AGRESIONES SUFRIDAS EN CANARIAS

POR SU CONDICIÓN DE COLONIA (I)

 

Chaurero n Eguerew  

 

 

Históricamente la política exterior de los reinos de España o las Españas (recordemos que el ente denominado España, como tal no tuvo cohesión política y territorial hasta 1812) ha sido nefasta para sus colonias, como consecuencia de las múltiples guerras iniciadas o en que se ha visto envuelta la metrópoli, las colonias hemos sido victimas propiciatorias e inocentes ofrendadas al dios de la guerra por la potencia colonizadora.

La Historia esta repleta de hechos bélicos desarrollados contra las colonias españolas, especialmente en esta de Canarias, situada en el noroeste de nuestro continente africano.

El Archipiélago Canario dada su situación geoestratégica ha sido presa apetecida por los reinos europeos, especialmente a partir de la invasión de América. Así desde los tiempos precoloniales hemos sufrido incursiones depredatorias por parte de aragoneses, mallorquines, catalanes, normandos, castellanos y portugueses, a los cuales hemos hecho frente durante casi un siglo, siendo finalmente sometidos por la superioridad armamentística y métodos deshumanizados y criminales de las huestes mercenarias de Castilla.

Las acciones bélicas digamos regladas llevadas a cabo contra el Archipiélago Canario por potencias extranjeras no española, ha sido sistemáticamente tratada por la historiografía oficial con desfachatez como “ataques piráticos”, con ánimo de restar importancia a la actitud política seguida por las potencias europeas con imperios coloniales respecto a las colonias del adversario.

Vamos a dar un somero repaso a algunos de estos ataques que hemos sufrido los canarios como resultado de la nefasta política de los reinos españoles y por el entreguismo de colonos y criollos a los dictados de la metrópoli, de la misma excluiremos los apresamientos y encuentros navales que han sido múltiples, centrándonos únicamente en los desembarcos hostiles.

Las continuas luchas sostenidas por los reinos de España con Alemania, contra ingleses, holandeses, o franceses, así como las razias esclavistas en el continente, producían siempre en el Archipiélago un triste resultado.

Ataques franceses

El 29 de Octubre de 1543, unos de los más famosos Marinos franceses del siglo XVI, Jean Alfonse de Saintonge ataca Winiwuada n Tamarant (las Palmas de Gran Canaria).

Desembarca y toma la Fortaleza de la Isleta y de paso 3 navíos cargados de azúcar. Las Milicias de la Isla lo obligan a reembarcar.

En noviembre de 1551.Dos navíos Franceses atacan Titoreygatra (Lanzarote,) siendo rechazados al desembarcar. El mismo mes se presenta ante las Palmas, donde se había refugiado la Flota de Indias, una Flotilla Francesa al mando de un Capitán apodado “El Clérigo”.

Este Corsario se había apoderado de varias naves en el Puerto de Santa Maria con la ayuda de Pilotos Portugueses al servicio de Francia. En Winiwuada (las Palmas) asaltan un Galeón de la Flota de Indias capturando la carga y a más de cien personas. Atacan después Titoreygatra (Lanzarote) desembarcando más de 700 hombres y saqueando la Villa de Teguise, capital de la Isla.

La guerra entre el monarca español Carlos V (1500-1558) y Enrique II  de  Francia durante el transcurso de la Campaña de Lorena, hace que sean franceses los primeros en atacar las islas mediante la guerra a las colonias. Los galos que más destacaron fueron  Juan Florín y François Leclerc, (Sombreuil) este último apodado "pie de Palo" (Jambe de bois), el cual al frente de 11 buques y unos 500 hombres saqueó e incendió el puerto de Tedote (Santa Cruz de La Palma) en  1553. Otras acciones similares se sucedieron en Tazacorte.

En julio de 1552, Antoine Alfonse de Saintonge intenta atacar el Puerto de Añazu n Chinech (Santa Cruz de Tenerife) para vengar la muerte de su padre a manos de un navío Español. Perseguido por un navío Canario al mando de López de Cepeda, es cañoneado y hundido ante el Puerto Tinerfeño, teniendo el mismo final que su progenitor.

