El mayor secreto y la mayor estafa de
Canarias
Jorge
Dorta *
[Los canarios no somos ni mejores ni peores que nadie. Lo que impide el
desarrollo de Canarias no es la geografía ni la cultura sino un marco
institucional diseñado para extraer rentas y proteger el inmovilismo extractivo
de una élite, local y foránea, que bloquea cualquier iniciativa o innovación
que amenace con moverle la silla en donde está cómodamente sentado. Al final la
factura de su "comodidad" la terminamos pagando los demás en forma de
desempleo, injusticia social, emigración y pérdida de oportunidades.]
Si piensas que
Canarias no se puede desarrollar porque son islas
ultraperiféricas perdidas en el medio del Atlántico, es lógico que pienses que
no hay nada que hacer, que no existen otras opciones de desarrollo y que te
resignes a aceptar lo que hay. Al fin y al cabo, mover las islas de sitio es
complicado. Hacerlas más grandes también.
¿Pero qué pasaría si
fuese mentira? ¿Qué pasaría si te digo que el desarrollo de las sociedades no
tuviera nada que ver con la geografía? ¿Te seguirías resignando a aceptar la
realidad actual como algo inevitable? ¿Seguirías pensando que no hay otras
opciones?
Nogales es una ciudad
dividida en dos por una valla. La mitad que queda al norte está en el condado
de Santa Cruz, en el desierto de Arizona, Estados Unidos. La mitad al sur está
en el desierto de Sonora, México. En Nogales Arizona el ingreso medio es de
30.000 dólares. En Nogales México, al sur de la valla, el ingreso medio es de
tan solo 10.000 dólares. Las dos Nogales comparten la misma geografía, la misma
raza y la misma cultura. Lo único que las separa es una frontera.
En Nogales Arizona la
mayor parte de los adolescentes van al instituto. La esperanza de vida es alta
y muchos residentes superan los 65 años. Al sur, en Nogales Sonora, la
criminalidad es alta y la esperanza de vida baja. Abrir un negocio allí es una
empresa arriesgada. No solo por el riesgo de robo, sino por todos los sobornos
necesarios para conseguir los permisos pertinentes. Los residentes del sur de
Nogales viven todos los días con la corrupción política y la ineptitud
administrativa. ¿Cómo pueden ser las dos mitades de una misma ciudad tan
diferentes?
Lo que explica el
desarrollo o subdesarrollo de las sociedades no es ni la geografía ni la
cultura sino las instituciones. Podemos poner muchísimos ejemplos, Corea del
Norte y Corea del Sur, Alemania del Este y del Oeste. En todos estos casos la
geografía es la misma y la cultura también.
Si la hipótesis
geografía no es válida para explicar el desarrollo o subdesarrollo de una
nación, entonces tampoco es válida para explicar el desarrollo o subdesarrollo
de Canarias. Pero por si acaso te queda todavía alguna duda y piensas que
Canarias podría ser una excepción, porque son islas, déjame ponerte otro
ejemplo. Singapur es una pequeña isla del tamaño de la isla de La Palma. De
hecho es un kilómetro cuadrado más pequeña. Pero el tamaño de su economía es
cinco veces superior al tamaño de la economía de toda Canarias.
Métetelo en la cabeza,
Canarias no es ninguna excepción. La hipótesis geográfica es una estafa que no
sirve para explicar el desarrollo o subdesarrollo de la sociedad. Pero en
Canarias todo está basado en ello, y claro, si te han hecho creer que tu
desarrollo depende de la geografía es lógico que te resignes a aceptar el
status quo y veas la corrupción y la dependencia como algo inevitable.
En Canarias se
argumenta que al ser un mercado pequeño y "ultraperiférico" la
demanda interna es insuficiente. Por tanto, para desarrollarnos, necesitamos
proteger a la industria local con medidas proteccionistas potenciando un
crecimiento endógeno, es decir "hacia adentro". Eso es básicamente lo
que dice el REF.
Pero podemos
igualmente argumentar que como la demanda interna es insuficiente es necesario
mirar a la demanda externa internacionalizando nuestra economía en un
crecimiento "hacia afuera", como han hecho Israel, Suiza o Singapur.
Como ves, la hipótesis geográfica es una tautología, es decir, un argumento que
me sirve tanto para demostrar una cosa como la contraria. Es decir, una
falacia.
Yo me pregunto cómo es
posible que nos hallamos gastado miles de millones en las dos universidades
canarias y todavía ninguno de de sus sesudos catedráticos se haya dado cuenta
que todo el marco institucional en Canarias es una enorme estafa construida sobre
una enorme mentira.
Decía el escrito de
Eduardo Galeano que el colonialismo visible te mutila sin disimulo: te prohíbe
decir, te prohíbe hacer, te prohíbe ser. El colonialismo invisible, en cambio,
te convence de que la servidumbre es tu destino y la impotencia tu naturaleza;
te convence de que no se puede decir, no se puede hacer, no se puede ser.
El término
ultraperiférico se inventó como sinónimo de minusvalía y de asilamiento, de
algo que nos impide el desarrollo si no es con ayudas. Hipótesis geográfica en
estado puro. Un concepto tóxico que dio lugar a una teoría tóxica para
justificar un régimen extractivo tóxico, corrupto y populista.
Los canarios no somos
ni mejores ni peores que nadie. Lo que impide el desarrollo de Canarias no es
la geografía ni la cultura sino un marco institucional diseñado para extraer
rentas y proteger el inmovilismo extractivo de una élite, local y foránea, que
bloquea cualquier iniciativa o innovación que amenace con moverle la silla en
donde está cómodamente sentado. Al final la factura de su "comodidad"
la terminamos pagando los demás en forma de desempleo, injusticia social,
emigración y pérdida de oportunidades.
Una élite extractiva
se caracteriza por tener un sistema de captura de rentas que permite, sin crear
riqueza nueva, detraer rentas de la mayoría de la población en beneficio
propio. Tienen el poder suficiente para impedir un sistema institucional
inclusivo, es decir, un sistema que distribuya el poder político y económico de
manera amplia, que respete el Estado de derecho y las reglas del mercado libre.
Los regímenes
extractivos favorecen a una minoría a costa de sacrificar las oportunidades de
desarrollo de la mayoría, extrayendo recursos y oportunidades en favor de unos
pocos. Los regímenes inclusivos, en cambio, dan igualdad de oportunidades
generando un mayor desarrollo económico y una mayor justicia social. Son
dinámicos e innovadores. Todos participan de la riqueza y las oportunidades, no
solamente unos pocos.
El problema de
Canarias no es la geografía sino los conceptos tóxicos que dan lugar a una
determinada forma de pensar. La hipótesis geográfica es una enorme mentira.
Puro teatro que se usa para justificar un régimen altamente extractivo que
sacrifica a la mayoría para favorecer a unos pocos.
* Director de Mencey Capital Management
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