"La Muerte no importa,

cuando se muere por lo que uno ama"

 

Por Paco Díaz

 

Canarias con sus volcanes y fumarolas es una tierra que desde siempre parió valientes y generosos héroes y heroínas, como Andamana, Gumidafe, Artemi, Benasén el Bueno, el Gran Tinerfe, Tanausú, Zonzamas, Gumifafe, Bentejuí, Doramas, Tazarte, Adargoma, Menkey Benchomo, Archimenchía Tinguaro, Bentor, Ichasagua, Juan Francisco de León, Francisco de Miranda, José A. Páez, Simón Bolívar, los dos hermanos próceres de Venezuela, los "tigres de Oriente", el laureado general y dos veces presidente, José Tadeo Monagas y su hermano Juan Gregorio, también presidente; José Artigas, José Martí y los cuatro generales "isleños" de los ocho del ejército mambí: Julio Santana Santana, Manuel Suárez Delgado, Matías Vega Alemán y Jacinto Hernández Vargas; Secundino Delgado, Antonio Cubillo y tantos anónimos héroes y heroínas. 

 

              FONTANALES...

 

Tu nombre, frescas fontanas evoca,

un remanso de paz y bucólico marco

para la meditación y el pensamiento,

refugio para quien la creación ama.

           

Invicto guardián del verdor eterno,

donde la hortensia y la retama crecen

y las artemisas su perfume expanden,

y las estaciones aún guardan su ritmo.

          

Eres la alfaguara de las concordias,

vástago de los devaneos del volcán,

que dejó una estela de fértiles valles,            

morada de seres que con fe duermen

y despiertan colmados de esperanzas.

           

Allí habita gente juiciosa y sencilla,

capaz de afrontar cualquier infortunio

para renacer con vigor de sus cenizas.

 

Por todo eso y algo más, declaro:

Cuando la ajetreada vida urbana

me angustia y obnubila mi mente,

cuando me asfixia el aire viciado

de esas calles de asfaltado infecto...

           

-Te echo de menos, Fontanales.

           

Cuando anhelo confortar mi alma,

o vagar sin rumbo por esas sendas,

o percibir la serena voz de los pinos,

o la suave caricia de la fresca brisa...

          

-Te echo de menos, Fontanales.

 

Cuando deseo jugar con la neblina

o sentir sobre mi un vital aguacero,

o tener la sensación de frío auténtico,

en los tristes días del crudo invierno

           

-Te echo de menos, Fontanales.

            

Cuando deseo revivir los recuerdos

de infantiles y alocadas aventuras,

o asomarme a  la ventana del cielo

en las invernales noches estrelladas,

o en las templadas veladas del estío,

o  agradecer a Dios su obra ingente,

          

-Te echo de menos, Fontanales.

            

Cuando los coloreados ocasos añoro,

o los ecos que despiden cada jornada

con cencerreo de las ovejas en el redil,

o la algarabía de las canoras avecillas,

          

-Te echo de menos, Fontanales.

EL SENDERO QUE VA AL VALLE

 

El sendero que va al Valle

valle verde, exuberante,

valle de flora endémica,

huella del pasado guanche.

 

Valsendero, bucólico nombre,

patria de gente importante,

que al noble visitante extasía,

al que la paz constante busca...

 

Mora quien a su pueblo ama,

y tiene por norma el trabajo,

el que se alimenta gustoso ,

de lo que produce la tierra...

 

Gente que tranquila espera,

que el Cielo un día les libere

del yugo cruel y humillante,

de la naciente nación hispana,

que antaño creo un imperio,

invadiendo nuevos territorios,

imponiéndose a sangre y fuego,

por los confines del mundo.

 

Vive aquí Paco Díaz Guerra,

diseñando una sutil estrategia

que libere a su amada patria

de la esclavitud que la oprime.

 

                      *

Un prócer de la isla Canaria,

émulo de José Martí, el poeta,

cuyos versos sirvieron en Cuba

para impulsar la independencia...

Tamarán y sus hermanas isleñas,

unidas por un mismo destino,

tendrían que lanzar al espacio

su Atis Tirma, y no su vacaguaré,

para que el planeta se entere

que una potencia extranjera,

que no es madre sino madrastra,

su dominio y leyes nos impone

con una complicidad bastarda,

de quienes canarios se dicen,

pero su alma tienen vendida...

