la marca del ganado de Fuerteventura: 35.200 maravedís.
Montan
los frutos de la Mesa Episcopal en 1575: 7.146.061 maravedís
de la moneda de Canaria,
que en la de Castilla
son: maravedís 5.216.625.
Año
1576.
Por
los menudos de Canaria:
652.337 maravedís.
Por
los menudos de Tenerife: 1.684.530 maravedís.
Por
los menudos de La Palma: 851.167 maravedis.
Por
los menudos de La Gomera:
124.911 maravedí.
Por
los menudos de Hierro: 94.280 maravedís.
Por
los menudos de Lanzarote:
74.230 maravedís.
Por
los menudos de Fuerteventura: 80.495
maravedí.
Por
los azúcares de Canaria:
297.651 maravedís..
Por
los azúcares de Tenerife:
29.485 maravedís.
Por
los azúcares de La Palma: 86.630 maravedí.
Por
los azúcares de La Gomera: 21.870 maravedís.
Por
la marca de Fuerteventura: 35.200
maravedís.
Por
el trigo y cebada en la isla de
Hierro: 27.227 maravedis.
Por
2.299 fanegas y
9 celemines
de trigo
al precio
de tasa:
1.214.268 maravedís.
Por
1.231 fanegas de cebada: 325.116 maravedís.
Por
674 fanegas de centeno y
2 celemines a
la tasa: 190.110 maravedí.
Por
778 quesos
de Lanzarote
y Fuerteventura
a 2
reales: 74.685 maravedis.
Año
1577.
Por
los menudos de Canaria: 599.597 maravedís.
Por
los menudos de Tenerife: 1.206.456 maravedis.
Por
los menudos de La Palma: 602.142 maravedís.
Por
los menudos de La Gomera: 118.150 maravedís.
Por
los menudos de Hierro: 127.464 maravedis.
Por
los menudos de Lanzarote: 18.936 maravedís.
Por
los menudos de Fuerteventura: 93.742 maravedis.
Por
lo que más le perteneció a
Su Señoría de la
isla de Tenerife: 5.230
maravedís.
Por
la marca de Fuerteventura:
35.200 maravedís.[9]
Por
los azúcares
de Canaria, Tenerife y
La Palma: 408.836 maravedis.
Por
las sobras de los hacimientos
de los
años 1574, 75 y 76: 152.037
maravedís.
Por
los repartimientos de las plantas y
restos de pan
de estas islas
de 1575, 1576 y 1577,
repartidos en 1578: 7.065 maravedís.
Por
2.558 fanegas de pan
y 5 celemines de trigo a
la tasa: 1.350.844 maravedís.
Por
1.187 fanegas de
cebada a
la tasa: 313.368 maravedís.
Por
808 fanegas y 3 celemines
de centeno a
la tasa: 277.925 maravedis.
Por
592 quesos de Lanzarote y Fuerteventura a 2 reales chico con grande: 56.832
maravedis.
Año
1583.
Marca
del ganado
de la
isla de
Fuerteventura: 35.200 maravedís.
Menudos
de la
isla de Canaria: 476.835
maravedís.
Menudos
de la
isla de Tenerife: 1.033.021
maravedís.
Menudos
de la isla de La Palma: 572.788 maravedís.
Menudos
de la isla de Ea Gomera: 80.626
maravedís.
Menudos
de la isla de Hierro: 136.358
maravedís.
Menudos
de la isla de Lanzarote: 13.049
maravedis.
Menudos
de la isla
de Fuerteventura: 35.890 maravedís,
Azúcares
de Canaria: 362.759 maravedís.
Azucares
de Tenerife: 115.907 maravedis.
Azucares
de La Palma: 288.852 maravedís.
Azucares
de La Gomera: 7.122
maravedis.
Trigo
de la
isla de Canaria: 418
fanegas y 6 celemines.
Trigo
de la
isla de Tenerife: 1.262
fanegas y 1 celemín.
Trigo
de 1a isla de La.
Palma: 342 fanegas y
7 celemines.
Que
son todas 2.023 fanegas y
2 celemines, que el uno
con e1 otro valió a
12 reales la fanega, monta: 1.165.344 maravedís.
Cebada
de Canaria: 487 fanegas y 1 celemín.
Cebada
de Tenerife: 311 fanegas y
10 celemines.