1552 En noviembre se presenta ante Winiwuada n Tamarant (las Palmas de Gran Canaria) una Flota Francesa de 34 navíos, siendo rechazados por las Fortalezas y Milicias Canarias. Al día siguiente logran desembarcar 1.300 hombres en Arinaga, al sur de la Isla, e intentan avanzar hacia las Palmas arrasando con todo lo que encuentran a su paso. La falta de agua y lo duro de la orografía los hace desistir cuando habían ya avanzado 3 leguas.

En Diciembre de 1552, una  Flota Francesa ataca Titoreygatra (Lanzarote) y saquea la Villa de Teguise no sin antes asaltar por el camino a dos Galeones de la Flota de Indias.

El 1 de Septiembre de 1556, se presenta ante el Puerto de Añazu  n Chinech (Santa Cruz de Tenerife) una Escuadra Francesa al mando del Almirante Nicolas Durand de Villegaigon, siendo rechazado por la artillería del Castillo de San Cristóbal.


Diciembre de 1556. Estando la metrópoli  en paz con Francia, se presenta ante Añazu n Chinech (Santa Cruz de Tenerife,) la Flota del Almirante Legendere. A la vista del Puerto, capturan una carabela e intentan durante 3 días desembarcar, siendo mantenidos a raya por la artillería de los fuertes.

El 24 de agosto de 1571 Jean de Capdeville se presenta ante la Villa de Ipalam (San Sebastián) y después de cañonearla y vencer la débil resistencia, la saqueo y la prendió fuego. Todos los Isleños que fueron hechos prisioneros con las armas en la mano, incluso el Párroco, Fray Antonio de Santa Maria, fueron conducidos a bordo y tras un simulacro de juicio, condenados a muerte arrojándolos al mar con una gruesa piedra colgada del cuello.

En Abril de 1572, un contingente Hugonote compuesto por 70 hombres desembarca  en la Isla Titeroygatra (Lanzarote) y se enfrenta a las Milicias de la Isla al mando del colono Don Agustín de Herrera. El atacante lleva la peor parte, y 20 hombres son capturados, siendo los demás puestos en fuga, huyendo hacia su barco.

 

En el mes de mayo de 1572, 4 Naos Franceses desembarcan 300 hombres en la misma Isla con el objeto de liberar a sus camaradas, que mientras tanto habían logrado fugarse apoderándose de una embarcación.

 

En Marzo de 1581, una Flotilla Francesa compuesta de dos navíos al mando de los Capitanes Le Testu y la Motte, ataca la Isla Titoreygatra (Lanzarote.) Capturan 3 navíos anclados en el Puerto de Arrecife y desembarcan en el, saqueando de paso los caseríos proximos. Al intentar avanzar hacia la Villa de Teguise son rechazados por las Milicias  de la isla.

La Isla de La Gomera Ipalam (San Sebastián). En 1762 llega, para combatir a los ingleses, el buque Le Rubis, al mando del Capitán  François Desseaux; algo más tarde, en 1797, la corbeta La Mutine , cuya tripulación contribuyó a la defensa de la ciudad de Santa Cruz frente al ataque de Nelson, fue saqueada en el puerto santacrucero por los ingleses.

Ataques ingleses

Bajo el reinado en la metrópoli de Felipe II se desata una vez más la rivalidad entre esta corona y la inglesa. Como consecuencia, la colonia canaria se convierte en blanco de las incursiones de los navíos ingleses. Los ataques y saqueos son tan frecuentes que el Rey se ve obligado a fortalecer el aparato defensivo del archipiélago.

Entre los marinos  ingleses más conocidos y temidos sobresalen John Poole, Cooke, John Hawkins, más conocido en las islas como Aquines, Drake (1585) y Blake (1656).

El ataque de este último a Santa Cruz de Tenerife podemos considerarlo como un intento más de Inglaterra por apoderarse de la isla.

1583 el jefe de las Milicias de Achbuna (Abona) en la isla Chinech (Tenerife) rechaza un ataque de ingleses.