 

 

* * * * * * *

 

 

 

 

   José M. Balbuena Castellano

 

 

Muchas gracias por tus hermosas poesías sobre nuestros amados barrios Fontanales y Valsendero, de los que espero que te guste el "guante" que le tiré a tres directivos de la AAVV de Valsendero, para organizar una necesaria fiesta de hermanamiento entre nuestros dos barrios vecinos y hermanos en sangre, tal como ¿recuerdas, septiembre u Octubre 1998?, cuando organicé el merecido homenaje al patriarca Eulogio Lantigua, del Fontanales, en el Restaurante Sibora, con éste totalmente abarrotado con más de 300 comensales, porque se hizo pequeña la finca del pozo de Pajaritos. Muy bien que merecía este homenaje este  benefactor, Sr. Lantigua por su generoso apoyo al no permitir dejar sin agua a los vecinos de Fontanales para primar a los terratenientes de la costa y ayuntamientos de Arucas y Las Palmas?. A pesar de las presiones y, también amenazas de un poderoso "aguamangante" de la zona. Lo que le obligó al muy anciano Don Eulogio responder muy enfadado: "¡Si me amenazas con no comprarme el agua sobrante en invierno, como represalia por no dejar sin agua a mis vecinos agricultores en este verano tan seco, no me importa ya que construiré  un gran estanque y la guardo en él¡"

 

¿Sabes, que por mi apoyo incondicional a los pastores y agricultores desde mis programas de radio Prisma Canario, si yo hubiera sido más interesado y hubiera accedido a su oferta me hubiera regalado una propiedad en la zona? Tal y como ya había hecho con un vecino pastor, T. G. a quien donó valiosos terrenos y agua en propiedad.

 

 

-

 

Como insistente gusanillo en tu conciencia, ya te lo he advertido en varias ocasiones, ¡y, tú bien que sabes que tengo razón!, que tu gran futuro poético, y periodístico, a escala internacional, ya que has sido creado con la mejor madera de la más vieja tea canaria (como la de tu abuelo Castellano, quien al menos tuvo 36 hijos reconocidos, sin contar los otros muchos) está en la poesía libertaria a imitación de tu tocayo y maestro, José Martí, hijo de la "isleña" Dña. Leonor Cabrera, el ilustrado pensador, orador, prolifero escritor, periodista, el amado poeta que quebró todos los corazones, y, finalmente,  el "Ángel y mártir de la Independencia de Cuba". Éste gigante también  fue embajador y representante consular en una treintena de países, sin librarse de que tan necrófilo sistema colonial español dejara de perseguirle y organizarle sabotajes internacionales, en todos los países en que promovía la independencia de su sorroballada nación cubana..., igualito que lo es ahora esta colonia de nuestra nación Tkanaren.

 

 ¡Fue terrible y encarnizada la persecución del colonizador sistema español contra tu maestro, al que aceleradamente debes imitar, ya él en vez de cejar, ¿como lo haces tú?, redoblaba sus esfuerzos emancipadores. Fue tan enorme el genocidio, el que los "gachupines" eufemísticamente llamaban "reconcentracíones", que fueron realmente  primeros campos de exterminio de la humanidad, que creara el genocida general "El Carnicero", Laureano Weyler, los que pronto se extendieron a todo el país convirtiendo éste en una putrefacta prisión, con epidemias, hambrunas, muerte y desfile de "La Lechuza", las tétricas cajas de muertos (ver en Internet fotos famélicas y montañas de carabelas igual que en Auscwitz o Treblinka. Quienes más lo sufrieron además de los cubanos, fueron nuestros "isleños", ya que la mayoría fueron alcaldes o lucharon con el ejército mambí, como mis antepasados parientes de Valsendero, los hermanos Roque y Juan Acosta Navarro.

 

A éste genocida le concedieron todos los honores, Capitán General de las colonias de Filipinas, Cataluña y Euskadi, además de Virrey de Canarias, Marqués de Tenerife, Conde de Rubí  y, hasta el propio rey Alfonso XIII, el mismo reyezuelo que tenía fama de promover aquellas primeras películas de porno mudo, se lo agradecía personalmente cuando le visitaba con frecuencia, aún ya retirado en su finca del El Bohio, en Segovia. ¡Aún actualmente  el Ejército español le considera "su héroe" y los "nacionalistas" de Chinet siguen dedicando a su memoria una bella plaza, a la que le los independentistas en Asentejo del ´98, cambiamos por el nombre de Secundino Delgado! 