Cebada
de La
Palma: 156 fanegas y un celemín.
Son
todas: 955 fanegas
a 5 reales
la fanega, valen: 229.200
maravedis.
Centeno
de Canaria: 440 fanegas y 1 celemín.
Centeno
de Tenerife: 360 fanegas y
3 celemines.
Centeno
de La Palma: 325 fanegas y
6 celemines.
Son
todas 1.125
fanegas y
10 celemines,
a 7
reales, valen: 378.280
maravedis.
Este
año no se cogió pan
en las
islas de Lanzarote y
Fuerteventura.
Por
las tocinas,
cueros y sebo de
Fuerteventura: 12.000 maravedís.
Por
195 quintales de
orchillas de Tenerife, Lanzarote
y Fuerteventura, a 98 reales el
quintal, valen: 168.480 maravedís.
Por
residuos de azúcar de
Tenerife: 1.154 maravedís.
Por
plantas y
residuos de
azúcares de
Canarias: 47.320 maravedís.
Por
residuos de pan de Canaria, Tenerife
y La Palma: 30.084 maravedís.
Este
año no
hubo quesos en las
islas de Lanzarote
y Fuerteventura.
Valió
la villa
de Agiiimes, cámara
episcopal:
Por
los azúcares, 6 arrobas: a
1.200 arroba: 7.200 maravedís.
Por
los menudos: 40.000 maravedís.
Por
119 fanegas de trigo,
a 12
reales: 68.544 maravedís.
Por
165 fanegas de cebada, a
5 reales: 44.400 maravedís.
Monta
todo lo de Agüimes: 160.14l
maravedis.
Monta
todo de mala moneda
de Canaria: 5,277.793 maravedis.
Y
reducido a
buena moneda de Castilla: 3.739.046 maravedás.
Año:
1584.
Por
la marca del ganado
de la
isla de
Fuerteventura: 35.203 maravedis.
Por
los menudos de la isla de Canaria:
493.356 maravedis.
Por
los menudos de la
isla de Tenerife: 1.133.205 maravedis.
Por
los menudos de la
isla de La Palma: 632.155 maravedis.
Por
los menudos de la isla de La Gomera:
100.486 maravedís.
Por
los menudos de la
isla de Hierro: 127.864 maravedí.
Por
los menudos de la isla de Lanzarote:
26.742 maravedís.
Por
los menudos de
la isla
de Fuerteventura: 55.516
maravedis.
Por
los azúcares de Canaria: 248.010
maravedis.
Por
los azucares
de Tenerife: 104.586 maravedís.
Por
los azucares de La Palma: 211.101 maravedls.
Por
los azúcares de Ea
Gomera, 5.233 maravedis.
Por
el trigo de
la isla de Canaria, 634,
fanegas y 2 celemines.
Por
el trigo
de la
isla de Tenerife: 1.943
fanegas y 11 celemines.
Por
el trigo de La Palma: 565 fanegas y
10 celemines.
Por
el trigo de la isla de Lanzarote: 300 fanegas
y 3 celemines.
Por
el trigo de
la isla de Fuerteventura: 122 fanegas
y 6 celemines.
Que
son todas 3.566 fanegas y 8
celemines, a 12 reales
fanega, que con 13.608 maravedís que se cobraron del flete y acarretos del pan
de Garafía y
Punta Llana, en La Palma,
valieron 2.068.032 maravedis.
Por
la cebada de la isla de Canaria: 583 fanegas
y 8
celemines.
Por
la cebada de la isla de Tenerife: 713 fanegas
y 4 celemines.
Por
la cebada de la
isla de Lanzarote: 402 fanegas
y 10
celemines.
Por
la cebada de Fuerteventura: 213 fanegas
y 7 celemines.
Son
todas 2.286 fanegas y 2 celemines, a
5 reales
fanega, valieron: 548.690 maravedis.
Por
el centeno de Canaria: 428 fanegas y 8 celemines.
Por
el centeno de Tenerife: 595 fanegas y 6 celeminess
Por
el centeno de La Palma: 384 fanegas
y 2 celemines.
Son
todas 1.408 fanegas y 4
celemines, a 7 reales,
473.214 maravedís.
Por
las tocinetas,
sebo y cueros
de Fuerteventura: 7.706 maravedís.
