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no es de extrañar que en Canarias exista un régimen y una administración
civil y militar totalmente corrupta, las razones geopolíticas son las mismas
que en la Cuba española, asegurar la españolidad de Canarias a cualquier
precio…]
La
corrupción en el ejército español es una institución que cuenta con un
amplio historial que hunde sus raíces en la conquista de América y el régimen
colonial que allí se montó durante siglos. Los abusos de gobernadores,
virreyes y demás fauna española en las colonias americanas fue antológica.
La
corrupción en la Guerra de Cuba fue colosal a todos los niveles de la
administración civil y militar colonial, no solo la Capitanía General de Cuba
se enriqueció mediante la trata ilegal de esclavos sino que los oficiales
incluso robaban del presupuesto médico de los heridos para desviar fondos para
el rancho de oficiales, tal y como el premio nobel de medicina D. Santiago Ramón
y Cajal cuando estuvo destinado como médico en Cuba.
La
corrupción en Cuba fue tolerada y fomentada por el Estado Español, enfrentado
al dilema de fomentar la fidelidad a España ante la amenaza independentista
otorgando "flexibilidad" y "retribuciones informales" a la
administración civil y militar de la isla. Algo que en Canarias nos suena
"familiar". Por otro lado la abolición de la trata de esclavos por el
tratado con Inglaterra de 1817 supuso la apertura de un lucrativo negocio ilegal
de importación de esclavos que enriqueció tanto a la élite colonial española
en Cuba como el Marques de Alava o el Conde Ibañez, así como a otras familias
catalano valencianas y vascas, como a los mandos militares y a la corona española.
Sobre
la corrupción del ejercito colonial español en Marruecos queda como testimonio
la novela de Arturo Barea "La Forja de un Rebelde". Barea
estuvo varios años destinado en Marruecos como sargento y vivió de
primera mano lo que significaba la dirección de la guerra: un enorme pozo de
corrupción e ineptitud que llenaba los bolsillos de unos pocos mientras se
sucedían los desastres militares. "durante los primeros veinticinco años
de este siglo Marruecos no fue más que un campo de batalla, un burdel y una
taberna inmensos". La corrupción lo envenenaba todo. Desde el mismo
momento del reclutamiento los hijos de buena familia podían librarse de ir a la
guerra pagando una cantidad de dinero. Cuando el gran número de bajas obligó a
llamarlos a filas, se sirvieron de su dinero para asumir los mejores destinos
disponibles. El propio Barea tuvo suerte y debido a su formación pudo pasar un
largo periodo en un puesto de oficinas, lo cual aprovecha para describir los
corruptos procedimientos de los mandos, que jugaban hasta con las alpargatas
destinadas a los soldados para hacer dinero. Tal y como decía Barea "Marruecos
es bueno sólo para los oficiales y para los contratistas".
En
el Sáhara Español - una provincia tan española como Cuenca decían - el
comportamiento no fue diferente pero el destrozo ecológico mayor. Abuso,
racismo y una mentalidad extractiva y depredadora. Extinguieron la gacela del Sáhara,
acabaron con los avestruces y pescaban ametrallando el mar
indiscriminadamente…, total, para que usar redes si las balas las paga el
erario público,... En Fuerteventura se siguen comportando igual…, si
quieres adquirir sacos de lapas en peligro de extinción o sacos de mejillones
del país,.. pregunta por los uniformados, .. que para algo se han quedado con
media isla como campo de tiro y vender algo de marisco les complementa el
sueldo.
Un
colonialista o un colono es un privilegiado ilegitimo que ha aceptado serlo y
aprovecharse ilegítimamente de ello. Es un usurpador que ha aceptado serlo y se
cree con derecho a ello. Basura humana. Escoria aunque se vista de marca y lo
esconda tras presuntuosos ideales.
Pero
las críticas a los oficiales españoles no provienen tan solo del interior sino
también del exterior. Durante la Guerra contra los Franceses de 1808, el
general ingles Wellington hizo observaciones sobre la vanidad e incompetencia de
los mandos militares españoles. Hitler por su lado dijo "Si se leen los
escritos de Goeben sobre los españoles, se advierte que no han cambiado desde
hace cien años. (...) En ellos, lo lamentable es la diferencia de trato entre
los oficiales y la tropa. Los oficiales españoles viven de maravilla, mientra
que la tropa ha de contentarse con la más exigua de las miserias."
Pero
esto no es algo del pasado, este año el teniente Luis Gonzalo Segura
publicó la novela Un paso al frente en el que denuncia ante
la sociedad "lo que ya saben todos dentro los cuarteles": que las
Fuerzas Armadas "siguen ancladas en el siglo XX", regidas con
mano autoritaria y plagadas de casos de corrupción en los que "la
casta" de los altos oficiales se aprovecha de sus privilegios con la
complicidad de una justicia militar "nada independiente".
