¡Todos a Asentejo!
Honorio
Marichal
Consigna
lanzada por el compañero Antonio León Cubillo, que en paz descanse, por estas
fechas para invitar a la gente a participar en la conmemoración de la que fuera
la mayor derrota del ejército español en África hasta la victoria de Annual, en la que los vecinos rifeños
pasaron a cuchillo a 20.000 mercenarios invasores europeos- en Marruecos.
La
tradición de las últimas décadas nos cita cada último domingo del mes de mayo
en la comarca de Acentejo. Lugar que fuera testigo de lo que allí aconteció: la
defensa de la libertad contra el criminal colonialismo. Fray Bartolomé de Las
Casas, dominico, nos relata la historia más negra y demoledora de la
colonización española en Canarias y América. En la "Brevísima relación de
destrucción de Indias"[1] -título
lo suficiente descriptivo para causar horror-, se describe el rastro de sangre
de los españoles en los territorios -nuestro archipiélago incluido- que
sometían: "todas estas universas e infinitas gentes a toto
genere crió Dios los más simples, sin maldades ni dobleces, obedentísimas
y fidelísimas... más humildes, más pacientes, más pacíficas y quietas, sin
rencillas y bollicios, no rijosos, no uerulosos, sin rencores, sin odios, sin desear venganzas,
que hay en el mundo.... con eso mismo de limpios o desocupados e vivos
entendimientos, muy capaces e dóciles para toda buena doctrina... De estas
ovejas mansas, y de las calidades pusodichas por su
Hacedor y Criador así dotadas, entraron los españoles, desde luego que las
conocieron, como lobos e tigres y leones, cruelísimos de muchos días
hambrientos. Y otra cosa no han hecho de cuarenta años a esta parte, hasta hoy,
e hoy en este día lo hacen, sino despedazallas, matallas, angustiallas, afligillas, atormentallas y destruillas por las estrañas y nuevas
e varias e nunca otras tales vistas, ni leidas ni oidas maneras de crueldad" (OC. 10, 34).
La
victoria de Asentejo -insistía Cubillo- se comenzó a
celebrar hace más de tres décadas gracias al llamamiento histórico a conmemorar
este aniversario mediante las ondas de Radio Argel en su programa nocturno
"La Voz de Canarias Libre". No faltan motivos para recordar nuestra
historia gloriosa, no la impuesta por el adversario, sino la de nuestros
antepasados. No fuimos pocos los que escuchamos siempre sus recomendaciones
lingüísticas de escribir el topónimo con la letra ‘s’ y no con ‘c’, argumentando que el término viene de “A-s-n-tehunt" -en lengua guanche tamazigh
significa: hacia el lugar de las grandes piedras-, muy descriptivo con la
orografía de la zona. Por esa razón era más correcto escribir "Asentejo", sentenciaba.
Este
año, aún sintiendo la huella dejada en nuestros corazones, retomamos e
compromiso personal adquirido de luchar y defender aquello en lo que creemos:
la defensa de nuestros justos y legítimos derechos nacionales. Volvemos al
barranco de San Antonio -Farfán, en lengua guanche- en La Matanza de Acentejo
Imobach Kebehi Benkomo, héroe nacional,
el gestor de tan noble hazaña, gran estratega y buen administrador de los
recursos militares y humanos que poseía, mencey de Taoro y héroe canario. Con su ejemplo de lucha y sacrificio
nos enseñó a no doblegarnos ante los conquistadores y el oprobio del
colonialismo. Señalamos, además, que Benkomo no
contaba con medios suficientes y armamento para oponerse a los europeos -técnicamente
a años luz- y caballería, lo que supuso su acción un acto heroico.
Ya
entonces, y como decíamos, existía oposición -en la sociedad española de la
época- a la invasión de tierras lejanas y sometimiento de sus naturales. No fueron
pocos los que mostraron su rechazo, aunque cayera la furia de los tribunales
inquisidores. Nos podemos imaginar el tormento que hicieron pasar los españoles
a nuestros antepasados los guanches, aunque no lleguemos a cuantificar las
violaciones de mujeres y niñas, asesinatos y usurpación de tierras y bienes.
Fray Bartolomé de las Casas, días antes de su fallecimiento, prepara su último
memorial para el Consejo de Indias, donde hace una defensa de su vida y obra a
favor de los indios (naturales de las tierras sometidas) y denuncia la tiranía
europea: "La que llamaron conquistas en aquellos reinos, no nuestros, sino
ajenos, de los reyes y señores naturales, en cuya pacífica posesión los
hallamos. La otra fue y es la tiránica gobernación, mucho más injusta y más
cruel que la con qué el Faraón oprimió en Egipto a los judíos, a que pusieron
por nombre repartimientos o encomiendas". Por contra a esta digna opinión,
cito a la reina asesina, genocida Isabel la Católica y responsable de la muerte
de 200 millones de naturales sudamericanos, cuando se refería a los guanches:
"Los indios que habitan las nuestras Islas".
No
sería capaz de despedir estas líneas sin volver a citar a don Antonio, con la
esperanza de que nos acompañe -desde el tagoror de héroes
nacionales del que ya forma parte- durante la jornada del domingo y que su
espíritu de entrega nos brinde la mayor de las fuerzas: "Toda esta parte
de la historia debe servirnos de reflexión y prepararnos para próximas luchas
de tipo unitarias, donde no existan ideologías extrañas, sino una cosa que une
a todos los canarios en estos momentos históricos: descolonización e
independencia".
Me
sumo a las cientos de voces que lo hacen ya, animando a los canarios de todas
las Islas a venir a Asentejo, enarbolando las
banderas nacionales canarias verde estrelladas, a disfrutar del ambiente
familiar, festivo y reivindicativo. También dar las gracias al periódico EL DÍA
y a su director, don José Rodríguez, por defender Canarias y la realidad
colonial que otros callan.
¡Viva Kanaria
libre!
¡Viva el pueblo guanche!
[1] Brevíssima relación de la destruyción de las Indias