Por
los quesos de Lanzarote: 8.000 maravedís.
Por
los quesos de Fuerteventura: 12.000 maravds.
Por
los residuos del pan
de Canaria: 7.260 maravedis.
Por
los residuos del pan
de Tenerife: 27.696 maravedís.
Por
los residuos del pan de La Palma: 5.376 maravedis.
Por
las plantas y residuos
de azúcar de Canaria: 26.958
maravedís.
Por
las orchillas de Lanzarote y
Fkerteventura: 9.326 maravedís.
Valió
la villa de Agüimes, cámara episcopal:
Por
los menudos: 80.000 maravedís.
Por
213 fanegas de trigo,
a 12 reales: 122.208
maravedís.
Por
257 fanegas de cebada,
a 5 reales: 61.680
maravedís.
Son
de mala moneda: 6.631.595 maravedís,
y de buena de Castilla: 4.697.392 maravedís.
Año
1585.
Por
la marca del ganado de
Fuerteventura: 35.200 maravedís,
Por
los menudos de la
isla de Canaria: 542.760 maravedis.
Por
los menudos de
la isla de Tenerife:
1.466.351 maravedis..
Por
los menudos de la
isla de La Palma: 720.664
maravedis.
Por
los menudos de la
isla de La Gomera: 87.223 maravedis,
Por
los menudos de la isla de Hierro: 175.860
maravedís.
Por
los menudos de la isla
de Lanzarote: 63.842 maravedis.
Por
los menudos de la isla de Fuerteventura: 84.714
maravedís..
Por
los azúcares de Canaria:
241.162 maravedís.
Por
los azúcares
de Tenerife: 85.612
maravedís.
Por
los azúcares de La
Palma: 173.544 maravedis.
Por
los azúcares de La Gomera:
5.275 maravedís.
Por
el trigo de
la isla de Canaria: 767 fanegas
y 5 celemines,
Por
l trigo de la isla de Tenerife: 1.720 fanegas
y 9 celemines.
Por
el trigo de la isla de La Palma: 685 fanegas y 6 celemines.
Por
el trigo de la isla de Lanzarote:
226 fanegas y 10
celemines.
Por
el trigo de
la isla de Fuerteventura 59
fanegas y 4 celemines.
Son
todas 3.459 fanegas y 10
celemines; las 380 fanegas a
13 reales y las demás a 14
reales, valen: 2.309.056
maravedís.
Por
la cebada de Canaria: 628 fanegas y 4 celemines.
Por
la cebada de Tenerife: 581 fanegas y 6 celemines.
Por
la cebada de La Palma: 417 fanegas y 5 celemines.
Por
la cebada de Lanzarote: 159 fanegas.
Por
la cebada de Fuerteventura: 76
fanegas y 1
celemín.
Son
todas 1.862 fanegas y 4 celemines. Vendióse una
con otra a 4 reales y
18 maravedís. Valieron: 389.112 maravedís.
Por
el centeno de Canaria: 548 fanegas y 9
celemines.
Por
el centeno de Tenerife: 550 fanegas
y 6 celemines.
Por
el centeno de La
Palma: 402 fanegas.
Son
todas 1.501 fanegas
y 3
celemines. Valió, uno
con otros.
6 reales
y 20 maravedís. Valieron: 487.392 maravedis.
Por
lo fletes
y acarretos
de La Palmaa de Garafia y unta Llana: 12.000 maravedís.
Por
los residuos del pan de
Lanzarote: 4.968 maravedis.
Por
los quesos de Lanzarote:
22.000 maravedí.
Por
los quesos de
Fuerteventura: 33.500 maravedís.
Por
las plantas de Canaria: 12.523 maravedís.
La
villa de Agüimes, cámara obispal:
Por
los menudos: 72.889 maravedís.
Por
245 fanegas y
6 celemines de
trigo, a 14 reales: 163.776
maravedis.
Por
208 fanegas
de cebada,
a 5
reales: 49.920 maravedís.
Son
todas: 286.585 maravedís.
Es
todo de mala moneda:
7.197.683 maravedís.
Veamos
ahora, aparte de
la Mesa Episcopal,
cuáles eran los ingresos de
un canónigo o prebendado de la iglesia
canariense.
Año
1575.