En 1586, un navío ingles, arriba al Puerto de Arinaga en Gran Canaria. Desembarcan y capturan a un pescador, este les informa de la presencia de una gran flota Española en el Puerto de las Palmas. Logran apoderarse con mucho sigilo de uno de los barcos cargados de mercancías, al que desvalijan. Este mismo año un grupo de 40 ingleses desembarcan en Adeje, Chinech (Tenerife,) saqueando el pueblo y el ingenio de Azúcar de los Ponte.

En 1590 desembarcan en Erbania (Fuerteventura) 40 soldados ingleses con la intención de saquear la Villa de Bethancuria, siendo rechazados. En ese mismo año, un corsario Ingles apresa una carabela Portuguesa frente a las costas de Lanzarote. El Marques de la Isla se ve obligado a pagar rescate para liberar a la tripulación.

 

En Agosto de 1592, un navío Ingles pretende atacar el Puerto de Santa Cruz de Tenerife, siendo rechazado. Lo intenta en la Gomera, capturando una nave Flamenca, y en Benahuare (La Palma,) donde es rechazado por la artillería de la plaza.

En marzo de 1593, dos navíos ingleses al mando del Capitán Harper atacan el Puerto de Arrecife de Titoreygatra (Lanzarote,) siendo rechazados. En julio, se produce un nuevo ataque de 3 navíos ingleses al mismo puerto y con la misma suerte.

1595 febrero 6. Desde el puerto de Plymouth inicia su singladura una flota Inglesa al mando de Sir Walter Raleigh.El objetivo de esta Flota era las colonias  españolas en América, pero antes de dar el salto al Caribe, Raleigh se entretuvo merodeando por aguas Canarias.


El 20 de Febrero desembarco en la Isla Erbania (Fuerteventura) para hacer aguada y de camino robo el ganado suficiente para abastecer su flota. En una de las caletas de la Isla capturo a dos navíos, uno español cargado de armas de fuego que enviaba el Rey de la metrópoli para las Milicias de las Islas y el otro flamenco con un gran cargamento de vinos de Canarias. Ambas presas fueron de gran valor para Raleigh. Iniciando a continuación su periplo americano.


El 7 de Septiembre de 1595 parte del puerto inglés de Plymouth una nueva flota, con intención atacar los Galeones de la Flota de Indias. La mandan al alimon Drake, con insignia en el buque  Defiance y Hawkins, en el  Garland. Las Tropas de desembarco las manda Sir Thomas Baskerville, en total el contingente de tropas está compuesto de  2.800 hombres.


El 6 de octubre de 1595, se avisto en las costas de Tamarant (Gran Canaria) la Flota de 28 navíos. El objetivo era atacar la ciudad de Winiwuada (las Palmas) y para tal fin preparan una fuerza de desembarco de 1.400 hombres al mando del Capitán Baskerville a bordo de 30 lanchas y embarcaciones ligeras.


El primer intento de Barkerville en la playa de Santa Catalina acaba en fracaso, la Fortaleza de la Luz responde con su artillería al fuego Ingles y las Milicias Isleñas, bien atrincheradas, repelen la ofensiva. Drake ordena un segundo ataque más al sur, fuera del alcance de la artillería del Castillo. Observada la maniobra por las fuerzas canarias, el Gobernador Alvarado desplaza sus fuerzas, en el momento de efectuar el segundo desembarco ya están esperando las Milicias en las playas. Tras dos horas de combate, los ingleses se retiran con más de 200 bajas y 4 naves maltrechas sin haber conseguido infligir graves daños ni a las Milicias ni a la Ciudad.


George Clifford, Conde de Cumberland, en abril de 1598 ataca la isla Titoreygatra (Lanzarote) de paso hacia América. Desembarca 600 hombres comandados por  John Barkley y se dirige a la Villa de Teguise, que encuentra abandonada, la población ha huido hacia los refugios de las cuevas volcánicas. Lo mismo ocurre con la Fortaleza de Guanapay, abandonada por sus 100 defensores. Barkley saquea la Villa pero no la prende fuego como era habitual.