 

-

 

Los métodos genocidas de "El Carnicero"  Weyler en Cuba, luego fueron copiados por  general Wiliam T. Sherman con los campos arrasados y exterminios en Carolina de Norte; Hitler con los de los judíos; otra vez los "angelitos vengadores" ameriKanos (ahora haciendo la pantomima de policía global contra Siria) con los gaseados con napalm Vietnán[1], los racistas "boër en Sudáfrica (no olvidar que los "inocentitos" EEUU hasta 2009 no había quitado a los verdaderos patriotas del Congreso Nacional Africano ni a Nelson Mandela, de la lista terrorista. A los mismos que el hipócrita Obama, el "Nobel de la Paz", homenajeó hace solo dos meses), o el genocidio de servo-bosnios del grupo paramilitar "Los escorpiones", del "carnicero de Srebrenica", el general Ratko Mladic. ¿Es que vas a esperar a que nos preparen los "spanish fly" otro "carnicero canario", para involucrarte y comenzar a defender a tu patria con el gran poder de tu poesía libertaria martiniana para despertar las adormecidas conciencias de decenas de miles de narcotizados indiecitos "canarinhos".[2]y[3]  ¡Fastídiate, porque sé no te gusta este calificativo!   

 

Dos patrias

 

Dos patrias tengo yo: Cuba y la noche.
¿O son una las dos? No bien retira
su majestad el sol, con largos velos
y un clavel en la mano, silenciosa
Cuba cual viuda triste me aparece.
¡Yo sé cuál es ese clavel sangriento
que en la mano le tiembla! Está vacío
mi pecho, destrozado está y vacío
en donde estaba el corazón. Ya es hora
de empezar a morir. La noche es buena
para decir adiós. La luz estorba
y la palabra humana. El universo
habla mejor que el hombre.
Cual bandera
que invita a batallar, la llama roja
de la vela flamea. Las ventanas
abro, ya estrecho en mí. Muda, rompiendo
las hojas del clavel, como una nube
que enturbia el cielo, Cuba, viuda, pasa...

 * * *

Hijo del alma

Tú flotas sobre todo,
Hijo del alma!
De la revuelta noche
Las oleadas,
En mi seno desnudo
Déjante el alba;
Y del día la espuma
Turbia y amarga,
De la noche revueltas
Te echan las aguas.
Guardancillo magnánimo,
La no cerrada
Puerta de mi hondo espíritu
Amante guardas;
Y si en la sombra ocultas
Búscanme avaras,
De mi calma celosas,
Mis penas varias,?
En el umbral oscuro
Fiero te alzas,
Y les cierran el paso
Tus alas blancas!
Ondas de luz y flores
Trae la mañana,
Y tú en las luminosas
Ondas cabalgas.
No es, no, la luz del día
La que me llama,
Sino tus manecitas
En mi almohada.
Me hablan de que estás lejos:
¡Locuras me hablan!
Ellos tienen tu sombra;
¡Yo tengo tu alma!
Ésas son cosas nuevas,
Mías y extrañas.
Yo sé que tus dos ojos
Allá en lejanas
Tierras relampaguean,?
Y en las doradas
Olas de aire que baten
Mi frente pálida,
Pudiera con mi mano,
Cual si haz segara
De estrellas, segar haces
De tus miradas!
¡Tú flotas sobre todo,
Hijo del alma!

* * *

Cultivo Una Rosa Blanca

Cultivo una rosa blanca
en junio como en enero
para el amigo sincero
que me da su mano franca.

Y para el cruel que me arranca
el corazón con que vivo,
cardo ni ortiga cultivo;
cultivo la rosa blanca

* * *

José Martí, 1853-1895

Mi último adiós

¡Adiós, Patria adorada, región del sol querida,
Perla del mar de oriente, nuestro perdido Edén!
A darte voy alegre la triste mustia vida,
Y fuera más brillante, más fresca, más florida,
También por ti la diera, la diera por tu bien.

En campos de batalla, luchando con delirio,
Otros te dan sus vidas sin dudas, sin pesar;
El sitio nada importa, ciprés, laurel o lirio,
Cadalso o campo abierto, combate o cruel martirio,
Lo mismo es si lo piden la patria y el hogar.

Yo muero cuando veo que el cielo se colora
Y al fin anuncia el día tras lóbrego capuz;
si grana necesitas para teñir tu aurora,
Vierte la sangre mía, derrámala en buen hora
Y dórela un reflejo de su naciente luz.