El
libro parte de denuncias que el autor ha planteado ante la justicia y habla de
desfases presupuestarios en la compra de combustible, comida, equipos informáticos
y armamento. La novela de Gonzalo Segura describe la realidad de un sistema de
“castas” militarizado donde los altos mandos despilfarran el dinero público
en clubes exclusivos, campos de golf, pabellones de lujo, “comidas del
Al
igual que el libro de Barea "La forja de un rebelde"
estuvo prohibido durante la dictadura de Franco, el libro de Gonzalo Segura
también está sufriendo presiones. No solo al autor lo han condenado en un
tribunal militar, lo cual lo ha obligado a declararse en huelga de hambre, sino
que según el propio autor existe una “tremenda cacería” en cuarteles de
Zaragoza, Valencia, Córdoba y Canarias, donde “compañeros han
sido duramente amenazados, incluso con la expulsión y el arresto, para que no
asistan, compren ni hablen de la novela” incluso amenazándoles para que no
asistan a las presentaciones de Gonzalo Seguro diciéndoles que las
presentaciones serán grabadas y espiadas.
Teniente
Luis Gonzalo Segura, autor del libro "Un paso al frente"
El ejército está podrido. Cuentan con 52.000 mandos para 78.000 militares de tropa, es decir dos oficiales por cada tres soldados. Hay 270 generales para diez brigadas, es decir 27 generales por brigada, y 1.050 coroneles para mandar cincuenta regimientos, 21 coroneles por cada regimiento. «La casta, que es endogámica, pasa de padres a hijos, tiene una ideología homogénea y una forma de pensar de otro tiempo».
Es una organización sexista y racista, en la que
los oficiales de la escala superior son los blancos; los suboficiales son
negros; los oficiales que vienen de suboficiales son mestizos y la tropa la
chusma. En los cuarteles, el acoso laboral es una herramienta común, que los
mandos tienen a su alcance, para mantener el orden. Una de las mayores
preocupaciones de la oficialidad es disfrutar con la mayor intensidad posible
del privilegio del poder: todo por la patria.
Cuando
todavía existía el servicio miliar obligatorio, los soldados ejercían de niñeras,
jardineros, pintores, obreros, etc..., al servicio de los oficiales como auténticos
esclavos. Al producirse su profesionalización, los altos mandos no adaptaron su
mentalidad a los nuevos tiempos ni prescindir de sus privilegios como señores
feudales; corrupción, falsedades y malversación.
En
cada recinto militar hay un pequeño reino de taifas compuesto por el jefe de
obras y el de cocina, que se encargan de los desvíos presupuestarios y las
facturas falsas, para fines muy particulares. De edificios austeros regulares y
uniformes por fuera, por dentro son clasistas, jerarquizados y heterogéneos,
donde el tamaño y el mobiliario, dejan patente el status del jerarca que los
ocupa.
Las
condecoraciones se las reparten entre aquellos que no hacen «demasiado ruido,
aunque nunca hayan pisado un escenario de guerra»; o las indemnizaciones de
60.000 euros que reciben los tenientes coroneles por no ascender a coronel, al
estar sobrepasado el cupo, junto con las dietas y comisiones de servicio que
reciben, mientras «a la tropa se le reduce el salario», incluso la comida.
Las
advertencias de un general al autor del libro fueron claras; "No te empeñes
en sanear una empresa cuando a lo mejor todo el país está podrido. No intentes
lavar la empresa, porque ésta reacciona contra ti y te mata". Estos
están dispuestos a todo para defender sus chiringuitos corruptos, sus
privilegios ilegítimos a costa del erario público.
Pero
si el despilfarro de dinero público y la corrupción del Ministerio de Defensa
es intolerable quizás lo más esperpéntico es el alijo de cocaína incautado
en el buque escuela de la Armada el Juan Sebastian Elcano…, o
el Gramo como ha sido rebautizado popularmente tras el suceso.
Con 100 kilos por banda, polvo y coca a
toda vela, no corta el mar sino vuela un velero farlopin. Bajel escuela que
llaman a su carga el Perico, en tdo el mar conocido del uno al otro cofín.
Imagino
que la intromisión en el "negosio" no le habrá gustado nada a la
Guardia Civil, que es quien controla puertos, aeropuertos y aduanas,
y aunque la colaboración entre la Guardia Civil y el ejercito es estrecha,... -
el CNI y los servicios de "inteligencia" españoles reclutan tanto a
miembros de las Fuerzas Armadas como de la Guardia Civil y la Policía Nacional,
además de a políticos y otros personajes que mantienen en nomina, algo que en
Canarias no es más que "familiar" con Jose Carlos y Román, por
ejemplo, amén de las juras de bandera de numerosos políticos y empresarios -
entre bandidos cada cual trata de proteger su "negosio" cual banda
mafiosa.
