Playas artificiales en La Palma

 

Gumersindo Bienes Reyes

¿Qué garantías tenemos de que la playa capitalina no será otra obra chapucera?

Costas, a  ruegos de los políticos palmeros como en anteriores actuaciones de playas artificiales en la Isla, va a hacer otra gran playa artificial en el litoral capitalino, frente a los aparcamientos de los terrenos ganados al mar; obra licitada por 28 millones de euros.

Bueno será ahora, y para no repetir los mismos errores, recordar algunas  actuaciones en la creación de playas artificiales en la isla de La Palma:

a) En el año 1993 se inventaron la playa de Bajamar, en Breña Alta. Obra engañosa, despilfarradora y productora de daños ecológicos realizada por Costas a cambio de  la natural de El Roque en Santa Cruz de La Palma, (aterrada ilegalmente), donde se gastaron 1.000 millones de las antiguas pesetas del erario público, y, en el primer temporal, la mar se llevó casi la totalidad de la arena, y la depositó en la bahía del puerto  palmero, dejando la escollera del paseo marítimo al descubierto y destruyendo varias escaleras de acceso a la playa.

La arena fue extraída, sin un estudio de impacto ambiental (EIA), principalmente de Barranco Seco (Santa Cruz de La Palma-Puntallana), con un barco procedente de Holanda, que, al verter la arena por un tubo en la nueva playa, eran visibles los pulpos agonizando rectando por la arena.

También tuvieron que pasar varios años para hacer efectiva la pesca de besugos... en Barranco Seco, por haber destruido los lugares de desove, al extraer la arena sin un estudio previo.

 b) Playa del litoral de Tazacorte. Esta actuación es similar a la anterior, dándose la anécdota de que, al día siguiente de la inauguración oficial, el mar se llevó casi la totalidad de la arena, rematando el resto el temporal siguiente.

Viendo estas actuaciones, me pregunto ¿de dónde se va a extraer la arena para hacer la gran playa? ¿Será del continente africano, como la de las Teresitas, en Tenerife, o de alguna playa natural de la Isla sin acceso por carretera?

 Si añadimos que en el litoral capitalino el mar suele inutilizar todos los años los aparcamientos de terrenos ganados al mar, que el cambio climático amenaza con disminución de playas y que la arena no es el material óptimo  para defender la ciudad de las olas en una tempestad. ¿Qué garantías tenemos los palmeros de que la gran playa, no vaya a engrosar la lista de obras chapuceras de playas artificiales de la Isla?                                   

PD: Si deseas saber lo que pasó con la playa de El Roque; compra el libro La playa de El Roque y la plataforma "Salvar la Playa".[1]

 

 

 

Comienzo de las obras en la playa nueva de Santa Cruz de La Palma

Playa del Puerto de Tazacorte  durante el temporal

 

Fotos: René Acosta

 

[1] salvar-la-playa