SIETE ISLAS, una NACIÓN

ZARUG, SAH ISEKENEN, YÎWAT N TMUST

 

Bencomo Artemi Semidan  

Cuando alego INDEPENDENCIA, estoy alegando SIETE ISLAS, una NACIÓN. Cuando alegue pateen a más no poder, es porque llegan los mercenarios invasores guac. Aún recuerdo aquellas historias contadas por løs viejitøs, løs mismøs que siendo niñøs sus madres los llegaban a meter debajo de las camas porque llegaban las brigadas del amanecer, torturadores, asesinos y demás parafernalia fascista lacaya del poder español.

Me alegaban que preguntaban a sus madres: Ma, ¿y si vienen a por løs independentistas para llevárseløs?, no se lleguen a preocupar mis niñøs que no løs van a encontrar. Má, ¿también elløs se han escondido debajo de las camas?; no, elløs siguen teniendo barrancos y cuevas estratégicas para que no løs lleguen a encontrar. ¿Qué es estratégico, ma?, pues un sitio donde estos invasores no podrán acceder. ¿Nuestro escondite lo es, ma?; no mis niñøs, pero sigue siendo algo seguro. Me contaban que sus madres eran como las heroínas, ellas no dejarían que nadie viniera a por elløs para hacerles daño, pelearían por løs suyøs hasta que llegaran løs independentistas para rescatarløs.

Por ello cuando alego INDEPENDENCIA, estoy alegando SIETE ISLAS, una NACIÓN, pero no de segunda, tercera, tampoco de cuarta o quinta, alego de los primeros alzamientos, las zonas de las cumbres, fortalezas y riscos llenas por la sangre derramada de nuestrøs antepasadøs asesinadøs, muertøs, despedazadøs en cualquiera de nuestros barrancos. Suenan los cañones, los sables, las ballestas, estoques y demás armas de la época, nuestra gente con sus tabonas, banot, tafiagues o garrotes, ni sé cuántos mercenarios invasores terminaron cayendo también.

Si nos paramos un pisco a pensarlo, podríamos imaginar lo que puede caracterizar al homínido de la propia evolución. Pero vayamos un pisco más pa’lante, nos encontramos con løs niñøs jugando, de pronto en el horizonte de Magec aparece una patrulla española repleta de mercenarios genocidas pisoteando y tirando todo lo que trincaban por delante. “Vosotros”, por dónde se han ido los independentistas preguntaron, gritaban a løs niñøs en una lengua que no estaban acostumbrados (en nuestro léxico el vosotros no existe).

Ustedes son los únicos que han pasado por aquí destruyendo nuestros campos, surcos, fincas y todo lo que han trincado a su paso, respondían elløs sin miedo. No se hagan løs graciosøs canariøs aplatanadøs que les metemos cuatro balazos y les cerramos la boca pa siempre. Sin esperar respuesta alguna, aceleraron su paso por la vereda llenándolo todo de polvo, desaparecieron en la distancia y un pisco más tarde se podía escuchar los fogonozos de løs nuestrøs para enviar a éstos a las moradas calientes de mi santo patrón Guayota.

Tiros p’llá, tiros p’cá, pa todøs estos pendejos malparidos, por un tumbado nuestro, dos de ellos, tres compañeras caídas, seis mercenarios muertos. Las paredes de las casas perforadas por los impactos, las ventanas sin un jodío cristal, las puertas esparramadas, mientras una sábana cubría el cuerpo de cho Juanito, el cabrero que siempre ofrecía cobijo y papeo a løs independentistas en cuevas subterráneas sobre las cumbres del Bentayga y que solo él conocía.

Pobre Guayanfanta (Wayyanfantaz) “wayya-n-fantaz (espíritu de vanidad, orgullosa), la Guayarmina Mahay palmera que murió bregando contra los conquistadores genocidas españoles como tantas otras antepasadas que no se doblegaron al yugo del colonialismo español. Por ello cuando alego INDEPENDENCIA, estoy alegando de muertes, cuando alego muerte, también recuerdo la de nuestrøs antepasadøs masacradøs, vendidøs como esclavøs, deportadøs de su propia tierra. Cuando hablo SIETE ISLAS, una NACIÓN, espero que no tengamos que volver a llorar por nuestrøs muertøs.

