¡Que por
no advertirlo no quede!
Por
René Acosta
*
Con
motivo de las intensas lluvias pasadas se produjo un desprendimiento de
pedruscos y en particular de una piedra de gran tamaño que hundió el techo de
una especie de refugio adosado a una vivienda situada en la avenida de Los
Tarajales del Puerto de Tazacorte. El desprendimiento en cuestión se produjo en
el risco próximo al puente de la citada avenida. Según comentó la jefa de
Protección Civil de Tazacorte, que se encontraba en la avenida pendiente del
alcantarillado, muchas piedras más cayeron en este paseo en la carretera LP2,
carretera que, por cierto, es competencia del Cabildo insular. Dada la hora, las
4 de la madrugada, en que se produjo el desprendimiento, afortunadamente no había
nadie en el lugar, porque si no estaríamos lamentando una desgracia personal.
Ya
en facebook comenté una vez que este risco habría que retocarlo para quitar
las piedras sueltas en lo más alto del risco, pero, como siempre, hay alguien
que está pendiente de lo que propones con la mejor voluntad para después
criticar por criticar. Lo que propuse y expliqué fue que lo ideal sería
repasar este risco lo suficiente para dejarlo en lo más firme y después
ponerle una malla de metal para que las piedras no caigan al paseo.
-
Cuando
lo comenté en el programa de radio ‘El Soplete’ lo criticaron
inconsistentemente, en particular el fotógrafo del Puerto, que dijo que eso no
era así, que yo no sabía nada de eso, y que era un catastrofista. Por lo que
parece, desconocen que fui maquinista durante muchos años y algo al respecto
debo saber. Pero bueno, el tiempo da y quita razones, y desgraciadamente ocurrió
el desprendimiento y seguirá ocurriendo si no se toman medidas, y lo mismo
pasará donde está el castillo, al final de la playa del Puerto junto al muelle
viejo. En el caso concreto de este paseo o avenida de Los Tarajales donde
cayeron las piedras desde la parte alta del risco, hay que tener en cuenta que
una piedra pequeña caída desde lo alto es como una bala y puede ocasionar
muchos problemas. Como se siga haciendo oídos sordos, puede ocasionarse incluso
la muerte de algún viandante, ya que se trata de una avenida que, sobre todo
por las tardes, mucha gente pasea por ella. Y no es lo mismo decir ‘por aquí
estuve paseando’ a que digan
‘por aquí pasó y una piedra lo dejo seco’.
Es
una pena que en una playa tan bonita como la del Puerto de Tazacorte, el Cabildo
no se decida a repasar este risco y ponerle una malla metálica, como las que
están, sin ir mar lejos, en la subida a Puntallana por la zona de Barranco
Seco.
Ya
hubo una advertencia y gracias a Dios no pasó males mayores. Que cada cual
asuma su responsabilidad. ¡Que por advertirlo no quede!
* Reportero del periódico digital El Canario
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