El ¿nuevo?
Gobierno de Canarias: Ni cien días...
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Rukaden Ait Anagas
Habitualmente
se le concede a cada nuevo cargo público un tiempo (100 días) para asentarse y
empezar a tomar decisiones a la vista de cómo está la Administración para la
que han sido elegidos. A veces hay casos, y este es uno de ellos, no hace falta
esperar tanto para hacerse una idea de cómo va a ser la nueva andadura “de la
perrita”, permítaseme la expresión.
Se
puede argumentar que todavía es pronto para pre juzgar como habrá de ser la
nueva etapa autonómica, pues el nuevo ejecutivo aún está aterrizando, como
quien dice, pero en contra se puede decir que vista la andadura de CC en
Canarias, desde el Gobierno ¿Autónomo?, hasta el último Ayuntamiento de esta
tierra, no hay mucho sitio a la esperanza de que esto vaya a cambiar, salvo a
peor.
Siguiendo
detenidamente intervenciones y declaraciones y algunos titulares periodísticos,
además de la consabida chabacanería y mediocridad de las mismas, parece que
estos vicedioses de la política insular, suben al estrado o tribuna a repetir
una y otra vez los consabidos mantras de la ineficacia general, con un aire de
superioridad y machaconería falaz, intentando sentar cátedra donde no hay más
que asilvestrados cachanchanes de la “cosa pública” que, creyéndose lo que
les dicen sus cortesanøs, vienen a decirnos con soberbia altanería, que son
ellø los que saben de que van las cosas y de mentir como bellacos en todo lo
demás.
Baste
el botón de muestra de las declaraciones del flamante y recién estrenado
Presidente Clavijo; Nos dice el ciudadano Clavijo, que no hay nuevas
peticiones/concesiones de Prospecciones Petrolíferas, y hasta puede que sea
verdad. Claro que esto tiene sus más y sus menos. ¿Si están vigentes las
concedidas a Repsol, para que dar más licencias? Es de suponer y creo no
equivocarme, que estando quienes están en el gobierno espanol, van a tratar de
favorecer la “marca espana” por lo que tratarán, antes de ser echados del
gobierno, de asegurar que sea esta multinacional quien monopolice todo el asunto
en la Colonia de Canarias ¿No?
Luego
si mi análisis es correcto, el ciudadano Clavijo nos está presentando la
zanahoria para esconder la realidad de que no hacen falta más licencias pues
las antiguas siguen en vigor, con todas las cargas de obligaciones que suponen.
Trata en definitiva de escamotearnos la verdad de que, no habiéndose cerrado
definitivamente este capítulo nefasto de nuestra historia reciente.
En
otro apartado, habla el flamante nuevo gobierno de limitar el número de
turistas en las islas; Una sabia medida, coincidimos todos, salvo que también
tiene trampa. No es menos cierto que es necesaria una limitación del número de
turistas en Canarias, pero también es cierto que esa limitación lleve
aparejada una Ordenación y nueva definición del Sector en su conjunto, pues si
no estaríamos ante nuevas salvas de cañón sin carga real.
A
mi juicio, y basten las declaraciones de la patronal hotelera sobre el tema,
estamos no solo ante otra nueva tomadura de pelo que en realidad supone, otra
vez, un nuevo trasvase de fondos públicos para compensar “esa limitación”,
naturalmente solo a los hoteleros amigos. A nadie se le escapa que por muchos
millones de turistas que nos visiten, a una media de 80 € cada uno, no han
sido capaces de frenar la creciente miseria y paro de las islas. Por lo tanto,
debemos entender que los dineros públicos del Gobierno de Canarias que deberían
servir para paliar esta situación, van a ser desviados para acrecentar las
carteras de unos pocos.
Para
que esta limitación fuera realmente una medida positiva, habría en primer
lugar que contar con una “oferta propia” y no lo que les ofrece el llamado
turismo de “todo incluido” que paga con antelación fuera de Canarias, y eso
solo se consigue ofreciendo prestaciones, servicios y una oferta diferente a lo
que los tour operadores han montado en las islas. Y eso, ni se ha producido ni
se espera que suceda, por lo que cuando se empiece a notar el descenso de la
afluencia de turistas, empezará el eterno “plus plus” de la patronal del
sector, aireando sus supuestas pérdidas y reclamando seguir colgados de la
“teta pública”.
Así
puestas las cosas, no queda más remedio que rendirse a la evidencia de que a
pesar de que haya alguna cara nueva, estamos ante la continuidad del régimen
Criollo Canario que sigue apuntalando a los intereses de los indígenas españoles
en Canarias, algo nada nuevo por otra parte y que no sorprende a nadie, o al
menos a mí no.
Así
pues uno se pregunta a veces para qué carajo se hacen elecciones, si todo está
no solo atado y bien atado y el bacalao está repartido antes de hacerlas, sino como
en cualquier mala obra de teatro, cualquiera puede prever y anticipar el guión.
Solo
espero que en estos cuatro años que nos esperan, seamos capaces de, por una
vez, dejarnos de las consabidas boberías y modas extranjeras y seamos capaces
de presentar una alternativa política realmente canaria y no nos perdamos de
nuevo en querellas inútiles que solo conducen al desánimo y la auto marginación.
20 Julio 2015
Desde
la Vieja Fortaleza
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