Dos convocatorias de interés pedagógico
OTAN NO, bases fuera de Canarias
OTAN NO, bases fuera de Canarias. El próximo jueves 16 de marzo de 2017 el comité OTAN de Tenerife ha convocado una concentración a la 19:00 horas ante la delegación del gobierno metropolitano en la calle Méndez Núñez, muy cerca de la plaza Secundino Delgado (ex Weyler) en Añashw n Chinet, exigiendo la salida de la OTAN de Canarias en el 31 aniversario de nuestra incontestable victoria en el Referéndum que sobre dicha organización militar se celebró el 12 de marzo de 1986.
El síndrome del rebelde. El Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario, una organización pacífica y pacifista, hace un llamamiento a todos los demócratas en general, así como a todos los anticolonialistas en particular, a asistir masivamente a la citada concentración en defensa de nuestros justos, legítimos y democráticos derechos, difundiendo la convocatoria de la misma por todos los medios disponibles entre familiares, amigos, compañeros de trabajo y todos los agentes sociales, repudiando la antidemocrática organización que sigue negándose, torrontudamente, a respetar nuestra decisión de no integrarnos en dicha estructura militar.
La OTAN, antipedagógicamente, hace proselitismo en los centros escolares. El estamento militar de la OTAN, incluida la guardia civil, desplaza militares a los centros escolares ofreciendo “el oro y el moro” a nuestros incautos colegiales, ante la desesperación de sus familias a causa de la miseria que el colonialismo ha traído a nuestra patria, “carne de cañón” en las invasiones de Los Balcanes, Afganistán, Líbano e Irak, con la connivencia y complicidad del pseudogobierno de Canarias y su falsa Consejería de Educación, que no sólo permite estas prácticas sino que las potencia.
Fuera la OTAN de Canarias, que no es lo mismo que Canarias fuera de la OTAN. Canarias nunca ha formado parte de la OTAN, muy al contrario, la única vez que el régimen monárquico y colonial español, ante la presión popular, nos consultó sobre la misma, el inteligentísimo pueblo canario no lo dudó ni un solo segundo y, por una absolutísima mayoría, repudió integrarse en la misma siendo ley estas decisión. Todos los representantes del gobierno metropolitano, en nombre de la jefatura del Estado o de la presidencia del Gobierno, se mofan tanto del pueblo canario como de los hermanos pueblo del Estado español, repitiendo hasta dar náuseas que la ley hay que cumplirla, pero se refieren al cumplimiento cuando esa ley es favorable a sus espurios intereses. Sin embargo, les guste o no, nuestra democrática decisión en repulsa de la OTAN también es ley, amparándonos la jurisdicción internacional y, sobre todo, nuestro pacifista sentimiento, que claramente quedó patente manifestando sencillamente que no los queremos. La razón nos asiste.
El colonialismo intenta alienar a nuestro pueblo. Para el mismo 16 de marzo, y como cada jueves desde hace ya la friolera de nueve años, el colonialismo, mediante los esbirros a su servicio, convoca en la metrópoli el que han venido en denominar “fiestón canario”, que de fiestón no tiene nada y menos de canario, pero constituye una artimaña más con las que el colonialismo pretende mantener narcotizada a nuestra juventud para intentar impedir su rebeldía contra la ocupación de su patria. Lo mismo ocurre dentro de nuestra patria, todo el año pero, sobre todo, a partir de ahora que se aproxima el verano. Por eso, más que nunca, hay que ser especialmente cautelosos con estas malas mañas del colonialismo que, aprovechándose de la ingenuidad de mucha gente, intenta atraparlos en sus pervertidas redes, convocándolos a la fanfarria desde el jueves, jóvenes desplazados de sus hogares fundamentalmente para estudiar, con lo cual ya el viernes están incapacitados para cumplir con sus sueños y anhelos.
La conscienciación constituye la mejor arma contra esta aberración. Nuestra conscienciación nos conducirá a nuestra emancipación como personas y también a la liberación de nuestra patria, al constituir la mejor fortaleza para saber rechazar estas torticeras convocatorias que, en nombre de nuestros más nobles sentimientos, pretenden desviarnos de nuestra verdadera senda, la descolonización e independencia, única consigna libertaria en una colonia.
La asistencia masiva a la concentración el jueves 16 de marzo exigiendo a la OTAN su salida de nuestra patria, pisando las calles nuevamente con esta justa demanda popular, es la mejor respuesta a la obstinada ocupación de nuestra patria por los ejércitos de la OTAN, entre los que se encuentra el ejército español de ocupación.