12
de octubre, nada que celebrar
Inekaren
El
12 de Octubre, llamado Día de la Hispanidad, es celebrado por numerosos españoles
cada año. El orgullo patriótico, más altivo que nunca, sale a la calle. Es el
día de jactarse de ser español.
Sin
embargo, ¿qué es lo que realmente hay que celebrar? Cierto es que no todo el
mundo sabe lo que encierra esta fecha ni lo que verdaderamente se está
conmemorando. La historia universal decretó tal día de 1492 como la fecha del
“descubrimiento del nuevo mundo” (como si América existiese únicamente
desde ese día, o como si dicho acontecimiento hubiera aportado algo más que
miserias y desastres a la población indígena americana).
Pese
al intento del Estado Español, con su parasitaria monarquía a la cabeza, de
intentar vender su “Fiesta Nacional” como la conmemoración de “un
encuentro entre dos culturas”, trascendental, según ellos, tanto para España
como para todos los pueblos de América Latina, bien sabemos que esta fecha no
supone otra cosa más que el inicio de un período de terror, marcado por la
conquista y la colonización de un pueblo. Las continuas torturas,
trabajos forzados, asesinatos, los abusos y carencias higiénicas y alimenticias
que sufrieron los indígenas desde la llegada de los occidentales condujeron,
como era lógico, a una auténtica catástrofe demográfica de la población
nativa, que irremediablemente cayó aniquilada ante la explotación inhumana
ejercida por el colonialismo, siempre eficaz para hacer prevalecer la voz y la
religión del imperio a base de la imposición.
Precisamente,
la historia universal obvió esta otra parte de la historia: la de la destrucción
de una cultura que fue despojada de sus territorios, creencias y formas de
organización social y lingüística a partir de tan “conmemorable” fecha.
Este asesinato es presentado desde entonces como el “Día de la hispanidad”,
“Día de la Raza” o “Día Nacional”. Así pues, no es ningún secreto
que este despreciable día para muchos de nosotros simboliza el inicio de la
evidente decadencia, la explotación y la miseria perpetuada en todo el
continente americano durante siglos.
En
resumidas cuentas, una evidente masacre y un prolongado robo de recursos
latinoamericanos que continúa en la actualidad a través del dominio económico
que aún ejercen en la zona las multinacionales españolas.
[“Los
indios, víctimas del más gigantesco despojo de la historia universal, siguen
sufriendo la usurpación de los últimos restos de sus tierras, y siguen
condenados a la negación de su identidad diferente. Se les sigue prohibiendo
vivir a su modo y manera, se les sigue negando el derecho de ser”
Eduardo
Galeano]
Es,
cuanto menos, bochornoso que el Estado Español siga celebrando su “Fiesta
Nacional” este deshonroso día, tan vinculado a todos los regímenes
autoritarios (desde las coronas castellanas al franquismo) y cuyo máximo símbolo
no es otro que la conquista e invasión de múltiples naciones, la explotación
y esclavización de seres humanos, o el exterminio genocida de multitud de
pueblos, proclamándose así, sin el más mínimo sonrojo, herederos orgullosos
de estos hechos, enalteciéndolos y conmemorándolos de esta manera.
¿En
qué cabeza enferma cabe asentar el patriotismo de un pueblo sobre la sangre, la
dominación, el expolio y el aprovechamiento de otros?
Inekaren
12 de octubre del 2011
Archipiélago
Canario, norte de África