Independentismo no es sinónimo de
nacionalismo
Félix Adargoma
Al socaire del boom independentista que llevó a cabo
el MPAIAC, liderado por el fallecido Antonio Cubillo, a finales de los años 60
y 70 del siglo pasado, y la radio “La Voz de Canarias Libre”, el oportunismo
político de ciertas organizaciones, y personajes, se travistieron de
“nacionalistas Canarios”, algunos de orígenes de la izquierda y otros
franquistas y de derecha de toda la vida, para evitar que lo
identificasen con el independentismo canario, pero rentabilizando dicha
propaganda independentista, transformándola en sus campañas electorales en
“canarismos”, victimismos y populismos.
En una sociedad (la canaria) con la mayoría de sus
habitantes de las clases populares y trabajadoras despolitizados y desclasados,
casi con nula formación política, los partidos no vinculados a los partidos de
ámbito estatal, o que algunos de sus miembros estuvieron en su momento en
partidos estatales con sucursales en Canarias, aprovecharon el auge de
expectativa que despertó en su momento el independentismo canario para
travestirse en organizaciones “nacionalistas” canarias.
Hasta organizaciones de ámbito vecinal, vinculados y
con disciplina cristiana-católica, vieron una bicoca y se
"trasformaron", con gran oportunismo, también, en
“nacionalistas”, no independentistas, pero ejerciendo políticas conjuntamente
con partidos de ámbito estatal, en la gobernanza conjunta en Ayuntamientos, Cabildos,
Parlamento y Gobierno de Canarias, despreciando políticamente a las
organizaciones independentistas.
El “nacionalismo” canario siempre ha sido oportunista,
y por ese atraso cultural de formación política de amplios sectores y capas
sociales del pueblo canario, ha estado confundiendo al pueblo canario con su
“nacionalismo” folclórico y “canarista”, de ferias de ganado, papas arrugadas y
de timples y guitarras, con el auténtico y verdadero proyecto independentista,
robándole el espacio político a éste, todo gracias a las ayudas
económicas de grandes y medianas empresas agraciadas por dicho proyecto
“nacionalista” paniaguado, falso y engañabobos, aprovechándose de una sociedad,
mayoritariamente alienada y aburguesada ideológicamente, todavía con la cultura
de "una, grande y libre" de la dictadura franquista y del nacional
catolicismo, que ha pasado de una generación a otra, aunque la actual
generación, en su gran mayoría no tiene memoria histórica de la verdadera
historia de los pueblos del Estado español de antes y después de la guerra
civil, y menos de la autentica historia de Canarias, su conquista y posterior
colonización, y del viejo y del moderno caciquismo insularista.
Pero ese “nacionalismo” canario descafeinado se está
dando cuenta que su traje de mascarita se le está cayendo a pedazos, y está
comenzando a ponerse nervioso, intentando reflotar a primera línea a
cantamañanas y piquitos de oro que, no hace mucho, estaban en primera fila de
sus púlpitos engatusadores para amplios sectores del pueblo canario.
En el campo del independentismo se ha venido dando un
fenómeno en ciertas organizaciones que se reclaman de izquierdas por eso de
"te quiero y no te quiero", con respecto a la descolonización e
independencia de Canarias.
En la transición política, un partido político,
concretamente el Partido Comunista Canario (provisional) PCC (p), se dotó de un
órgano de expresión impreso, cuya cabecera se titulaba "Canarias Libre y
Socialista". Dicho partido no reivindicó nunca el proyecto independentista
para Canarias, sino solamente el "Derecho a la Autodeterminación".
Pues bien, hace algunos años atrás, aparecieron
algunas organizaciones políticas que reivindican, no la descolonización e
independencia de Canarias como consigna principal, sino la vieja consigna de
una "Canarias Libre y Socialista". No aceptan guardar en los cajones
eso de "socialista", creyendo que con esa palabra, fuera de contexto
y sin que las masas populares y trabajadoras de Canarias hayan luchado
masivamente por un programa social avanzado y por una revolución democrática
que lo haga posible. El izquierdismo les puede más a esas organizaciones
“independentistas” que dotarse de una táctica política para una estrategia
determinada en el momento presente.
Habrá que recordarles, aunque no me gusta poner
ejemplos de procesos históricos por la independencia de sus patrias. La
organización que echó a los japoneses de Vietnam y luego a los
franceses se denominó Viet Minh, Liga para la Independencia de
Vietnam. Al finalizar la II Guerra Mundial, la Liga para la
Independencia de Vietnam se disolvió, y sus miembros fundaron en 1960 El
Frente Nacional de Liberación de Vietnam (FLN), que se enfrentó al gobierno
títere norteamericano de Vietnam del Sur y al ejército invasor de los EE.UU.
Como se podrá comprobar, en ningún lugar de dichas
denominaciones aparece la palabra "Vietnam Libre y Socialista", en
todo caso dichas denominaciones de las organizaciones vietnamitas tendrían el
mismo significado que "Vietnam Libre e Independiente"
Otro ejemplo: la revolución cubana, liderada por Fidel
Castro y otros revolucionarios. La organización que lideró la independencia de
Cuba del neocolonialismo fue el Movimiento 26 de Julio, y en dicha
denominación no aparece la palabra "Cuba Libre y Socialista”.
Las organizaciones que comenzaron la liberación
nacional, la independencia de sus pueblos, no tenían en sus programas el
socialismo como régimen político y social para sus pueblos. Lo de socialismo
vino después de la liberación nacional, después de la independencia, pues la
correlación de fuerzas acumuladas en el proceso de la lucha, y las presiones
del capitalismo internacional y el imperialismo, demandaron para dichos país un
proyecto de construcción socialista adecuado a sus circunstancias. Creo y
entiendo que antes de la implantación de intentar construir cualquier
socialismo, antes habría que llevar a cabo una revolución verdaderamente
democrática en el seno del pueblo, con un programa avanzado social y económico.
El querer poner el carro delante de los bueyes por
ciertas organizaciones "revolucionarias" izquierdistas canarias, no
hace crecer las plantas más rápidas, diciéndole al mundo que quieren la
revolución socialista para Canarias aquí y ahora mismito. Pues en última
instancia será la mayoría del pueblo canario, defendiendo un programa social
avanzado, quien se decantará en el mismo proceso de la lucha por programa
vinculado a la descolonización y la independencia de Canarias, por algún
tipo de régimen socializante y socialista que encaje con las circunstancias
económicas, políticas y sociales de la sociedad que luche por conseguir el
contenido de los programas sociales, económicos y políticos que las vanguardias
políticas y sociales le ofrezcan, o que el propio pueblo, concienciado
y organizado políticamente y socialmente, luche, exija y consiga sus
justas reivindicaciones nacionales, sociales, culturales y económicas, como
país y pueblo independiente y soberano.
Las Palmas de Gran Canaria, a 5 de mayo de 2013
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