Por
los azúcares de Canaria, Tenerife y La Palma: 17.792 maravedís
Por
11 fanegas
de trigo y
5 celemines a la
tasa: 58.828 maravedis.
Por
46 fanegas de cebada a
la tasa: 12.144 maravedíes.
Por
28 fanegas y 8
celemines de centeno a
la tasa: 8.080
maravedís.
Por
el repartimiento del
superávit: 96.871 maravedís.
Por
las distribuciones cotidianas
de todo
el año: 10.771 maravedís.
Por
repartimientos de
azúcar del escusado del canónigo
León y otro de resto de pan de
sobras desta cibdad y otro de remieles
y plantas
que pagó Baltasar de Villalta montan
todos estos tres
repartimientos: 1.784
rnaravedís.
Por
21 quesos que pertenescia
a Lanzarote y
Fuerteventura, a 2
reales cada queso
: 2.015 maravedís.
Montan
los fructos
que pertenescen
a esta prebenda
208.342 maravedís, de moneda de
Canaria, que
son moneda de Castila:
152.089 maravedis.
Año
1576.
Frutos
que pertenescieron este año a una prebenda
o canonjía.
Por
los azucares de Canaria, Tenerife,
La Palma
y Gomera: 18.049 maravedís.
Por
65 fanegas y 5
celemines de trigo en las islas de Canaria, Tenerife, La Palma, Lanzarote
Fuerteventura, a
la tasa: 34.540 maravedís.
Por
23 fanegas y 7
celemines de cebada en todas las islas que vino en grano
a Canaria a la tasa: 6.226
maravedís.
Por
17 fanegas y 2 celemines de centeno,
a la tasa: 4.840
maravedís.
Por
más trigo,
cebada y centeno que en las
islas de Tenerife, Palma, Lanzarote y
Fuerteventura, se vendió
a dinero tuvo
esta prebenda por
el repartimiento
del superávit:
77.910 maravedis.
Por
las distribuciones
este año: 12.000
maravedís.
Por
21 quesos, a 2 reales: 2.016
maravedís.
Tuvo
esta prebenda: 666.396 maravedís de
moneda de Canaria, que de moneda de
Castilla montan: 121.469 maravedís.
Año1577.
Por
los azúcares de Canaria, Tenerife y La Palma: 13.323 maravedís
Por
88 fanegas de trigo, a
la tasa: 44.880 maravedís.
Por
38 fanegas de cebada, a
la tasa: 10.032 maravedís.
Por
28 fanegas
y 1 celemín
de centeno,
a la
tasa: 7.919 maravedís
Por
el repartimiento del superávit:
55.319 maravedis.
Por
las distribuciones al
dicho año: 60.880 maravedís.
Por
los repartimientos de restos de plantas y pan de
estas islas y de las sobras hacimientos,[10]
del 1576, repartidos
en 1518, tuvo esta prebenda:
3.421 maravedis.
Por
16 quesos de Lanzarote
Fuerteventura, a 2
reales cada queso chico y
grande: 536 maravedís.
Tuvo
esta prebenda: 147.310 maravedís de
moneda de Canaria, que son de moneda de astilla: 107.536 maravedís.
La
renta de un
canónigo lo mismo gana una Dignidad. Un racionero la 1/2
de la renta de un canónigo.
El medio racionero, que es un capellán,
la 1/4 parte de un canónigo.
Valores.-
Las canonjías
y dignidades
son iguales
en el valor.
Vale
una canonjía
cada año
5.000 reales.
Esto mismo vale
una dignidad. Las raciones valen la mitad, que vienen a ser 2.500
reales. Las capellanías
la mitad de lo que vale una ración,
que viene a ser
cada capellanía
1.250 reales.