 

Cumberland se hace con un importante botín consistente en los doce cañones de la fortaleza de Guanapay, las campanas de la iglesia católica y un importante cargamento de vinos, que envía a Inglaterra. El día 22  Cumberland continua su derrotero hacía América.

 

El 12 de 1617 parte del puerto de Plymouth (Inglaterra) una escuadra de 17 buques y 2.000 soldados al mando de Raleigh.


La flota de Raleigh se adentra en el Atlántico y después de dar rumbos inciertos llega a aguas Canarias a finales de agosto. En la costa de África capturan una embarcación Canaria y después intentan un ataque frustrado sobre Winiwuada (las Palmas.)


Raleigh se ve obligado a avituallar sus navíos y se presenta en el Puerto de Arrecife en Titorygatra (Lanzarote) el 16 de Septiembre. Desembarca 600 hombres en actitud claramente hostil y se adentra en la Isla. Son atacados por las Milicias isleñas teniendo en la refriega 15 muertos.


Necesitado sobre todo de agua, Raleigh desembarca en otro punto de la Isla. Uno de sus Capitanes, John Bailey, aprovecha la ocasión, abandona la flota y regresa a Inglaterra con la intención de informar de la violación de las órdenes de Jacobo I. Los hombres de Raleigh son sorprendidos por las fuerzas locales mientras efectuaban la aguada y cargaban los toneles en los botes, deben de salir a la carrera y abandonar Titoreygatra (Lanzarote) el 22 de Septiembre.

 

No habiendo completado la aguada para sus barcos, Raleigh no se atreve a presentarse en las Islas mayores, ya avisadas de su presencia y sobre las armas sus Milicias y Castillos. Se presenta pues en la Gomera, donde lo reciben las Milicias a pie de Playa impidiéndole el desembarco. Raleigh adopta entonces una postura pacifica, solicita al Conde permiso para avituallarse de agua. El conde se lo concede, se cargan en los barcos 240 pipas de agua y algunas reses, pero a cambio Raleigh se ve obligado a devolver la nave capturada en la costa del continente y a pagar por los daños causados.

 

El día 30 abandona la Isla rumbo a la Guayana.

 

En julio de 1656, se recibe en las Islas Canarias la noticia del bloqueo de Cádiz (España)  por la Escuadra inglesa del Almirante Blake. Esto forzaba a todos los navíos españoles procedentes de las colonias de América a acogerse a los Puertos Canarios como único refugio posible. Se esperaba a la Flota de Nueva España en los próximos meses.


El 28 de Diciembre llegaba a Santa Cruz de Tenerife el buque Madama de Brasil, procedente de Puerto Rico y transportando medio millón de Pesos. El 18 de Febrero llegaba a Tedote n Benahuare (Santa Cruz de la Palma) la Flota de Mejico al mando de Don Diego de Egues. La Flota, cargada con Plata Mejicana por importe de 10 millones de Pesos y otras mercancías valiosas, había partido en Diciembre del Puerto de la Habana. Egues, partio de la Palma con la intención de llegar como fuera a Cádiz, pero después de unos días de navegación se supo que Blake lo estaba esperando por el camino. De acuerdo con el Capitán General de la colonia, Alonso de Dávila, decidió dar media vuelta y resguardarse en el Puerto de Añazu n Chinech (Santa Cruz de Tenerife) al amparo de sus fortificaciones el 2 de Marzo. La Flota de Diego de Egues se componía de 9 navíos mercantes y 2 buques de guerra como escolta.


Ante tal estado de cosas, se reforzaron las defensas de Santa Cruz. Se construyeron dos nuevas baterías al norte de la Bahía, para Abril de 1657, Santa Cruz estaba defendida por 99 bocas de fuego. Egues decidió desembarcar la plata y guardarla en el interior de la Isla para mayor seguridad. Enterado Sir Robert Blake de la llegada de la Flota de Egues a Tenerife decidió atacar Santa Cruz y apoderarse de naves, cargamento y del propio Puerto.


