Reflexiones
tras mi bautizo
por
el Rito de la Iglesia del Pueblo Guanche.
Rukaden
Ait Anaga
Sumergido
en el mar tres veces como símbolo de purificación, por la Maguada y su
asistente.
Para un auto-convencido como yo, de que inexorablemente la Sociedad
Humana acabará asumiendo la más pura esencia de
la Filosofía Marxista y no “babiecadas burocratizadas”, y de que las
Religiones, todas ellas, son el “opio del Pueblo” cuando son
institucionalizadas y dejan de predicar con el sencillo ejemplo de “sus
creencias”, no deja de resultar paradójico el paso que libremente decidí
dar.
En
la comunidad científica internacional, hay quienes reconocen abiertamente que
si todos los componentes de la Tabla Periódica De Elementos, no estuvieran
ordenadas y combinadas de la manera en que lo están, y todo lo que forman [El
Universo en su conjunto] no estuviera sujeto a las mismas Leyes de la Física
[“Conocidas”], en todo el “conjunto que conocemos o suponemos”, ni el
Universo y la Vida tal como la conocemos en su infinita variedad, Existirían
tal como son, tal como las percibimos; Hay quienes ven un cierto “orden
inteligente” en todo esto..., no lo sé.
Asumiendo
que siempre respeté como única Madre a la Naturaleza, que cada día me
regalaba con la vida, y que ante un paisaje, una árbol, una flor, un amanecer u
ocaso, en cualquier de sus manifestaciones, percibo sensaciones que me hacen
sentirme bien conmigo mismo y con el resto de todo lo demás, empatía, comunión
con un todo que me transciende y no sé explicar; Si yo hubiera nacido en
tiempos de los antepasados, hubiera pasado por este rito a bien temprana edad. A
esta, lo hago de una forma libre, por decisión propia.
Como
heredero de aquellos que refundaron la Matria en Adexe, sobre las pavesas
humeantes de la primigenia, eligiendo como Líder a quien de forma natural fue
reconocido como “el primero entre sus iguales”, el achicaxna [Trasquilado]
Ichasagua, como Alzado, era no solo un acto de Comunión con mis antepasados,
sino con sus descendientes, y también un acto político de reafirmación
personal de continuación de la Resistencia, la recogida simbólica del testigo
de quienes se refugiaron en las más inaccesibles escarpaduras, para desde allí
continuar la lucha.
Reencuentro
con compatriotas y encuentro con muchos otros que nos desconocíamos
personalmente
Fue
además, en un bello y emotivo acto o ceremonia ante un sencillo altar, con el
llamado “Ídolo de Tara” representando esa “Comunidad Universal” que decía
antes, sellar un Pacto [De colactación se llama] con los herederos actuales de
aquellos antiguos Inekaren que pudieron estar presentes. Un pacto tal como lo
hacían nuestros antepasados, pasando un cuenco con leche de cabra, de mano en
mano, y aquellos/as que libremente asuman reconocerse integrantes de la
Comunidad de Alzados, y reconozcan como tales a los presentes y se comprometen a
asumir todas las consecuencias que nos depare continuar la Resistencia y la
Lucha, beber un sorbo de leche, a la vista de todos/as los/as Inekaren
presentes.
Antes
de eso, tras ser sumergido en el mar tres veces como símbolo de purificación,
por la Maguada y su asistente, salir orgulloso del agua y recuperar las chanclas
miré hacia atrás, y no vi sino una especie de tenue e inofensiva melancolía
que tal vez me asaltara de vez en cuando desde el pasado, pero lo único que
llenaba todo el campo visual, era lo que representaban aquella entrañable
pareja, la esencia misma de Mi Pueblo y su Cultura, y de su “insaciable sed de
Libertad”. Así pues, levanté la barbilla y avancé entre un grupo de atónitos/as,
curiosos/as o de quien sabe que, apacibles bañistas, hasta el Altar donde otro
hermano, me dibujó un círculo de ungüento sagrado en la frente, símbolo de
un renacer, una nueva vida dentro de la Comunidad de mi Pueblo. Desde el Hombre
de Neandertal se usa el ocre rojo para que acompañe a los muertos, por lo que
se le da el carácter se sagrado “como sangre de la tierra”, como sangre
traemos al nacer, por tanto es necesaria para ese paso llamado muerte.
Significaba, que dejaba atrás toda mi vida anterior, y renacía a una nueva
dentro de la Comunidad de Guaxit [Hombre. Género “Ser Humano”] Alzados/as.
Continuar
respetando a la Naturaleza y sus Leyes como dadoras de Vida, seguir defendiendo
a esta Tierra que es Nuestra y a mi Pueblo y su Inalienable Derecho a Vivir como
él decida libremente, con nuestra sencilla forma de ser, con Dignidad y
Libertad, con todas las consecuencias que ello pudiera depararme. Así lo asumí
libremente junto a 24 Hermanos/as el pasado domingo en la Playa de Chimisay,
Menceyato de Guimar, que dieron el paso al mismo tiempo que yo. Otros/ as nos
seguirán en el futuro, aumentando nuestras filas y demostrándole al mundo que
La Raza Vive pese a los siglos de opresión, que sigue resistiendo, y que se
tarde lo que se tarde y cueste lo que cueste, Este Pueblo Volverá a Ser Libre
como antes, porque está formado por hombres y mujeres libres, ferozmente
orgullosos/as de serlo.
Nernu
Inekaren, Siempre Alzados/as, hasta la Victoria. Tierra Libre, Matria/Patria o
Muerte. ¡Venceremos!
Desde
la Vieja Fortaleza, Menceyato de Anaga, Rukaden Ait Anaga
6
Julio 2015.
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