Esto vale
cada prebenda
y no más.” (Luís Fernández Martín, 1975)
Como
en la metrópoli,
el número de los clérigos
doctos era más bien
escaso. Apenas leer
sabían muchos de los que
ocupaban los
escalones inferiores del
clericato, y aún muchos canónigos carecían
de cultura siendo analfabetos
y por consiguiente ni siquiera sabían
latín lengua oficial de la iglesia católica. Muchos de ellos llevaban
una vida licenciosa y poco ejemplarizante siendo verdaderos rufianes, lacra que
la sociedad colonial y criolla venía sosteniendo desde 1524, por estas fechas
las autoridades coloniales de Gran Canaria trasmitían su malestar ante la corte
de la metrópoli tal como exponen en
l siguiente documento: “1524 Septiembre
El
control económico de la iglesia católica en la colonia era tan férreo que
ninguna actividad de la sociedad escapaba a su control, y con mayor interés se
volcaba en las instituciones formadas por laicos que operaban bajo el patrocinio
de algunos gremios profesionales o de obras pías, así como las cofradías:
“Los obispos…
tengan también derecho de visitar los hospitales y colegios, sean los que
fuesen, así como las cofradías de legos, aún las que llaman escuelas o tienen
cualquier otro nombre”.
Asimismo, en el capítulo
IX se recoge la obligación del administrador de los bienes de la cofradía, el
mayordomo, de rendir cuentas anualmente ante el obispo, de la siguiente forma:
“Los administradores, así eclesiásticos como seculares de la fábrica de
cualquiera iglesia, aunque sea catedral, hospital, cofradía, limosnas de monte
de piedad y de cualesquiera otros lugares piadosos, estén obligados a dar
cuenta al Ordinario de su administración todos los años”.
Asimismo, en el capítulo
2 de la Constitución XXXII, denominado Que los Clérigos paguen diezmo, se
decreta la exigencia de contribuir a esta imposición divina los poseedores de
bienes adscritos a una fundación si antes de su erección eran susceptibles de
diezmar:
“Otrosi, porque
algunas personas fundan Capellanias, Aniversarios, y otras memorias en
Monasterios, y lugares píos, y las dotan de heredades, que antes eran
diezmeras, y los poseedores se subtraen de pagar el diezmo, diziendo que son
exemptos dello: ordenamos y mandamos, que tales poseedores, aunque sean
Monasterios, y lugares píos, paguen diezmo de las dichas heredades, aunque sean
compradas, heredadas, ó de otra cualquier manera, como se pagava antes de la
dotacion, salvo si huviera costumbre inmemorial en contrario, que aquella se
guarde”. (Candelaria Castro Pérez, Et. Al.)
El catolicismo es una
secta que controla y explota espiritual y económicamente a sus adeptos y
sometidos desde que nacen hasta más allá de la muerte. Mientras el creyente de
esta confesión orienta todas sus oraciones dedicadas a sus difuntos rogando
para que estos no vayan al infierno, pero esto no es suficiente, es necesario
dar un buen pellizco de la herencia del fallecido a la iglesia católica si
desea que su alma no pase del purgatorio directamente al infierno.
Vemos algunos ejemplos:
“Mandas Episcopales, (En la parroquia de Betancuria. 1666).
“Que
los párrocos procuren se abran por la justicia secular los testamentos, porque
si los pobres difuntos dejaron sufragios a perpetua o “ad tempore” si han
estado en el purgatorio por el descuido de no cuidarse de ello”.
“Que
no salga la cruz de la parroquia a buscar el difunto sin que primero esté el
testamento en poder del colector o del párroco”.
“Que
los herederos y albaceas, cuando el que muera tiene bastante hacienda, sean
liberales en sus sufragios”.
“Cuando
el que muere debe más que lo que tiene, si los herederos o albaceas piden
pompas fúnebres, se les contestará que lo paguen ellos de su casa”.
“Funerales.
Póngase en público, tabla de sus derechos”.
Adagio
episcopal: “Párroco con miedo, perro sin provecho; perro que ladra, guarda la
cabaña). (Bethencourt Alfonso, 1985:254)
Desde la invasión y
colonización del archipiélago, y con las incursiones imperiales de España, la
iglesia católica hace llegar sus misiones a los rincones más apartados de las
islas. Es un hecho que los tiempos modernos vienen marcados por la explotación
que ejerce la metrópoli sobre
nuestro pueblo y cultura. El
etnocidio que se ha llevado a cabo por un proceso intercultural vertical que
consiste en la imposición dominante y opresora del modelo social, cultural y de
civilización hegemónica de los invasores.
Los españoles, además
de tener el poder económico, poseen el control político sobre la colonia, pues
eran los únicos que tenían derecho a cargos públicos. Los criollos, hijos de
colonos españoles nacidos en Canarias, gozaban de los mismos privilegios económicos
que los invasores, pero sólo tenían acceso a los cargos de cabildos.
