Venezuela "saudí" o "somalí" y Gallegos

«.» Wladimiro Rodríguez Brito *

[... Otra Canarias es posible y necesaria, para unas islas y sus gentes, en una sociedad más justa y ambientalmente sostenible....]

Gallegos no es sólo un territorio marcado por dos barrancos, de los más profundos de Canarias, en el que se ha mantenido una comunidad vecinal, endogámica, formando un oasis de regadío-secano, de los más importantes en el norte de La Palma (hoy tiene el mayor cultivo de ñame de Canarias), gracias a los manantiales de El Roque de Los Árboles, canalizados hace más de cien años. Además, es uno de los caseríos mejor conservados, con casas fabricadas por los indianos en la primera mitad del siglo XX, con marcada diferencia con el entorno (casas de dos plantas con teja francesa o árabe).

En Gallegos -que tuvo un molino de gofio movido con agua y un amago de trapiche azucarero en el llamado ciclo cubano de la economía española, situación que se produjo a comienzos del siglo XX ante la crisis de los canarios en Cuba-, surge ahora otra coyuntura internacional que nos hace mirar para casa y revalorizar lo pequeño, lo local, lo de aquí. He visto que hay sorribas en Gallegos, cosa que no ocurría desde hace más de 50 años. Espero que sean las nuevas semillas, que siembran un campo con más optimismo para Canarias.

Venezuela "saudí" y Gallegos. Este caserío perdió el ochenta por ciento de la población en el transcurso de 70 años, con destino mayoritario a Venezuela, pasando de unos 1.000 habitantes a unos pírricos 200. Antes de Chávez y Maduro, lo que llamábamos la "Venezuela saudí" -apariencia de riqueza y mucha farándula, sueños sin límites, imitación a los jeques del petróleo, etc.- vació Gallegos de campesinos, ante el espejismo de riqueza. Las zarzas y las tabaibas, o el monte, cubrieron las huertas de los campesinos que ahora imitaban a los jeques, mientras aquí las casas se caían.

Venezuela "somalí" y Gallegos. Parece que solo aprendemos con el estómago vacío. Una parte de las huertas las cultivan ahora los pocos que resistieron, si bien se incorporan también los nietos de la Venezuela de los dólares, que comparamos con lo más pobre de África. Ello hace que Canarias tenga la mayor comunidad de canario-venezolanos de España, unos 40.000. Aquí y ahora, hay que mirar para adentro, para las raíces como pueblo, en el que el ayer y el mañana son parte de un futuro más solidario socialmente y también ambientalmente.

En Venezuela no sembraron el petróleo, como planteaba el profesor Uslar Pietri. Y aquí, ¿estamos sembrando el turismo en Canarias?

Otro modelo es posible. Agricultura, turismo y ganadería son básicos. Una economía diversificada, con mejoras sociales, abriendo el colegio hoy cerrado, ofreciendo alimentos de la tierra, casas de turismo rural y dignificación social y económica del trabajo, separando el trigo de la paja. Las ayudas sociales para los que las necesitan, el resto trabajando, dignificando el esfuerzo, como los que cultivan ñames en Gallegos, muchos de los cuales han sido echados de la Venezuela "somalí", hija de la Venezuela "saudí", que maltrató el trabajo y el esfuerzo.

Los gallegueros de los ñames, y los que mejoran las viviendas, me dan optimismo. Otra Canarias es posible y necesaria, para unas islas y sus gentes, en una sociedad más justa y ambientalmente sostenible. ¡Enhorabuena gallegueros!

* Doctor en Geografía por la Universidad de La Laguna

 

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