¡Chachøs!, si no ando mosqueado, solo estoy haciendo memoria de aquellos tiempos donde nuestros antepasados bregaron por su libertad, también alego de løs desaparecidøs en la era del tío Paquito, hermanøs contra hermanøs, familias enteras en la clandestinidad por causa de fascistas despiadados, y si no que se lo digan algúnøs que tuvieron que refugiarse en Güi Güi y muchos otros lugares de nuestras islas hermanas, y de un hipotético futuro en que pueden volver a invadirnos ampliando las fuerzas mercenarias de ocupación que llevan instaladas desde ni se sabe los años.

Tampoco voy alegar nombres, no sea que sus descendientes que aún viven terminen por hacerme desaparecer. Ah, no es que sea el presidente del supuesto Gobierno de Canarias, títere esbirro con sus guanchisleys del poder colonial, esøs que suelen alegar que representan al pueblo. ¿Qué?, ¿cuál?, o solo se representan a sí mismøs y sus bolsillos, aparte, claro está, de las prebendas y otras mierdas que siguen recibiendo de parte de sus amøs coloniales por su traición y colaboracionismo.

A estøs lo único que podría darles sería las tintas donde sigo mojando las plumas con las que escribo para que se las beban y terminen por añulgarse. Oigan, pero si no ando mosqueado, he alegado. Les pido disculpas por interrumpirme muy a menudo, pero las palabras me siguen permitiendo lo que sea si se sabe jugar con ellas, mosqueado no estoy, más bien me sigue indignando que se sigan pasando por el forro de los timbales el clamor popular de nuestro pueblo.

Ahí tienen el ejemplo del Seyyah (Soyajo) del tal Soria, despreciable como el solo y de escaso conocimiento intelectual, vendido a más no poder al colonialismo de Estado y las grandes multinacionales, llámese Repsol y demás tinglados que se ha pasado por el forro de los timbales la opinión, el clamor popular de nuestro pueblo en contra de la extracción del petróleo en aguas territoriales que deberían de pertenecer al pueblo de Tamazgha, no al español.

Sigo sin estar mosqueado, pero aún recuerdo a un padre salir corriendo por la calle, le gritaba a su hija que se tirara hacia un lado para apartarse. Entre la calufa y los gritos de muchøs compañerøs más que estaban ese fatídico día en el muelle grande por la huelga de estibadores portuarios, Belén María, como así se llamaba su hija, murió asesinada por mercenarios asesinos al servicio del Estado español, fue brutalmente arrastrada por un coche que éstos conducían, ya ni les cuento cómo dejaron su maltrecho y destrozado cuerpo, rompiendo las ilusiones, esperanzas y brega de una piba de no más de veinte años.

Casos así podría alegar y no parar, desapariciones, violaciones, torturas, asesinatos a lo largo del pasado, del presente y espero que no de un futuro próximo. En aquella época comenzó la colonización de nuestra tierra muchísimo antes de los futuros pactos de la casta parasitaria político burguesa capitalista canaria, vendidøs a su tierra. Por eso cuando alego INDEPENDENCIA, también estoy alegando la memoria de nuestrøs bregadøs, de agujeros en el cuerpo por los impactos de las balas en fusilamientos masivos, de barrancos donde corrió la sangre de nuestrøs antepasadøs.

Por todo esto y mucho más que ha ocurrido, ocurre y probablemente seguirá ocurriendo, alego que breguen como alma que lleva el diablo porque aún podemos tener salvación, tierra tan llena de bregadorøs nobles. Estado español fascista, corrupto y farrullero a más no poder, alega uno. Señorøs, lo que llegan a ser las cosas, espero que no tengamos que llegar a una situación de conflicto armado porque no podemos seguir estando agachadøs para el beneplácito de estøs parásitøs. Todo sigue siendo para elløs y a nosotrøs nos siguen dando solo migajas.

Ojalá algún día podamos obtener la victoria más absoluta, tagrawla, patria o morirnos en el intento. En fin, Estado español, quizás algún día obtengamos la ansiada SOBERANÍA Y AUTODETERMINANCIÓN ISLEÑA de Tamazgha y uno sea el que apreté el jodío botón para cerrar las puertas el mismito día en que empiece el modernismo independentista…

Fuente: facebook.com/Benchomo Artemi Semidan