Si bien la evangelización que se dio a finales del siglo XV ha
terminado, esta ha ido asumiendo nuevas modalidades que van de la mano con los
procesos de colonización.
“Esto significa que el etnocidio no ha terminado todavía, y es por eso
que, en la actualidad, vivenciamos una etapa de re-colonización y
re-evangelización más dura que va acompañada del recrudecimiento de las
formas neocoloniales imperialistas por el monopolio de los servicios, territorio
y recursos naturales en todo el archipiélago.
Esta etapa es más cruda que la primera y se caracteriza por ir acompañada
del mencionado proceso agudo de re-colonización y re-evangelización, en la que
la iglesia católica sigue jugando un rol adoctrinador orientado a terminar,
definitivamente, de matar la identidad
ancestral del pueblo canario.
Un ilustrativo ejemplo de esta etapa es el papel que juega el nuevo Papa,
Ratzinger, quien revela su identidad re-evangelizadora y re-colonizadora al
plantear abiertamente que los pueblos del Tercer Mundo anhelaban la doctrina de
Jesús en tanto buscaban la salvación. Evidentemente, tal acontecimiento ha
desencadenado el descontento de muchos individuos y colectividades que, en búsqueda
de su autodeterminación, se revelan contra la imposición religiosa que deviene
desde el siglo XV.
“No estamos tratando de juzgar a los “malos” para diferenciarlos de
los “buenos”. La crítica a la iglesia católica como institución, no se
dirige a todos los individuos que la han compuesto y que la componen.
Reconocemos el importante papel de muchas individualidades que han utilizado a
la fe católica para el beneficio del pueblo; individualidades que exaltaron los
principios de hermandad y respeto por toda forma de vida. Tampoco se obvia la
sangre de muchos mártires que pensaron y sintieron las contradicciones de un
mundo en el cual muchos han dejado de creer, ya que mientras se enfatizan las
“buenas acciones con todos los seres” por un lado, por otro se vivencia la
colonización y la evangelización a partir de prácticas de extrema brutalidad
y crueldad entre seres humanos, así como con todo ser vivo. .”(Maya
Rivera Mazorco y Sergio Arispe Barrientos, 2007.)
“Para esto es necesario que se siga despreciando la visión de la
realidad que busca el equilibrio con la naturaleza. Con esta intención se ha
empezado a utilizar la categoría “etno” para nombrar a aquellos que aún no
han sido homogeneizados e “integrados” al tren de la modernidad. Es crucial,
entonces, lograr que el “otro” asuma a las instigaciones colonizadoras y
evangelizadoras como necesarias y “útiles” para el bien y el desarrollo.
Enrique Dussel dilucida que el “mito de la modernidad” permite
victimar al inocente (al “otro”) declarándolo causa culpable de su propia
victimización. Por lo tanto, es una exigencia que se le salve de este estigma a
través de la modernización. Con este argumento, la re-colonización y
re-evangelización consiguen lavarse las manos y quitarse toda culpa ya que están
salvando al “otro” con el desarrollo. A partir de este razonamiento, el
sufrimiento del conquistado (colonizado, subdesarrollado) es interpretado como
el sacrificio o costo necesario de la modernización. .” (Maya Rivera Mazorco y Sergio Arispe Barrientos, 2007.)
Los distintos
ingresos
Según Barriocanal,
“la casilla de la renta supone una parte pequeña de la financiación de la iglesia
católica, en torno al 20 o 25 por ciento”. El resto, según sus
palabras, “proviene de la aportación directa de los fieles”. Al
vicesecretario económico de
Inversión en
educación
En el tema educativo,
por ejemplo, los cerca de 2.400 centros católicos concertados obtienen
subvenciones que rondan los 3.500 millones de euros, y el erario público paga
los sueldos de sus cerca de 81.000 docentes. Además, los profesores que
imparten la asignatura de Religión, ya sea en centros públicos, privados o
concertados, son elegidos por
A estos gastos habría
que sumar los de las siete universidades vinculadas a distintas órdenes
religiosas que hay en aquel país, 15
facultades eclesiásticas, 41 centros teológicos, 11 colegios universitarios,
55 escuelas universitarias y 72 institutos superiores que reciben financiación
pública.
