Canarias:
Historia de un Exterminio
Félix
Román N. Rodríguez *
Canarias
confronta en la actualidad una grave, muy grave crisis económica, pero también
una crisis institucional, social, una crisis de valores en todos los sentidos.
En
este rincón del Atlántico norteafricano, las Islas Canarias surgieron del
fondo del mar entre el inmenso caos volcánico, la semilla de la vida nació y
convirtió un mar desolado de fuego en un espacio de luz y colores, donde
pueblos atravesaron el océano hace más de tres mil años en busca de buenas
tierras, y aguas cristalinas adaptándose a un nuevo territorio generando una
cultura, un universo espiritual en medio de una naturaleza que rozaba la magia.
Las
Islas Canarias, que sufrieron una conquista brutal donde los invasores
masacraron a su pueblo acabando en pocos años con una cultura ancestral,
lengua, rasgos étnicos que aún hoy día se reflejan en muchos ojos tristes,
los restos de ese naufragio provocado por una potencia brutal y genocida, que
pocos años después asesinaba a más de ochenta millones de seres humanos en el
continente americano.
Con
el tiempo se fraguó en este desgraciado archipiélago una historia de
colonialismo, abusos de poder, enriquecimiento ilícito de los herederos del
holocausto indígena, los mismos que en el verano 1936 tras el golpe fascista
asesinaron a miles de canarios-as, a toda persona que fuera sospechosa de luchar
por la libertad, y los derechos humanos.
En
este siglo XXI año 2015 apellidos de esta nobleza inundan las instituciones públicas
de Canarias, cargos públicos, jurídicos, empresariales, son en su mayoría
descendientes de los verdugos, de quienes han ido masacrando y exterminando a
este pueblo durante más de seiscientos años.
Hoy
por hoy, esta siniestra oligarquía celebra las derrotas cada 30 de mayo, incita
a la ciudadanía a disfrazarse con trajes típicos canarios y salir a las calles
a bailar, cantar, en romerías de la tristeza, conmemorando así el genocidio,
la sumisión y la esclavitud, tantos años de hambre y miseria que en estos días
terribles inundan en cada rincón de Canarias, donde uno-a de cada tres niños-as
sufren de malnutrición y empobrecimiento extremo, cientos de miles de familias
sin ningún tipo de ingresos, un desempleo que supera ya el 34% de la población,
junto a un largo etcétera de casos de suicidios por motivos económicos,
enfermedades mentales asociadas a la crisis-estafa, y una desesperanza
generalizada sin futuro, sin horizontes, sin cambios sociales de progreso.
Leyendo
cualquier medio se puede observar como alcaldes testaferros de la alta sociedad,
de una nobleza caducada, oxidada, y en muchos casos con las manos manchadas de
sangre aprueban planes de construcción de hoteles para empresas donantes, se
fotografían juntos como si hicieran algo valioso por este pueblo, celebrando la
ocupación turística de casi un 100% mientras familias pasan hambre, mientras
sigue aumentando a raudales el desempleo, mientras se siguen enriqueciendo los
de siempre, los culpables de que este pueblo esté al borde del colapso
definitivo sufriendo la catástrofe planificada de un genocidios social sin
precedentes en su historia.
En
este lugar del planeta donde aún florece la belleza natural, a pesar del
generalizado destrozo ecológico donde paisajes míticos evocan entre grúas y
excavadoras, la riqueza de la madre tierra, donde un pueblo entero sufre la
depravación y la corrupción de gran parte de la mafia política los
“regalos” en forma de licencias, de obras ilegales, prebendas, favores,
maletines y sobres repletos de billetes de 500 euros.
Nuestro
pueblo observa cómo no va quedando
casi nada. A nuestros hijos, y nuestros jóvenes les espera una Canarias
destrozada, inundada de cemento y hormigón, de esclavitud, de mafias isleñas e
internacionales, de más abusos de vulneración de los derechos humanos.
Un
futuro negro y gris que de no producirse un cambio radical, convertirán a estas
islas en la Plataforma Militar de la OTAN, en prostíbulo de una Europa
corrupta, gobernada por criminales, asesinos y psicópatas a sueldo de la
delincuencia financiera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el criminal
fascista imperialismo norteamericano.
Los
restos de una brisa pura atraviesa las montañas donde habitaron nuestros
ancestros, ese valiente pueblo Amazigh que pervive entre nosotros en su ADN y
rasgos fisonómicos[1], y cuya cultura aún continua latente en un espacio remoto
de nuestra conciencia con ansias de liberación para romper las cadenas que nos
imponen todo tipo de corruptos-as gusanos de coche oficial, mafias aferradas al
poder al precio que sea caiga quien caiga, muera quien muera.
¿Será
inevitable sufrir más? ¿Seguiremos cayendo en un abismo de barbarie y
destrucción? La que marca una oligarquía que presume de “demócratas”,
mientras inundan sus cuentas corrientes del dinero de los saqueos, impregnado
del dolor de este pueblo, oligarquía desesperada por una masacre premeditada,
que se inició en el momento del desembarco, cuando asesinaron al primer hombre
de este pueblo y cuando violaron salvajemente a la primera mujer guanche.
*
Contertulio de la emisora La Voz de Rusia en Canarias