El almendrero de
Nicolás
Regreso a los 70
Paco Déniz *
Los
que peleamos contra Suárez estamos llegando a la conclusión de que aquel hombre
no ha sido el peor de los presidentes españoles. Será que nos vamos poniendo
viejos, pero ahora no me parece tan pésimo, al menos supo dimitir. Quienes nos
curtimos en los 70 tenemos la sensación de que hemos vuelto al punto de
partida, y vamos a tener que pelear hasta por la ley del divorcio y porque se
paguen las horas extras.
Las declaraciones de los ministros de
Rajoy y de algunos responsables del PP de diferentes comunidades autónomas no
nos dejan otro remedio que abrir el ropero y desempolvar y engrasar el arsenal
que utilizamos en los setenta contra la derechización de este Estado, de cosas,
de barbaridades, de mercachifles y de fachas, porque, incluso, hasta eso, los
viejos conceptos vuelven a ponerse de moda. Si no díganme cómo hay que tildar a
la viceconsejera de sanidad de la comunidad de Madrid
que ha dicho que la sanidad no puede encargarse de por vida de los enfermos crónicos.
Díganme cómo hay que interpretar las declaraciones del gallo tapado de Gallardón sobre el copago de la justicia, y cómo hay que
interpretar la extracción de la deuda única y exclusivamente de las nóminas de
los trabajadores que quedamos en activo.
¿Cómo? Si alguien encuentra un concepto
postmoderno que me lo diga, porque esto es de fachas de toda la vida. Cómo hay
que interpretar la campaña contra la píldora del día después sin receta. Y con
cinco millones de parados, cómo hay que interpretar a Ana Oramas
pidiendo dinero para restaurar la Catedral. Pero regresar a los setenta supone,
también, devolver al PSOE a lo que era; un partidillo de amigos de las clases
medias altas ilustradas de algunas capitales y algunas villas con cierto
bouquet, nada más que eso, una cuadrilla pasiva agazapada a la espera de que la
izquierda real que se partía la cara contra Fraga, Martín Villa, los Tejeros y
todos los patrones habidos y por haber, se desgastara. Sólo tenían unos
concejalillos salteados.
Luego llegó Willy Brant
y la Cía., y el PSOE llegó al poder que es para lo que realmente han sido
creados, para gobernar.¿Qué importan Rubalcabas y Chacones? Eso es cascarilla para el debate que
tenemos, si precisamente por ellos tenemos que empezar de nuevo. Pero no es fácil,
estamos viejos, y por mucho que nos postmodernicemos,
no podemos evitar nuestra memoria y nuestros conceptos, jeitos y prejuicios,
etcétera. Hace falta otra avalancha juvenil como aquélla, si no, sólo contamos
con algunas de nuestras virtudes, que no eran pocas. Pero no sé si dará para
semejante tarea. Hace falta algo más.
*
SOCIÓLOGO
Artículos de Paco Déniz publicados en El Canario