Mis sueños cuando apenas muchacho adolescente,
Mis sueños cuando joven ya lleno de vigor,
Fueron el verte un día, joya del mar de oriente,
Secos los negros ojos, alta la tersa frente,
Sin ceño, sin arrugas, sin manchas de rubor

Ensueño de mi vida, mi ardiente vivo anhelo,
¡Salud te grita el alma que pronto va a partir!
¡Salud! Ah, que es hermoso caer por darte vuelo,
Morir por darte vida, morir bajo tu cielo,
Y en tu encantada tierra la eternidad dormir.

Si sobre mi sepulcro vieres brotar un día
Entre la espesa yerba sencilla, humilde flor,
Acércala a tus labios y besa al alma mía,
Y sienta yo en mi frente bajo la tumba fría,
De tu ternura el soplo, de tu hálito el calor.

Deja a la luna verme con luz tranquila y suave,
Deja que el alba envíe su resplandor fugaz,
Deja gemir al viento con su murmullo grave,
Y si desciende y posa sobre mi cruz un ave,
Deja que el ave entone su cántico de paz.

Deja que el sol, ardiendo, las lluvias evapore
Y al cielo tornen puras, con mi clamor en pos;
Deja que un ser amigo mi fin temprano llore
Y en las serenas tardes cuando por mí alguien ore,
¡Ora también, oh Patria, por mi descanso a Dios!

Ora por todos cuantos murieron sin ventura,
Por cuantos padecieron tormentos sin igual,
Por nuestras pobres madres que gimen su amargura;
Por huérfanos y viudas, por presos en tortura
Y ora por ti que veas tu redención final.

Y cuando en noche oscura se envuelva el cementerio
Y solos sólo muertos queden velando allí,
No turbes su reposo, no turbes el misterio,
Tal vez acordes oigas de cítara o salterio,
Soy yo, querida Patria, yo que te canto a ti.

Y cuando ya mi tumba de todos olvidada
No tenga cruz ni piedra que marquen su lugar,
Deja que la are el hombre, la esparza con la azada,
Y mis cenizas, antes que vuelvan a la nada,
El polvo de tu alfombra que vayan a formar.

Entonces nada importa me pongas en olvido.
Tu atmósfera, tu espacio, tus valles cruzaré.
Vibrante y limpia nota seré para tu oído,
Aroma, luz, colores, rumor, canto, gemido,
Constante repitiendo la esencia de mi fe.

Mi patria idolatrada, dolor de mis dolores,
Querida Filipinas, oye el postrer adiós.
Ahí te dejo todo, mis padres, mis amores.
Voy donde no hay esclavos, verdugos ni opresores,
Donde la fe no mata, donde el que reina es Dios.

Adiós, padres y hermanos, trozos del alma mía,
Amigos de la infancia en el perdido hogar,
Dad gracias que descanso del fatigoso día;
Adiós, dulce extranjera, mi amiga, mi alegría,
Adiós, queridos seres, morir es descansar.

               * * *

José Rizal, 1896

(escrito la noche antes de ser fusilado)

 

También canario de pura madera de vieja tea canaria, y como tú y Martí, fue la de uno de los más grandes generales junto con Julio César, Napoleón, etc., nuestro "isleño" Francisco De Miranda, quien diseñó la actual bandera venezolana, fue primer presidente de Venezuela, muy famoso y laureado general en Rusia, Inglaterra y EEUU (héroe de la batalla de Pensacola, en Florida, donde se consiguió la independencia de EEUU de Inglaterra). También en Francia, ya que es el único latino que figura su nombre en el Arco de Triunfo, también figura su cuadro en la Galería de Hombres Ilustres del palacio de Versalles, por ser brillante estratega y héroe de la Revolución Francesa en la gloriosa Batalla de Valmi, en la que como responsable y con solo un ejército de solo  8 000 hombres venció e hizo huir al formidable ejército prusiano compuesto por unos 80.000 soldados bien armados. Mientras nuestra mala "madrastra" lo tracionó en su palabra y le dejó morir a tan enorme personalidad internacional, como un perro el penal de La Carrara, en Cádiz.  

