El estado libre
asociado y la plena autonomía,
perversos inventos
del colonialismo
El ejemplo de estado libre asociado por excelencia lo constituye la
isla de Puerto Rico, avistada, para su desgracia, por el genocida Cristóbal Colón
en su segundo viaje a las Américas el 19 de noviembre de 1493. La colonización,
que no conquista, pues todavía hay rebeldía, comenzó en 1508, al mando del
español Juan Ponce de León, nombrado primer gobernador al servicio del
colonialismo de la isla.
Los españoles llamaron a la isla San Juan Bautista, denominando Puerto
Rico a la isleta donde está la ciudad. En 1521 los nombres se invirtieron y San
Juan pasó a ser el nombre de la ciudad capital. En diciembre de 1897, el Primer
Ministro español, Práxedes Mateo Sagasta, otorgó una recortada autonomía a
Puerto Rico.
En 1898, Puerto Rico fue invadido por el ejército de Estados Unidos,
como consecuencia del estallido de la guerra contra España. Mediante el Tratado
de París, la isla fue cedida por España a Estados Unidos como “botín de
guerra”. Puerto Rico pasó a ser territorio estadounidense.
A mediados de 1950, el Presidente Harry S. Truman firmó la Ley pública
600, estatuto que concedió a Puerto Rico el derecho de redactar su propia
Constitución, pero con la salvedad de que debería ser aprobada por el Congreso
de los Estados Unidos. Exactamente como ocurre en la actualidad en el estado
español, que se arroga el derecho de ratificar o no lo que acuerden los
parlamentos autonómicos en base a sus recortadas y falsas autonomías,
demostrado una vez más mediante la ingerencia del gobierno metropolitano, más
conocido como el calvario, en sus competencias mediante los 10.000 millones
recortados en sanidad y educación, traspasadas a las mismas.
En agosto de 1951 se efectuó la elección de los integrantes de la
Asamblea Constituyente. La Asamblea redactó un documento, que fue aprobado por
el pueblo mediante referéndum especial el 3 de marzo de 1952. El 25 de julio de
ese año entró en vigor la Constitución. De esta forma, se creó el Estado
Libre Asociado de Puerto Rico, con un sistema de gobierno autonómico que ha
estado vigente desde entonces y todavía no se ha procedido a la Descolonización
o sea sigue siendo una colonia.
Las aduanas, la inmigración, el comercio interestatal, los correos y
la defensa están bajo la jurisdicción del gobierno de Estados Unidos. Como
ciudadanos estadounidenses, los puertorriqueños sirven en las Fuerzas Armadas
de los Estados Unidos, ya sea como voluntarios o a través del servicio
selectivo.
El
Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario tiene entre sus objetivos políticos
la Descolonización del Archipiélago Canario y la proclamación de su
Independencia, reconociendo como forma del Estado Canario la República Federal
en la que ningún territorio insular prevalezca sobre los demás.
Se
trata de una República Federal Archipelágica, cuyo terriotorio comprende las
Islas de El Hierro, Fuerteventura, Gran Canaria, La Gomera, Lanzarote, La Palma
y Tenerife, así como las Islas de La Graciosa, Alegranza, Lobos y Montaña
Clara, Roque del Este y Roque del Oeste e Islas Salvajes. Comprende
también el mar territorial que nos rodea, sus aguas limítrofes (después de
establecer la mediana, cuando proceda, con los países vecinos y descontar las
El pueblo canario debe ser consciente de que
actualmente, al ser Canarias una colonia de España, no tenemos competencia
alguna sobre ese territorio, al que sólo podemos acceder desde la recuperación
de nuestra arrebatada Independencia. Canarias puede y necesita delimitar sus
fronteras acorde con la jurisdicción internacional que acatamos y respetamos.
Es urgente, por lo tanto, proceder a la Descolonización
e Independencia de Canarias y a delimitar nuestras fronteras, internacionalmente
reconocidas, para impedir que estados forajidos, que no respetan el ordenamiento
jurídico internacional, sino cuando les conviene, se pongan frente a frente
negociándose nuestros recursos y nuestro territorio natural.
El Movimiento UPC
considera que la figura del estado libre asociado no es otra cosa que un
subterfugio de los países colonialistas para seguir esquilmando a las colonias,
como es el caso de Puerto Rico, cuya independencia reclaman los patriotas
puertoriqueños. El Movimiento UPC
renuncia expresamente al estado libre asociado para Canarias y no apoyaremos jamás
un Estado Libre Asociado con España, ni con Marruecos, ni con Cabo Verde, ni
con ningún otro país y menos después de nuestra nefasta experiencia histórica
de pactos con el colonialismo español y tampoco apoyaremos ni federaciones ni
confederaciones del Gran Magreb, propuesto en su momento por el monarca alauita
Hassan II, ni la Gran Tamazgha de los hermanos imazhigen, a los que apreciamos y
respetamos, con los que seguiremos manteniendo e intensificando relaciones
fraternales y de buena vecindad, rechazando igualmente un estatuto de autonomía
plena, otro invento al servicio de la opresión colonial, pues ni el estado
libre asociado ni la plena autonomía exigen la Descolonización y no son otra
cosa que inventos de los opresores países colonialistas para, esquivando la
resolución 1514 (XV) de 14 Dicimbre de
1960 (Declaration On The Granting Of Independence To Colonial Countries And
Peoples)[1],
prolongar la agonía de las colonias, sino que exigimos a España y a los
organismos internacionales la Descolonización incondicional, con las
indemnizaciones correspondientes por daños y perjuicios humanos y materiales,
de nuestra Patria Canaria y luego formaremos parte del concierto de las naciones
estatales libres: queremos ser un Estado Libre e Independiente, en lugar de
un estado libre asociado que significa más cadenas para nuestro sufrido pueblo.
Canarias,
11 de Abril de 2012.
Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario (Movimiento UPC).