´Si se ahorran costes con el enfermo mental, volverán
los manicomios´
Francisco
Rodríguez Pulido*
"Necesitamos desplegar una red específica para atender a los niños y los chicos con estas patologías, que son muchos, entre un 10% y un 20% de la población". "Esta crisis hace más vulnerable al trastorno mental a las clases medias y a ciertos sectores del empresariado"
Los efectos perversos que está causando la crisis, de un lado aumentando el grado de afectación en la población de trastornos mentales, y de otro ocasionando la reducción de recursos para la atención de los enfermos, son causa de preocupación en los especialistas.
La Asociación Canaria de Neuropsiquiatría (ACN) será por
primera vez la anfitriona de una reunión nacional de la especialidad, del 6 al
9 de junio en Tenerife, para celebrar el XXV Congreso de Salud Mental.
€Los
psiquiatras quieren aprovechar este Congreso para constituir un Foro Nacional
que defienda el sistema público de salud. ¿Es tan perentoria esa reivindicación?
€Sí,
porque todos sabemos que la atención pública en salud mental, y también la
general, se encuentra amenazada. Uno de los objetivos centrales del Congreso es
la presentación del Foro Nacional de la Salud Mental en el que estén
representados especialistas, pacientes, familiares de enfermos y organizaciones
de defensa del modelo público.
€¿Y
cómo activaría el Foro esa defensa del sistema?
€Lo
primero que tendrá que hacer es intercambiar información y contrastar qué se
está haciendo en el país, porque sabemos que unas comunidades autónomas
aplican unas políticas y otras comunidades, otras. Y, en segundo término, el
Foro quiere ser operativo para dar respuestas claras contra posibles retrocesos
en los modelos asistenciales.
€Menos
dinero, más precariedad para atender al paciente mental, ¿no?
€Exactamente.
Nuestra asociación defiende un sistema que se basa en el modelo comunitario de
salud y que, por tanto, se aleja de la hospitalización. No queremos la vuelta a
modelos manicomiales como sistema de ahorro de costes.
€¿Eso
se puede producir?
€Hay
un riesgo si la Ley de Dependencia se bloquea, como está ocurriendo. Y con ello
que los servicios sanitarios se desentiendan de los sociosanitarios que tiene el
sistema de la dependencia, por que la Ley también afecta a la sanidad. Eso
queda perfectamente establecido en el artículo 11 de la norma.
€El
enfoque sociosanitario es fundamental para asistir al enfermo mental.
€Sí,
es clave y estratégico para poder realizar las políticas de integración. Si
se descuelgan de la sanidad los servicios sociales eso ahondará una brecha
después de que en estos últimos años hayamos intentado que esas dos
dimensiones de las necesidades de las personas con enfermedad mental se
acercaran. El riesgo ahora es que la brecha se amplíe entre los servicios
sociales y los sanitarios y nos genere un gran problema, lo que hace más
factible que pueda volver el modelo manicomial.
€El
modelo opuesto es la atención comunitaria para lograr la inserción de quienes
sufren enfermedad mental. Es más eficaz para el tratamiento pero también
ahorra gasto sanitario, ¿no?
€Está
demostrado que ese modelo es más eficaz en ambos casos.
€Luego
sería el más indicado para una época como esta de pocos recursos. ¿Por qué
entonces no se apuesta por él?
€En
un momento de crisis económica tiene más razón de ser pero hay algunas
dificultades. Primero porque hay que cuidarlo, atenderlo, y eso implica dotarlo
de recursos. Y, además, porque es un modelo que no está desarrollado en todo
el país. Al contrario, existen muchas diferencias: por ejemplo, Cataluña y País
Vasco tienen un sistema basado en modelos manicomiales. Sin embargo, en Andalucía
no hay manicomios. A nivel internacional la tendencia es profundizar y extender
el modelo comunitario.
€A
la vez que disminuyen los recursos se incrementa la demanda en los servicios
mentales. ¿Somos ahora más vulnerables a estos trastornos?
€Sí.
La sociedad se ha vuelto más frágil. Pensemos que en nuestro país las tasas
de desempleo son altas. Y no olvidemos que el trabajo da un sentido de
pertenencia, autoestima, nos permite planificar el futuro; nos estructura el
tiempo y proyectarnos, de alguna manera. Cuando a una persona se le quitan estos
elementos esenciales que están vinculados a su identidad, pueden empezar los
problemas. Realmente nos preocupa porque sabemos que hay una relación entre
desempleo, depresión y suicidio. Las personas que sufren una pérdida laboral
tienen cinco veces más probabilidad de padecer depresión y suicidio.
€Esa
fragilidad de la que habla, ¿también ha roto barreras sociales?
€Sí.
Esta crisis económica tiene una particularidad. Ataca a quienes son pobres,
pero a la vez a las clases medias y a ciertos sectores del empresariado. Estamos
atendiendo en la consulta también a empresarios, que han visto debilitarse sus
proyectos y a sí mismos.
€¿Tienen
cuantificado ese impacto de la crisis en la consulta?
€No
disponemos de cifras. Pero la literatura científica tiene acreditada la relación
entre depresión, suicidio y consumo de sustancias. Por otra parte un informe
del INE cuantificó que en 2011 las pérdidas por estrés laboral de
trabajadores fueron en torno al 9% del PIB.
€El
Congreso tratará la situación de la atención mental en niños y adolescentes.
¿Con qué carencias tienen ustedes que lidiar?
€Pues
no disponemos de recursos ni especialistas para tratar a estos pacientes.
Empezando por que España es uno de los tres países europeos que no tienen
reconocida aún la especialidad psiquiátrica infanto-juvenil. Y necesitamos
desplegar una red específica para atender a los niños y los chicos que sufren
enfermedad mental, que son muchos, entre un 10% y un 20% de la población española.
Nos parece importantísimo poder atender de forma especializada a este sector.
*
Pte. Asociación Canaria Neuropsiquiatría
Publicado
en el periódico La Opinión de Tenerife, 23-05-2012