El
Bucio
Ramón Moreno Castilla
Este título no se refiere a la caracola marina que todos
conocemos con el nombre de bucio, un instrumento que los aborígenes canarios
usaban para avisarse de algún acontecimiento, y que actualmente se sigue
utilizando en actos festivos rememorando costumbres ancestrales de nuestros
antepasados. No. Me refiero al magnífico programa "El Bucio", de
reciente producción, emitido la noche de los jueves por EL DÍA TV., y
conducido por la joven presentadora de esta Casa, la popular y excelente
periodista Carmen Izquierdo. Un programa televisivo que constituye todo un
aldabonazo a las conciencias del pueblo canario, tan desinformado y manipulado,
por otra parte.
Porque ya conocemos el gran impacto mediático de la televisión.
No en vano, en un mundo globalizado y donde asistimos a la imparable
mundialización de los medios, la televisión tiene un gran influjo ya que al
ocupar un lugar preponderante y dominante en la jerarquía de los medios está
expandiendo su modelo al resto. Los Telediarios, por ejemplo, gracias a su
ideología del directo y el tiempo real, han ido imponiendo, poco a poco, un
concepto distinto de la información. Informar es ahora "enseñar la
historia en marcha". Y los programas de debate, que suelen ser "políticamente
correctos", no hay ningún medio que profundice en la verdadera raíz de
los problemas que trata ni aporte soluciones a los mismos.
Otro concepto que también ha cambiado sustancialmente es el de
la "actualidad". ¿Qué es hoy la actualidad?, ¿qué acontecimientos
hay que destacar en el maremágnum de hechos que suceden en el mundo?, ¿en
función de qué criterios hay que hacer la elección? También aquí es
determinante la influencia de la televisión, pues es ella, con el impacto de
sus imágenes, la que impone la elección y obliga sin remisión a los otros
medios a seguirla. La televisión construye la realidad, provoca el shok
emocional y condena prácticamente al silencio y a la indiferencia a los hechos
que carecen de imágenes; y en el nuevo orden de los medios, las palabras o los
textos no valen lo que éstas. ¿Tiene acaso imágenes la corrupción
generalizada que existe en Canarias, producto, sin duda, del vil e infame
estatus colonial que padecemos hace seis siglos?
Hay
otro elemento fundamental que se ha modificado: la veracidad de la información.
Hoy, un hecho es verdadero no porque corresponda a criterios objetivos,
rigurosos y verificados en las fuentes, sino simplemente porque otros medios
repiten las mismas informaciones y las "confirman". Los medios no
saben distinguir, estructuralmente, lo verdadero de lo falso. Pero lo peor es
que, en esta vorágine mediática, información y comunicación tienden a
confundirse (ver, [1] cuestainformarse
1 y [2]
cuestainformarse 2 (junio de 2005).
Todo esto y más lo sabe perfectamente Belkys Barrera, la eficiente y gran
profesional subdirectora de El Día TV., que con su inconmensurable labor y un
reducido grupo de cualificados y polivalentes profesionales ha logrado poner en
las ondas una programación de calidad que no tiene nada que envidiar a las
otras televisiones, tanto públicas como privadas. Y sobre todo, producir y
emitir "El Bucio", que aborda con todo rigor y veracidad no solo la
propia actualidad, sino también temas polémicos y controvertidos que otros
medios audiovisuales ni siquiera se plantean. ¿Por qué?
Por tanto, así como EL DÍA, el periódico más leído de las
Islas y del que soy columnista desde hace casi siete años, es el buque insignia
del primer y único grupo de comunicación de Canarias, el programa "El
Bucio" está llamado a convertirse en todo un referente de los medios
audiovisuales de nuestro Archipiélago.
Precisamente, el pasado jueves día 27 tuve la oportunidad de
asistir como invitado a dicho programa, junto a los contertulios Mateo López y
Antonio Aldana, magistralmente conducido por Carmen Izquierdo. Fue un entrañable
reencuentro con el Puerto de la Cruz, después de varios años sin visitarlo; y
tuve la suerte de que El Día TV me alojara en el emblemático hotel Garoé, de
la Cadena Riu, que posee unas magníficas instalaciones, las cuales disfruté,
aunque por poco tiempo. Desde aquí quiero dar las gracias a su amable director
y a todo el personal del establecimiento. Por cierto que desde la habitación
333 (exquisitamente preparada) casi podía tocar nuestro querido Teide, que se
elevaba majestuoso enfrente, mostrando sus últimas nieves.
ElDía.tv/en directo, jueves 22h00: El Bucio
Artículos
de Ramón Moreno Castilla publicados en El Guanche y en El Canario