El 29 de Abril, se divisa a la Flota de Blake, compuesta por 36 buques. Se preparan Flota, Castillos y Milicias para la defensa. El 30 Blake se acerca a la plaza con 28 naves y comienza a bombardear a la Flota y las Fortificaciones canarias. Durante varias horas se sucede el cañoneo por ambas partes.

 
Los ingleses intentar abordar con lanchas a los mercantes y apoderarse de ellos. Mientras los dos Galeones de Guerra con que cuenta Egues, el Jesus Maria, y el Concepcion, son acribillados durante mas de 4 horas por el fuego ingles. Imposibilitado de seguir defendiéndose y en total inferioridad, Egues ordena abandonarlos y para no darlos como trofeo al enemigo da orden de volarlos, causando la explosión muchas bajas a los atacantes. Los buques mercantes son incendiados, unos por el fuego ingles y otros por el propio Egues. Egues tenia como orden principal dada por el propio Felipe IV el defender a toda costa el Tesoro de Nueva España a un a costa de perder sus barcos.


La Escuadra de Don Diego de Egues quedo reducida a cenizas. Blake siguió batiendo la Plaza con saña todo el día sin poder quebrantar la resistencia ni poder intentar el desembarco. Al llegar la noche se retiro sin poder obtener ninguna presa ni beneficio.


Los Españoles habían perdido la Flota de Mejico, pero no el Tesoro que era lo importante, aun así las bajas inglesas fueron cuantiosas. Entre muertos y heridos las bajas pasaron de las 400 y muchos navíos sufrieron serios desperfectos, el Insignia de Blake, el  Speaker, quedo fuera de combate. En Tierra se contaron 3 muertos por las Milicias Canarias. La flota de Egues si tuvo mas bajas, sobre todo murieron algunos destacados Oficiales.

 

El 5 de Noviembre 1706, se divisa una Flota de 13 buques de Guerra con Bandera Francesa que pretenden penetrar en el Puerto de Santa Cruz.

 
La Flota cambia de bandera y se descubre que es inglesa y esta al mando del Almirante Jennings. Se decreta alarma general y se movilizan las Milicias de la Isla, hasta 4.000 hombres ocupan las playas y fortalezas. El fuego lo inicia el Castillo de San Cristóbal, principal fortaleza de la Isla, mientras los ingleses intentan desembarcar en las Playas una fuerza de infantería por medio de 37 lanchas.


La Fuerza Inglesa es descubierta a tiempo y rechazada con muchas perdidas. Al cabo de unas horas se presenta otra lancha, pero con Bandera de Parlamento. El Almirante ingles se disculpa por el ataque e informa a las autoridades coloniales de lo mal que le van las cosas de la Guerra a Felipe V, invitándolas a cambiar de bando y proclamar al Archiduque Carlos.


Esta fue la repuesta de las autoridades coloniales españolas:


”Por lo que toca a las noticias acerca del estado de la Guerra, aquí sabemos y estamos muy satisfechos de las gloriosas Armas de nuestro Rey Don Felipe V, restituido a su Corte y arrojados sus enemigos de los Reinos de Castilla. Cuando, Dios no lo quiera, se halle S.M. en diferente estado, siempre esta Tierra se conservara en el fiel cumplimiento de sus obligaciones como fielísimos vasallos de S.M. Felipe V, a quien Dios Guarde, hasta el ultimo espíritu”


La contestación y el resultado del combate obligo a Jenning a retirarse dando por terminada su aventura en aguas Canarias.

 

El 21 de Octubre de 1740 apareció frente a las costas de Erbania (Fuerteventura) un navío Ingles de 12 cañones que desembarco 50 hombres bien armados con intención de dirigirse al pueblo de Tuineje y saquearlo. El buque  se había apoderado en fechas anteriores de 3 buques mercantes españoles.

 

Al enterarse de la noticia, el Gobernador de la Isla, José Sánchez de Umpierrez, reunió a toda prisa como pudo a un grupo de Milicianos para hacerles frente. Al final eran 37 hombres, pero muy mal armados ya que solo disponían de 5 armas de fuego.

