Wladimiro Rodríguez Brito *
-
La
dura situación actual debe llevamos a la reflexión. Encontrar la salida pasa
obligatoriamente por optimizar nuestro territorio y nuestros medios humanos.
Nuestra manera de ver y pensar sobre nuestro suelo tiene mucho que decir sobre
la actual crisis.
Estas
líneas pretenden valorar dos territorios alejados con muchas similitudes. Son
islas con superficie y población similares, incorporadas a España con 200 años
de distancia. Hasta en las relaciones con Inglaterra han tenido puntos comunes,
aunque Menorca llegó a estar ocupada por ellos. El desarrollo turístico ha
llegado tarde en ambos casos: Menorca, en las últimas décadas, mientras que La
Palma se encuentra en plena expansión. Son islas rurales, relativamente
aisladas y con islas cercanas con mayor población y actividad. Clima y
orografia son, sin embargo, opuestos: los inviernos son largos y-duros en
Menorca, reduciéndose la actividad turística y agraria a los meses de verano,
entre mayo y octubre. La Palma es una montaña, mientras que en Menorca domínan
las superficies planas. Menorca es barrida por el duro viento del norte y no
existe la clara diferencia palmera entre norte y sur insulares.
Las
principales actividades económicas en Menorca han sido históricamente la
ganadería, el mar y algunas industrias del calzado. Menorca, igual que La
Palma, tiene una importante superficie forestal, poblada de pinos, acebuches,
lentiscos y encinas. El resto queda para pastos y antaño, para cereales y
algunas escasas hortalizas y frutales. La distribución de la tierra es
radicalmente diferente. Mientras en La Palma domina el minifundio, el campo
menorquín esta dividido en propiedades de más de
Por diversas causas, la actividad agraria y la cultura del campo en La Palma son
mucho más variadas y ricas. En la gastronomía de Menorca y La Palma dominan
las limitaciones que han puesto la naturaleza y la historia. El régimen de
explotación de Menorca impone allí los productos del mar, con limitados
productos agrarios. Hasta la bebida se ve afectada, ya que esta isla apenas
tiene cultivos de vid: los ingleses introdujeron el "gin". Son múltiples
los paralelismos con Menorca. La historia nos debe hacer reflexionar sobre qué
queremos en nuestras islas, sobre todo en La Palma, El Hierro o La Gomera.
Menorca puede ser una buena referencia para tomar decisiones de futuro.
---» Continúa
*
DOCTOR
EN GEOGRAFÍA POR LA UNIVERSIDAD DE LA LAGUNA
Otros
artículos de Wladimiro Rodríguez Brito publicados en El Canario