Actividad
hospitalaria
ONG y
patrimonio
La actividad social de
la iglesia católica también recibe
subvenciones estatales a través de la organización Cáritas, y de diversas ONG
como Manos Unidas, y entidades como
Financiación
con el IRPF
Por si estos datos no
fueran suficientes, el modo en que la iglesia
católica recibe el dinero del IRPF: cada católico
que marca la casilla de la iglesia no aporta
el ni un solo euro de su bolsillo al IRPF, sino que es el Estado
español el que cede el 0,7
de esos impuestos a
Sobrefinanciación
El Ejecutivo socialista
dio, durante sus dos primeros años de gobierno, seis millones de euros más que
durante el mandato popular. Al suprimir la asignación fija de 150 millones del
IRPF,
La historia, entendida
como proceso histórico de trabajo o sistema de producción y reproducción
humana, ha girado a lo largo de los milenios alrededor de la apropiación ajena
de lo que fueron y son los frutos y el esfuerzo físico del trabajo de los demás.
Este hecho, radicado en la propia división del trabajo y en la sociedad de
clase, ha permanecido a través de las diferentes etapas históricas o modos de
producción bajo formas variadas pero de una misma esencia, que es la sumisión
de una parte de la sociedad en condición de clase explotada bajo la otra,
dominante, situación que se agudiza muchos más en las naciones sometidas por
la fuerza de las armas, como es el caso de Canarias.
Desde esta páginas
hacemos un llamamiento a los sacerdotes católicos canarios (no los foráneos
mercenarios que ejercen en Canarias) para que retomen el espíritu del Concilio
Vaticano II y la doctrina emanada del mismo y sean críticos y combatan al
neocolonialismo que lleva adelante su política ideológica, que incluye la
instrumentalización de la iglesia católica y sus colegios y centros educativos
como freno frente a la revolución cultural y al independentismo, lo que se
traduce en perpetuación del sistema colonial dominante. Asuman la corriente
ideológica que se ha puesto en marcha irreversiblemente por una iglesia católica
del pueblo: Se trata de romper la alianza milenaria con las clases poderosas y
con las potencias imperialistas, de solidarizarse con las luchas de los pobres,
las clases oprimidas y, los pueblos
dependientes.
Agenttzir
Aknaran, 24 n wanghid n 10º achano n tallit taynay tagwancet.
Febrero de 2011.
---»Continuará…
[1]
La iglesia católica-el Vaticano, no me digan miembros de la cúpula de
la iglesia de la metrópoli, que una cosa es la iglesia católica y otra el
Vaticano. La iglesia- el Vaticano tiene el segundo tesoro en oro más grande
del mundo, detrás de los Estados Unidos. Esta cantidad de oro está
valorada en 3.500.000.000 de euros según documentados estudios financieros.
“United Nations World Magazine” calculó que el tesoro de oro sólido
del Vaticano llega a varios cientos de millones de dólares. Una gran
cantidad está almacenada en lingotes de oro en el Banco de Reserva Federal
de los Estados Unidos, y el resto está en bancos de Inglaterra y Suiza.
Pero esta es sólo una pequeña porción de la riqueza del Vaticano, que sólo
en los Estados Unidos supera a la de las cinco corporaciones gigantes más
ricas del país.
[2]
“El
Vaticano es hoy el consorcio económico religioso más grande del mundo y sólidamente
comprometido en innumerables empresas del ámbito de inmobiliarias, plástico,
electrónica, acero, cemento, textiles, química, alimentos y construcción”
[3]"DM
5.000.- por una bendición firmada personalmente por el papa con certificado.
DM 30.000,- por una audiencia privada con el papa, incluye video.
DM 50.000,- donación por un título
de doctor honoris causa
[5]
Según el diario ABC en agosto de 2004, el
presupuesto de
[6] Durante algunos siglos las isla tuvieron moneda propia.
[7]
El ducado
equivalía a
once reales
y a
375 maravedís.
[8]
Menudos: Diezmos de los
frutos menores, como hortalizas,
frutas, miel, cera y
otros semejantes, que
se arrendaban y
recaudaban con
el nombre de renta de
menudos.
[9] “Marca” es decir, rebaños de cabras u ovejas que se crían semi salvajes y se apañan un vez al año.
[10]
Hacimiento de rentas:
Arrendamiento de
ellas hecho a
pregón.