Pero
en realidad la denuncia vino por parte de las autoridades de EEUU ya que los
marineros del Juan Sebastián el Gramo habían vendido otros 20 kilos de cocaína
a narcotraficantes de Nueva York que tras ser apresados por la policía
norteamericana confesaron e identificaron a sus "suministradores".
La
información fue facilitada a las autoridades españolas por el Departamento de
Investigación de la Seguridad Nacional (HSI) estadounidense y gracias a eso el
suceso salió a la luz, que si no se tapan unos a otros como siempre.
Pero
lo del Juan Sebastian el Gramo no es una excepción, supuestamente otros
buques de la Armada aprovechan las facilidades que se derivan de su estatus
militar para traficar con droga según la HSI de EE UU y la Unidad de
Delincuencia Especializada y Drogas de la Unidad Central Operativa (UCO) de la
Guardia Civil. No está mal para la muy señoritinga y elitista Armada española,
la creme de la creme de las Fuerzas Armadas españolas, un estatus al que las
bases españolas en Canarias contribuye de forma importante y que se traduce en
"presupuesto" y "capacidades logísticas y operativas".
Ahora cuando te digan que hay que controlar el tráfico de drogas en el Atlántico
ya sabes a que se refieren en realidad.
Si
esperpéntico es el hallazgo de 127 kilos de cocaína en el buque escuela (más
los 20 que vendieron en Nueva York y otros que se hallan "perdido" por
el camino dentro y fuera de España, no en vano la Guardia Civil necesitó
registrar el buque en "tres ocasiones" hasta "hallar la
droga" y entre
el primer y el tercer registro pasaron 20 días a la tercera
va la vencida dicen), más esperpéntico aún ha sido las presiones de Defensa para
que el hecho no se discuta en el Congreso de los Diputados. ...
Imagino que habrán alegado la Unidad de la Patria, la imagen de la
"Institución" o la responsabilidad con la Patria y la cada vez más
devaluada "Marca España",... pero que en el fondo tan solo esconde un
intento de proteger la total impunidad de sus chiringuitos extractivos y
corruptos. Además para algo están "aforados" como el Rey y su
familia, jefe supremo de las Fuerzas Armadas.
Pero
todo esto no es una sorpresa para un país podrido y corrupto hasta la médula
que no tiene historia sino tan solo antecedentes penales. España no solo ha
exportado corrupción y un cáncer cultural que es confundir poder con dominio
en lugar de entender que el poder es consentimiento (para ellos el
consentimiento se los da el uniforme y la metralleta que usan). El autoritarismo
y la corrupción son las dos caras de la misma moneda.
Por
todo ello no es de extrañar que en Canarias exista un régimen y una
administración civil y militar totalmente corrupta, las razones geopolíticas
son las mismas que en la Cuba española, asegurar la españolidad de Canarias a
cualquier precio…, no en vano el "negosio" de la droga y la
oportunidad de robar del presupuesto público del Ministerio de Defensa es algo
demasiado lucrativo…, eso si lo enmascararán como la necesidad de hacer
frente al islamismo radical (que el propio Occidente financia y propicia con su
actitud neocolonial y su apoyo a regímenes corruptos y dictadores) la necesidad
de vigilar a Marruecos, la inmigración ilegal (que la UE causa a través de su
injusta e ilegitima Política Agraria Común) o para proteger los pozos de petróleo
españoles (entiendes ahora la insistencia del Estado español, el Ministerio de
Defensa y los militares para apoyar las prospecciones de Repsol en aguas
canario-marroquíes).
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Diaz
Tejera, senador socialista, jurando "fidelidad". Me recuerda a las
ceremonias de admisión de la Mafia; Alcalde Cardona (PP) jurando bandera;
Guadalupe, la muy "naciona-lista" Presidenta Cabildo de la Palma (CC)
besando la bandera en un gesto patético.
Todo
ello se traduce en suculentos contratos y adquisición de equipo, material
informático y armamento que llena los bolsillos de cuatro. Quien no entienda el
papel de las Fuerzas Armadas, la Guardia Civil y otros Cuerpos de Seguridad del
Estado y los Servicios de Inteligencia en Canarias es que todavía no le ha
visto los verdaderos dientes al colonialismo.
Se
llama "intereses de Estado", pero en realidad el Estado no somos
todos, son la casta, es decir sus propios intereses. El que pagas eres tu, bien
con tus impuestos, bien con tu proyecto de vida, bien con tus oportunidades. Lo
dicho, Canarias es un régimen extractivo y corrupto, pero eso no es ninguna
sorpresa, la verdadera extraño sería que perteneciendo a España y estando
gobernados civil y militarmente por los personajes por los que estamos
gobernados no lo fuéramos. El problema de España es que está llena de españoles.
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