Formas responsables de apostar por lo canario
-
[…La
compra de productos canarios potencia la economía local, afianza el medio rural
y la industria radicada en nuestras Islas, y contribuye a crear empleo, sobre
todo puestos de trabajo de calidad y con estabilidad en el sector industrial; en
definitiva, genera valor añadido en Canarias, lo que se enmarca en la línea
tan perseguida en el Archipiélago de la diversificación productiva…]
No hay duda de que
los productores canarios, tanto los industriales como los agrarios y pesqueros,
necesitan el máximo apoyo del consumidor presente en Canarias (locales y
visitantes)' un compromiso que, para ser verdadero, se debe traducir en la
demanda de esos artículos tanto de forma directa, por los consumidores, como
por la sociedad en su conjunto, para así reconocer la importancia de consumir
productos elaborados en Canarias, mucho más cuando aquéllos se comercializan
con garantías regladas de origen y calidad.
La presencia de distintivos de origen en bienes de
consumo isleños es clave para trasladar al consumidor potencial las máximas
garantías de procedencia y calidad, aspecto este último que incluye, entre
otras cuestiones, el control de la trazabilidad (desde la producción hasta la
venta final).
En la actualidad, los productos agropesqueros con
origen certificado en las Islas se pueden diferenciar con el llamado símbolo gráfico
de Canarias en la Unión Europea (DE), que nació junto al programa comunitario
Poseican (hoy Posei) en 1992, aunque ahora es cuando empieza a cobrar auge en el
Archipiélago. A ese distintivo general, que es compatible con las
denominaciones de origen (DO) y las indicaciones geográficas protegidas (IGP)
ya operativas en Canarias, se unen otras enseñas de origen y calidad, como es
el caso de la marca con registro comunitario "Elaborado en Canarias",
de la que es titular la Asociación Industrial de Canarias (Asinca) y que tiene
carácter privado y uso colectivo.
Tanto el distintivo "Elaborado en Canarias"
como el símbolo gráfico de Canarias en la DE son marcas que garantizan el
origen en las Islas de los productos, transformados o no, que portan tales grafías.
Pero no solo esto. Aparte de garantizar la procedencia isleña, también dan fe
al consumidor de que se trata de bienes de consumo que cumplen unos parámetros
elevados de calidad. Éstos son dos impulsos básicos para potenciar la demanda
en las Islas de tales artículos diferenciados, pero se pueden añadir algunos más:
que su compra potencia la economía local, afianza el medio rural y la industria
radicada en las Islas, y contribuye a crear empleo, sobre todo puestos de
trabajo de calidad y con estabilidad en el sector industrial; en definitiva,
genera valor añadido en Canarias, lo que se enmarca en la línea tan perseguida
en el Archipiélago de la diversificación productiva. Todas esas bondades están
contenidas en los productos que llevan esos distintivos, sobre todo la
certificación del origen isleño de lo que se compra y la acreditada calidad de
los artículos.
El símbolo gráfico de Canarias en la DE aparece por
primera vez en el reglamento del Consejo del Poseican (1992), y luego este instrumento se mantiene y desarrolla tras las
sucesivas reformas de ese programa. Los productos agropesqueros y transformados
locales susceptibles de utilizar ese símbolo gráfico son: a) los que ya
disponen de alguna distinción de calidad o están en condiciones de obtenerla
(DO, IGP o producciones ecológicas); b) los que, teniendo normas de calidad, no
poseen distinción de calidad diferenciada, y c) los tradicionales que están
sin regular, tanto los no transformados como los transformados, en este último
caso solo cuando la materia prima tenga origen en Canarias y represente como mínimo
el 90% del producto final.
Este
requisito, por las dificultades en el abastecimiento interno de materias primas
(precio y cantidad), limita mucho su uso en las industriales de tipo
agroalimentario con base en las Islas, pero en cambio lo hace más factible en
las artesanales.
Tras la exposición anterior, queda claro que tanto
la marca de Asinca "Elaborado en Canarias" como el símbolo gráfico
de Canarias en la DE son fórmulas que aportan todas las garantías sobre la
procedencia de los productos y la elevada calidad de éstos. Tal es así que, en
algunos casos y solo para artículos transformados agroalimentarios, hay firmas
que comercializan sus productos elaborados con las dos enseñas a la vez, algo
apreciable, por ejemplo, en derivados lácteos, en cuyo caso suele coincidir el
origen canario de la materia prima (mínimo del 90%) con el proceso industrial
local de elaboración del producto.
Cuando la materia prima canaria no alcance ese
porcentaje mínimo, el producto industrial agroalimentario no podrá llevar el símbolo
gráfico mencionado, aunque sí puede portar la marca "Elaborado en
Canarias", siempre y cuando el bien de consumo resultante ''haya sido
totalmente producido o transformado en las Islas, o bien cuando haya sido objeto
de operaciones productivas de transformación y/o de manipulación cuyo
resultado implique una modificación sustancial en sus características
esenciales". También debe
acreditarse que "dichas operaciones supongan la suma de un valor añadido
importante (riqueza) al producto final", como lo define el reglamento de la
marca. Por lo tanto, cuando se adquiere un articulo "Elaborado en
Canarias", se "compra lo canario" y así se apoya el empleo en
esas industrias y en todas las empresas que de forma indirecta participan en el
proceso de venta de un producto industrial de ese tipo.
Hay que tener en cuenta que por cada empleo generado en la industria se crean tres en el resto de sectores. Tampoco debe olvidarse que detrás de un producto "Elaborado en Canarias" siempre hay un trabajador isleño y la contribución clara al desarrollo de la economía canaria.
Fuente:
El
Día, 31-01-2016