Demasiada gente callada con el tema del gas

Demasiada gente callada con el tema del gas, a pesar de toda la información grave y negativa que nos llega de fuera, de realidades, de verdades como puños. Y ahí sigue el puerto de Granadilla, concebido exclusivamente para introducir el gas porque para otro tipo de mercancía sería ruinoso, que con el fuerte viento que le azota la mayor parte de los días del año, elevará la peligrosidad en la zona a la enésima potencia. Y con el Aeropuerto del Sur, el más importante de Tenerife y el segundo de Canarias, a unos escasos seis kilómetros de la pretendida regasificadora. La probabilidad de que se origine un accidente en ese entorno, con la espoleta del fuerte viento, es bastante elevada. Los que hemos navegado y participado en maniobras de buques, conocemos como se comporta el viento y el desamparo que sufre el buque en momentos puntuales por ello, con incontrolables situaciones aún con ayudas de remolcadores, que por cierto tienen que abandonar si la situación de vuelve insostenible para no incrementar los daños en un más que probable accidente si están cargados con gas.

Pero está claro que los ciudadanos pasamos al último lugar cuando se trata de seguridad, el euro y el negocio fácil de algunos se anteponen, como también sucedería con las prospecciones petrolíferas con el apoyo que sabemos del Partido Popular. Pero sería injusto, amigos, si con esta afirmación quisiera cebarme con este partido de derechas que muchos rechazamos y que tanto nos está jodiendo la vida. Ya sabemos como se las gasta CC con el gas, aunque en el tema de las prospecciones esté en contra, y el PSOE en su papel de siempre y apoyando a quien le da el paraguas del poder, a CC en Canarias. Y aunque algunos socialistas se manifiestan contra estas barbaries, al final se imponen los otros, los que también nos están jodiendo la vida y abriendo expectativas de riesgos, que a veces balbucean algo sobre las renovables como si de una maniobra orquestada se tratara. Y no nos engañemos, compañeros, por esos socialistas que dicen estar más cerca de nuestras concepciones, porque la consejera anterior Margarita Ramos apoyaba el gas a tope, justificando lo injustificable, pero su sustituta, Paquita Luengo, más de lo mismo, y ambas son socialistas.

Está claro que saben a que están jugando, a Paquita Luengo el compañero Pedro Anatael la ha puesto al día sobre el gas a solicitud de ella, pero hay que plegarse cuando toca, aunque metan a Tenerife y a los tinerfeños en un berenjenal de muy difícil salida de riesgos tan negativos, por los núcleos poblacionales cercanos y porque el turismo nos podría abandonar por el gas, aún en mayor medida que a Lanzarote y a Fuerteventura por unas prospecciones petrolíferas a mucha distancia de sus costas y sin riesgos tan directos de explosiones, que en Tenerife pueden traer consigo la desolación más absoluta. Y no quiero tampoco convertir este comentario mío en un ataque sin cuartel al PSOE, aunque tan engañado me sienta por ellos, pero, ¿que podemos esperar de un partido que de Socialista y de Obrero tiene tan poco? Ahora podrán decir misa, pero, ¿realmente que han hecho al respecto durante todos estos años con el poder en sus manos? Y no hace falta acudir a Madrid para corroborar lo que digo, el ejemplo de Paquita Luengo está ahí, como las declaraciones de Casimiro Curbelo sobre las prospecciones o las actuaciones de Macario Benítez en los casos Varadero y Montaña Carbonero. Todo está clarito y aunque sólo nombro a tres que se autoproclaman socialistas y distan mucho de serlos, por aquí hay demasiados que ya tendrían que haber sido excluidos de la espera política y no sólo nosotros sabemos quienes son, ellos también lo saben, pero...