 

También sería justo que imitaras el gran ejemplo de otro ilustrado que se entregó totalmente, al contrario que tú, por su nación en las antípodas, en la otra colonia española de Filipinas, con otro ilustrado y como tú, maestro y poeta: José Rizal. Tuve la gran suerte de conocer su gigantesca obra y biografía en su propia patria, Filipinas y, concretamente, en Manila, conocí donde fue sus prisión y el enorme parque Rizal, además de la zona donde criminalmente le fusiló el mismo sistema colonial que sufrimos actualmente los aún narcotizados indígenas "canarinhos". ¿Sabes que los que instigaron al Gobierno para detenerle por "asociación ilícita" fueron los también colonizadores frailes dominicos y los franciscanos? Al igual que rechonchos curatas con su sombreros calados disfrazados de buitres o negros cuervos, acompañaban impasibles aquel gran despliegue de mandos y gran ejército perfectamente alineados para fusilar al infeliz y pacífico gran valor intelectual internacional, José Rizal. Allí esperando su asesinato, de espaldas, tan tranquilito como un corderillo cuando sabe que el trasquilado le van a cortar el cuello. Allí esperaba el inocente, de espaldas, firme, calado con su sombrero negro, chaqueta negra y pantalón de igual color.

 

-

 

Te diré que fueron tan graves y tan brutales los masivos fusilamientos que cometieron en aquellos días que los propios soldados caían desfallecidos y con desmayos. Como para que el periódico colonial y de remilitarización social, La Provincia, cada año nos regodee, con la gesta de los "últimos babosos majoreros", que eran tan primitivos y abusadores contra los infelices colonizados filipinos, que estuvieron defendiendo un puesto (en un país tan brutalmente colonizado) durante un año después de terminar la guerra. Tal y como solían los mayordonos majoreros hacer con los miserables paisanos peones de sus caciques: ¿Le pego más amo?  ¡Hasta este libelo y  "maja martillo colonizador", se atreve a pedir condecoraciones para aquellos torpones!

 

La carta que escribió de madrugada a su hermano decía así: "Querido hermano, cuando recibas esta carta ya habré muerto, mañana a las 7 seré ejecutado, aunque no soy culpable de rebelión". Mientras que como epitafio en su monumento figura: "Quiero mostrar a quienes privan a la gente del patriotismo que sí sabemos como sacrificarnos a nosotros mismos por nuestros deberes y principios. La Muerte no importa cuando se muere por lo que se ama: La Patria y los seres queridos".

 

-

 

Bien sabes que tus románticas y bucólicas poesías son muy buenas, pero faltas del sentimiento y pasión que, conozco y tu también lo sabes, que ese gusanillo, o viejo antepasado guanche que llevas dentro,  te grita al oído y te empuja a entregar tu creatividad futura para imitar a  tu tocayo y colega, José Martí o a Paco Tarajano, el "poeta de Canarias", quien se siente muy feliz de saberse realizado como brillante poeta canario-latinoamericano y aún mucho más, "no como vulgar madera para hacer carbón, sino como viga con que sostener nuestra nación".  

 

LA BANDERA CANARIA

 Para José Miguel Ramos Noda y Tina Mesa

 

La bandera de mi patria

tiene un recio pedestal

en toda alma canaria

sin la mancha colonial.

Es la bandera que marca

las señas de identidad:

el amarillo, Canarias;

el azul, la libertad;

el verde, bella esperanza;

el blanco, fecunda paz

y siete estrellas que llaman

a fértil fraternidad.

Blanca, azul y amarilla

es mi bandera

con siete estrellas verdes

que reverberan.

Esa bandera

que me bese la cara

cuando me muera.

¡Mira que suerte:

sentirme buen canario

hasta la muerte!

INDEPENDENCIA

 

Un Nublo pegado a Icod

un Teide junto a Tejeda,

un Timanfaya en La Palma

un Salmor en La Gomera

y una bandera canaria

con siete verdes estrellas

iluminando a la patria

y a Cuba y Venezuela...

¡Recompensa digna y justa

a tan larga y ardua espera!

Mis hermanos de Awañak

¡Canarias libre!

Canarias, tu gloria,

¡La independencia!

 

Francisco Tarajano Pérez.

 

 

¡Ya sabes que te espera el honor de bregar con tus poesías, y bastante más, para liberar a esta tu patria canaria!

 

¡Faita, Faita!

 

Paco Díaz

 

En Guiniwada, 15 de Septiembre 2013  

 

[1] Vietnam

[2]Poniendo los pilares de la Nación canaria

[3]Hasta los más tibios se convierten en independentistas

 

 

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