 
Umpierrez salio al encuentro de la Fuerza Inglesa con la intención de contenerlos hasta que llegaran más refuerzos. Los ingleses se hicieron fuertes en una loma, y a Umpierrez no se le ocurre otra cosa que lanzarse al asalto, pero mandando en vanguardia una recua de 40 Camellos. La descarga de los ingleses cayo sobre los animales, sin darles tiempo a volver a cargar los Milicianos los atacaron al arma blanca, matando a 30 hombres y quedando los otros 20 prisioneros.


1749 29 de octubre un navío Británico queriendo vengar la derrota, desembarco en el mismo lugar 55 hombres y se encamino al mismo pueblo. Enterado de esta segunda irrupción, el Capitán de Milicias Melchor Cabrera Bethencourt reunió a algunos Milicianos y empleo la misma táctica, lanzarles los camellos por delante y a degüello. No quedo un solo ingles con vida. Cabrera por su parte contó 6 muertos.

 

En 1741, el Capitán Ingles Joseph Stocker de la Corbeta Resolution , pierde la vida junto con alguno de sus hombres al intentar desembarcar en la isla Benahuare ( La Palma. )


1743, se presenta ante Ipalam (San Sebastián) en la Gomera un escuadrilla Inglesa de 3 buques al mando del Comodoro Charles Windon, que cañoneo la Villa y sus dos Castillos todo un día. A la mañana siguiente intentaron desembarcar siendo rechazados en la misma Playa. Windon también apareció ante Benahuare (La Palma,) pero desistió si intentar nada a las pocas horas al ver el estado de las Defensas.


En Junio de1743, otra flotilla de 5 naves Inglesas se presenta en Winiwuada n Tamarant (Las Palmas de Gran Canaria). Se toca a alarma General y las Milicias ocupan las playas. Los ingleses desisten al cabo de 3 días de amenazar la población.

El ataque de Horacio Nelson, el famoso almirante inglés, al Puerto de Santa Cruz de Tenerife el 25 de Julio de 1797 debemos enmarcarlo en este apartado de ataques navales; aunque tuvo fuertes implicaciones políticas, pues España, como aliada de Francia, estaba en guerra con Inglaterra.

Holandeses y Mazigios

Son también los holandeses los que protagonizan episodios de ataques en Canarias; sus objetivos, aparte del móvil del botín, son políticos, bélicos y sobre todo religiosos.

El 26 de Junio de 1599, apareció ante Winiwuada n Tamarant (las Palmas de Gran Canaria,) una potente Escuadra de 73 buques y 9.000 hombres de desembarco al mando del Almirante holandés Van der Doez.

 

Nada mas avistada se puso la ciudad en estado de alarma, se dirigieron hacia las playas todas las fuerzas disponibles, 5 compañías de Infantería, 1 de Caballería y 11 piezas de artillería. En la playa de Santa Catalina se situaron 9 de las piezas y las otras dos en la playa del puerto al amparo del Castillo de la Luz.

 

La Escuadra holandesa empezó a bombardear las fortalezas de la plaza al tiempo que 27 compañías de Infantería en 150 lanchas desembarcaron en las playas al frente del propio Almirante, que por poco no muere al desembarcar, el Capitán Cipriano de Torres se abalanzo solo sobre Van der Doez con una alabarda en la mano y el agua por el cuello y cogiéndolo por la armadura lo arrojo de la lancha, el bravo Capitán Torres murió acribillado por los Mosquetes Holandeses.

 

La rendición del Castillo de la Luz fue casi definitiva para que los Holandeses pudieran tomar la ciudad, sus buques se pudieron acercar sin peligro y cañonear a placer las posiciones canarias.

 

Van der Doez ofrece retirarse a cambio de 400.000 Ducados, oferta que es rechazada por la isla.

