Elecciones
2011 y la independencia
Eduardo
Vera
Resucito al tercer día de mi impresión y susto
electoral, elecciones 2011 y la independencia.
La mesa de la Unidad por la Descolonización e
Independencia de Canarias, fue más una ilusión que un resultado.
Después de haber participado en las manifestaciones
del 23 de octubre del 2009 en Aguere (La Laguna), el
6 de marzo del 2010 en Guiniguada (Las Palmas) y el
14 de mayo del 2011 en Santa Cruz de La Palma; tenía una noción de cuántas
personas pueden aclamar en Canarias una Declaración de
Independencia. Ninguna de estas manifestaciones se encuentra precisamente
en las más exitosas de la historia de Canarias. Incluso, en la última la
participación no llegó a la docena de personas que portábamos la pancarta.
No se puede vivir de ilusionismos ni de anacoretadas.
Faltaba la manifestación "silenciosa", o
dicho de otra manera el voto secreto. Lamentablemente, la "Unidad" de
la mesa quedó solo en eso, una palabra en el tapete. Muchas fuerzas y líderes
se mantuvieron al margen en las pasadas elecciones e incluso, llamaron a la
abstención. Otros se presentaron correteando en "la nada" del
espectro político de la candidatura al Parlamento de Canarias. Para no ofender,
no daré nombres ni siglas.
Todavía recuerdo una manifestación a la que no pude
acudir, era la de Santa Cruz de Tenerife, para la misma pedí en vano que se
unieran colores políticos, tocaba a Santa Cruz, pero se prefirió las pataletas
cromáticas de rojos arriba y azules abajo, como en los tiempos de la demencial
y desacreditada II República de España, una política de bandazos.
Aunque en el supuesto de que no tuviéramos la
antidemocrática ley electoral que tanto humilla a los isleños, el voto nulo o
el voto en blanco, superan a los votos de todos los colectivos independentistas
presentados en estas elecciones.
Esta es la realidad. Incluso si fuera "un
ciudadano = un voto", los obscenos que han logrado tener participación en
el edificio monstruoso del Parlamento de Canarias, podrían seguir repartiéndose
la tarta del poder.
Si hubiera una Democracia Real Ya, aplicándola a los
votos y uniendo todas las fuerzas políticas independentistas, se podría haber
conseguido 1 escaño dentro del Parlamento de Canarias. Pero el
listón ladronzuelo y mentiroso, el lazarillo del 6% de tope electoral
es una ruina para las aspiraciones independentistas. Sumando todos los votos
obtenidos, el independentismo quedaría lejos del poder, sería la 7ª fuerza
política más votada de Canarias.
Estimo que si el independentismo estuviera unido desde
un principio de campaña y hubiera una unanimidad pidiendo el voto "y no el
abstencionismo de los perdedores", el independentismo en Canarias sería la
5ª fuerza política más votada en Canarias.
Lamentablemente, Coalición Canaria no es
independentista y encima con unos inmerecidos 21 escaños, resultado de su
querida treta - ley electoral.
Finalmente, recordemos al
"zorrocloco residente en Canarias con derecho a voto": no fueron
a votar más de medio millón de personas.
25 de mayo del 2011, Islas Canarias.