Canarias se defiende, no se vende

 

Con una población de más de dos millones de habitantes y  cerca de cuatro cientos mil parados, Canarias no se puede permitir sólamente 16.000 mil trabajadores cualificados en el sector agrícola, ganadero, forestal y pesquero, conocido desde el punto de vista económico como sector primario.

 

El colonialismo español, interesadamente, ha depauperado nuestro sector primario, condenándonos a una economía dependiente, fundamentalmente de España, introduciendo productos a bajo coste, de paupérrima calidad, en detrimento de nuestras producciones, como por ejemplo las naranjas, cebollas, vinos, pescados, carnes, huevos, pan congelado, cereales, legumbres, sandías, limones, frutos secos, jamones, quesos y todo tipo de porqueriatos.

 

Mientras las exportaciones canarias a España no llegan a mil millones de euros, España exporta a Canarias diez veces más, cerca de diez mil millones de euros, mediante el procedimiento descrito anteriormente y que, básicamente, consiste en hacer cautiva nuestra economía, cuyo ejemplo más reciente lo constituye el saqueo de CajaCanarias y La Caja de Canarias, cuando era vicepresidente de esta entidad Román Rodríguez, ahora integrada en Bankia, la de la multimillonaria estafa de las preferentes a pequeños ahorradores y jubilados.

 

Sin embargo el ejemplo más escandaloso lo tenemos en el desguace de nuestra flota pesquera, siendo un archipiélago situado en las proximidades del banco pesquero Canario-Sahariano, cuyos derechos tradicionales de pesca fueron reconocidos por el mismísimo Hasan II de Marruecos y nada de Canarias, eso sí, ante la oposición del gobierno colonialista del reino de España, presidido en esos momentos por Adolfo Suárez, cuyo asesor favorito para Canarias era el gallego Olarte  Cullen, a cuyos paisanos terminó cediendo el pescado canario, que ahora saquean impunemente ¡Terminarán afirmando los piratas somos nosotros! España firmaba acuerdos pesqueros con la monarquía alahuita a cambio de construir puertos en Marruecos. El ametrallamiento de los pescadores canarios, infanticio incluido, en nuestras propias aguas terminó haciendo el resto del sucio trabajo, desapareciendo también nuestra floreciente industria conservera, fundamentalmente en Titerroygacat (Lanzarote).

 

Ni nacional, ni estatal, ni internacionalmente se cuestiona la calidad de las producciones canarias, como lo atestigua la última World Cheese Awards 2012, celebrado en Birmingham (Inglaterra), donde resultaron premiados un total de 18 quesos elaborados en Canarias, entre más de 3.000 que participaron de todo el mundo. Los quesos canarios obtuvieron dos súper de oro, una medalla de oro, siete de plata y ocho de bronce.   Los premios se otorgaron a los quesos Maxorata Tierno (súper oro) y Maxorata Semicurado Pimentón (bronce), del Grupo Ganaderos de Fuerteventura; Queso La Gambuesa, elaborado por Lorenzo Martín (bronce) y Queso Tirbania de Queserías Reyes (bronce), de la isla de Fuerteventura; Rojillo Semi (bronce), Secreto Semi (oro), Untado en Pimentón Duro (súper oro) y Bodega Oveja Duro (plata) de Finca de Uga, Lanzarote; Queso Curado de Cabra (bronce) y Semicurado Ahumado (bronce), los dos de Quesería Artesanal Montesdeoca, de Tenerife. Ocho fueron los galardones obtenidos por las producciones de Tamarán (Gran Canaria), que recayeron en Los Corralillos elaborado por Fermín Guedes (plata), Queso Casero de Valleseco (plata), elaborado por Quesos Madrelagua de Valleseco, Queso Flor de Valsequillo (bronce), Hoya León elaborado por Maria Dolores Hernández (bronce), Queso Angelita elaborado por Carmelo Melián (plata), Las Mesas elaborado por Josefa González (plata), el Buen Pastor elaborado por Juan Andrés Vizcaino (plata) y Roque Grande elaborado por José Santana (plata). Exactamente lo mismo ocurrió con nuestros vinos, apreciados en todo el mundo desde el siglo XVIII, sobre todo los malvasías, procedentes fundamentalmente de Abenguareme, Benawaré (Fuencaliente, La Palma).

 

Nuestros cítricos, entre los que destacan las naranjas, no tienen parangón con producción alguna y otro tanto pasa con papas, plátanos y tomates.

 

Con respecto al producto estrella de los alimentos integrales, el gofio, hemos conseguido que se aprecie en todo el mundo, desde Estados Unidos de Norteamérica hasta Senegal, valorado por su riqueza nutritiva, sobre todo cuando se combinan los cereales (trigo, cebada, centeno, millo, etc.) con la legumbres (habas, garbanzos, chochos, chícharos, etc.), pues en ese caso, además de las vitaminas y los minerales que lo caracterizan, posee todos los aminoácidos esenciales, siendo también muy rico en fibra, que llega hasta un 10 por ciento de su peso.

 

La agricultura, la ganadería y la pesca deben transformarse en uno de nuestros principales sectores económicos, por lo que el Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario, si obtiene la confianza de los electores, subvencionará con un euro cada kilo de fruta, verdura, cereales, legumbres, carne y pescado que se produzca en nuestro territorio.

 

Canarias, 31 de Enero de 2013.  

 

Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario

Movimiento UPC