 

Ante la fuerte resistencia canaria en el Monte del Lentiscal, y la imposibilidad de hacerse con los caudales de la isla, Van der Doez decide retirarse y abandonar la ciudad el 4 de Julio, no sin antes dejarla convertida en una hoguera. Los daños fueron importantes pero nada del otro mundo, entre el incendio, las 32 piezas de artillería y los daños de las Fortalezas, las campanas de la catedral, 150 pipas de vino y 20 cargas de azúcar, ascendió la suma de pérdidas a 93.000 Ducados

Los muertos Holandeses fueron en total unos 800, 650 en el ataque a la ciudad y 150 en el Monte Lentiscal y unos 300 heridos. Los canarios unos 60 muertos y heridos sin cuantificar.

Tras abandonar Tamarant (Gran Canaria,) la Escuadra de Van der Doez puso rumbo a la Isla de la Gomera, a donde llego el 13 de Julio de 1599. Al día siguiente desembarco una fuerza de 800 hombres en la Villa de Ipalam (San Sebastián,) pero no cogió por sorpresa al Conde Don Diego de Ayala, Señor feudal de la Isla.


La Villa había sido evacuada por sus habitantes, que por si acaso se habían llevado al interior los cañones, objetos de valor y hasta las campanas de la Iglesia.


El Conde con las Milicias gomeras  se habían atrincherado en la Playa y nada mas desembarcar los holandeses los recibieron con tiros de arcabuz y unas buenas rociadas de piedras con tan buena puntería que descalabraron a varios holandeses. Ante esto, Van der Doez corto por lo sano, ordeno a los buques cañonear la Villa hasta que los Isleños abandonaran sus posiciones. Se retiraron el Conde y sus hombres al interior de la Isla , de orografía escarpada como pocas en el mundo, y Van der Doez desembarco en Ipalam (San Sebastián.)

 
Los Holandeses, 7 compañías, unos 800 hombres, avanzaron por el barranco de la Villa, con una vanguardia de 120 hombres, cuando les salio al paso una partida de solo 11 hombres, de ellos 7 eran Milicianos, siendo el resto paisanos.

Según recoge el Acta del Escribano Publico que dio cuenta del suceso:

”Los cuales siete soldados, favorecidos con la ayuda de otros cuatro naturales, les acometieron con lanzas y los fueron matando, como en efecto hicieron con ciento siete de ellos, ganándoles sus armas sin haber peligrado ni muerto ninguno de los once soldados, mas solo cinco salieron heridos y no de heridas peligrosas, que hoy en día todos andan en pie con sus armas”.  Van der Doez decidió partir de la Gomera después de dividir en dos su Escuadra, el partió con rumbo al Golfo de Guinea el 21 de Julio de 1599 con 37 naves y Jan Gerbrantz regreso a los Países Bajos con las restantes 35.

Los imazighen continentales asaltaban las islas especialmente las orientales desde los tiempos inmediatamente posteriores a la invasión y  conquista castellana, como réplica a las incursiones punitivas que los colonos y mercenarios españoles asentados en  Canarias hacían en las costas del continente.

El 22 de Septiembre de 1569 se avistan frente a las costas de Titeroygatra (Lanzarote) un Flotilla de 10 Galeras de  mazigios procedentes de Sale, Marruecos. Las manda el Xerife Calafat con unos 600 hombres distribuidos en siete banderas.

 
Siete de los buques atacan el Puerto de Arrecife y se apoderan de el, mientras las otras tres embarcaciones permanecen en la mar cubriendo la retirada. En auxilio de las Milicias Lanzaroteñas acuden 300 Grancanarios al mando del Capitán Juan Civerio y 500 Tinerfeños mandados por el Alférez Mayor Francisco de Valcarcel.


Con la ayuda de estas tropas se logra expulsar a los atacantes mazigios el 20 de Octubre, no sin poder impedir que saqueen la Isla y se llevan cautivos a 200 personas. En justa represalia de las continuas razias que los colonos señores de la isla efectuaban en el continente. Calafat continuo sus correrías por aguas Canarias se dice que perseguido por Juan de Civerio.

 En 1571 el Capitán Dogali, apodado el “Turquillo” zarpa de Sale con 7 galeras y 400 hombres. El 21 de Septiembre ocupa la Villa de Teguise sin encontrar resistencia. El Conde de Lanzarote se había encerrado en el Castillo de Guanapay, situado en una montaña que domina la población, con lo más destacado de sus habitantes. Los imazighen saquean e incendian la Villa y ponen sitio al Castillo sin conseguir tomarlo.

