El Consejo Insular de Aguas de Gran Canaria sanciona a la empresa Veneguera Costa Canaria del grupo Lopesan, a raíz de una denuncia de Ben Magen-Ecologistas en Acción, por obras sin autorización en el cauce público del Barranco de Veneguera. La Federación Ecologista espera que las otras instancias a las que se denunciaron los hechos: Medio Ambiente del Cabildo, Fiscalía y Agencia de Protección del Medio Urbano y Rural, actúen ante la posibilidad de infracción o delito ambiental dentro de un Espacio Natural Protegido.
Esto salió ayer en un periódico digital afín al Cabildo, lógicamente porque este pelotazo se les va de las manos y donde están implicadas todas las administraciones.
Dice el escrito de Ben Magec, que ha denunciado a Lopesan ante el Consejo Insular de Aguas –órgano competente en los cauces y barrancos por ser de dominio público–, pero no el destrozo hecho dentro del Parque Rural del nublo, que se lo ha apropiado la empresa de Eustaquio López.
Como muchos sabemos, los dirigentes de Ben Magec son hoy técnicos del cabildo y cómplices de la especulación en el Barranco de Veneguera y Tabaibales.
Se han saltado el destrozo del patrimonio arqueológico, de flora endémica y demás, saliendo ahora con un brindis al sol después de que la opinión pública se ha ido enterando de dicha corruptela. Habla Ben Magec en su escrito, que el Consejo Insular de Aguas ha multado a la empresa Lopesan con 6000 euros: no sé si reírme o llorar.
¿Por qué Ben Magec no avisó a la población y la convocó (como hacía antes) cuando empezaron las palas a trabajar, sino que silenciaron todo hasta ahora que salen con esta gran excusa?
Éstos son cómplices de la corrupción, sí, los mismos que abanderaban o protagonizaban la lucha del la coordinadora “Salvar Veneguera” donde tantas movilizaciones y conciertos se hicieron en pro de la defensa del barranco y sus ecosistemas.
Recordar que, Ben Magec, en su momento estuvo en contra de la autopista de La Aldea, hasta que llegaron al Cabildo donde tragaron con esa infraestructura preparada para especular en la Aldea y seguir hasta Mogán.
También se inhibieron ante el destrozo del barranco de El Veril, donde el Cabildo dio trato de favor a la empresa Loro Park, donde habían yacimientos arqueológicos, flora y fauna, permitiéndole desmontar la zona y tapar la superficie del barranco con hormigón para aprovechar el terreno y montar el Sian Park.
Ben Magec apoyó la matanza de cabras guaniles, poniendo como pretexto que se comen la flora endémica, para así colaborar y dejar paso a las subvenciones europeas a la forestación y desplazar nuestro sector agrícola.
Hace unos meses hicieron una escaramuza con pancarta –otra propaganda para lavar su imagen ante el desprestigio que se han creado desde que Antonio Morales entra en NC y en el Cabildo, enchufando a muchos de ellos–, donde cacareaban, con mucha suavidad, por las aceras que se estaban haciendo en el Pinar de Tamadaba…; decían, entonces, que se podían hacer de otra forma menos dañina: no denunciaban públicamente qué administración ni políticos o tecnócratas estaban haciendo todo este deterioro de la isla porque son ellos mismos.
Tampoco se opusieron al acuario “Poema del mar”, propiedad del dueño de Loro Park, donde han metido animales marinos en cautividad, como no han dicho nada de los vertidos en Gran Canaria porque es competencia del Cabildo, claro está, para quien trabajan.
Ya no hay por donde agarrarlos puesto que están atrapados con el pudridor dinero.
¿Cuál es el siguiente pelotazo en la Isla, Ben Magec? Ustedes están informados porque son parte de lo mismo.
Esperemos que los canarios nos pongamos las pilas y no nos dejemos engañar más por esta mafia, pues, nuestra tierra la están deteriorando a pasos agigantados para recreo y ludismo turístico, beneficiando a las empresas constructoras y turísticas de amigotes como Lopesan y extinguiéndonos como pueblo.
No podemos contar con ningún político porque no hay uno decente, pero hasta los colectivos, como Ben Magec, que antes defendían algo, ya tienen la cabeza en el pesebre. Sólo la movilización popular, sin dejar que nadie patrimonialice la lucha, puede salvar nuestra tierra canaria: la colonia más deleznable y antigua del mundo. Pobre tierra, pobres canarios cada vez más esclavos y satisfechos con las cadenas.
* Isidro Santana León: novelista, poeta y cantaautor.
Otros artículos de Isidro Santana León publicados en El Canario y en El Guanche