Reembarcan el 7 de Octubre llevando más de 100 cautivos. Muchas familias de Lanzarote emigran a Tenerife y Gran Canaria después de estas incursiones, la Isla queda casi despoblada.

En el verano de 1586, Morato Arraez, famoso Capitán de origen Albanes, parte de Argel con 11 galeras y 1.200 hombres. Pasa el estrecho y se presenta ante Titoreygatra (Lanzarote.) En lugar de desembarcar en el Puerto de Arrecife, donde lo esperaba el Marques de la Isla, El esclavista Agustín de Herrera, con sus tropas, lo hacen en otro lugar y avanzan hasta la Villa de Teguise, quemándola por enésima vez en pocos años.

Parte de la población busca refugio en la cueva de los Verdes, tubo volcánico de considerable longitud y el resto, unas 1.000 personas, se encierra en la Fortaleza de Guanapay con las Milicias de la Isla. El dos de Agosto rinden los mazigios el Castillo del Puerto de Arrecife y ponen sitio al de Guanapay, defendido por el Capitán Diego Cabrera de Lemes.

En 1593 una Flotilla de  argelinos al mando de Xaban Arraez se presenta ante el Puerto de Arrecife y lo reduce a cenizas. Desembarcan posteriormente  con 230 hombres en Erbania (Fuerteventura) y queman la Villa de Batancuria, capital de la Isla. Al saberse estas noticias en Gran Canaria, Don Luís de la Cueva, Capitán General de la colonia, envía 240 soldados españoles del presidio con la orden de arrojar al mar a los atacantes.


Los argelinos, no más de 40 según las Crónicas, tendieron una emboscada a las Tropas españolas en el lugar conocido como Siete fuentes. Toda la fuerza fue muerta o hecha prisionera al intentar huir ante un enemigo al que superaban 6 a 1, los argelinos se retiraron llevando sus barcos cargados de botín y prisioneros.

 

El 1 de mayo de 1618 una Flota de 36 Bajeles Argelinos con 4.000 hombres a bordo al mando de los Arraez Tabac y Soliman, se presentan ante el Puerto de Arrecife en la isla Titerogatra (Lanzarote). 

 

Saquean la Villa de Teguise mientras el Marques Don Agustín de Herrera y la población colona se esconden en cuevas, en especial en la de los Verdes. Los asaltantes argelinos rastrean toda da Isla en busca de cautivos, todo el que puede huye en barcas hacia la cercana Isla de Erbania (Fuerteventura.)


Más de 1000 personas se habían refugiado en la Cueva de los Verdes. Todos los esfuerzos de los argelinos de ocuparla son inútiles, hasta que capturan al Escribano de la Isla, Francisco de Amado. Gracias a su traición tienen conocimiento de la entrada secreta a la Cueva. Entran los argelinos en la cueva, laberinto volcánico de varios kilómetros y capturan a 900 personas, la mayor cantidad en el Archipiélago durante toda su historia colonial. Lanzarote queda prácticamente despoblada, los cautivos pasan de 1.000.


Cuando llegan los refuerzos desde Chinech (Tenerife) y Tamarant (Gran Canaria,) ya la Flota mazigia ha partido llevándose a los cautivos. No contentos aun, se presentan los argelinos en la Gomera el 20 de Mayo. Tras capturar a algunos de sus habitantes, saquean la Villa, desmantelan la Torre del Conde y destruyen el templo parroquial católico.


El Conde huye en una embarcación hacia Benahuare (La Palma.) Los argelinos lo persiguen en busca de capturarlo y pedir un elevado rescate hasta el Puerto de Tazacorte. La defensa que hacen las Milicias awuaras (palmeras), con las compañías desplegadas en la Playa y la artillería de la torre vomitando metralla, hacen que Solimán y Tabac desistan de capturar a Don Gaspar de Castilla, Conde de la Gomera y Señor feudal de la Isla Esero (El Hierro).

 

Diciembre de 2011.

---» Continuará