CONCENTRACIÓN
Día 26 de Agosto a las 11:00 h.
Frente a la sede principal de CajaCanarias
Plaza del Patriotismo 1, Santa Cruz de
Tenerife
¿Banca Cívica?
“La desaparición
de las cajas de ahorro y su sustitución por bancos privados es una acción incívica”
La salida a bolsa de Bankia
y Banca Cívica es la culminación de un proceso para permitir al parasitario
capital financiero echar mano a miles de nóminas domiciliadas y apoderarse a
precio irrisorio del patrimonio de las Cajas, fruto del esfuerzo colectivo de
las personas trabajadoras.
Somos MÁS–Frente Amplio denuncia
los procesos de privatización, tanto de Bankia, como
de Banca Cívica, enmarcados dentro de la reforma del sistema financiero que
promueve el gobierno zapatero, mediante la desaparición de las cajas de ahorro,
fusionándolas en bancos que se han puesto a la venta.
Las Cajas de Ahorro en
su origen estaban dirigidas a personas trabajadoras o pequeñas empresas,
orientadas, en un principio, al ahorro pagando una tasa de interés por los
depósitos, y sólo efectuaban préstamos sobre el monto del depósito, no de
carácter financiero. Bajo dicho mecanismo los ahorros de las clases
populares estaban más protegidos del capital financiero y su juego
especulativo, pero ya en 1977 se eliminaron restricciones legales que
permitirían a las Cajas de Ahorro (Reforma de Fuentes Quintana) actuar como los
bancos.
La falta de control popular y democrático sobre las cajas ha
permitido que se adulterara su carácter social y sus recursos se colocaran al
servicio de compañías privadas, como ejemplo tenemos la comercialización de los
productos de CASER a través de Caja Canarias. La reforma de Zapatero va más
allá, su objetivo ha sido dejar directamente en manos privadas todos esos
recursos que se han acumulado gracias al esfuerzo de trabajadoras y
trabajadores, asalariados y autónomos que durante mucho tiempo han colocado sus
ahorros en estas cajas. ¿Cómo? Obligando a las cajas a integrarse en una
entidad bancaria que posteriormente ha salido a bolsa y sus acciones han sido o
están siendo compradas por otras compañías cada vez a precios más irrisorios.
Acciones de Bankia han sido adquiridas por el Banco Financiero y de
Ahorros, MAPFRE, Banco Santander, Caixabank, Mutua
Madrileña, Banco Sabadell, Banco Popular y El Corte Inglés, mientras acciones
de Banca Cívica han sido compradas por Credit Suisse y Morgan Stanley, pero el capital financiero sigue
frotándose las manos y esperando para terminar de hacerse con Bankia y Banca Cívica a un precio de risa, pues a 27 de
julio de 2011 las acciones de la primera habían caído un 2,26 % y las de la
segunda un 10,7 % desde su salida a bolsa, incluyendo Bankia
más de 4.500 oficinas, sin contar las ubicadas en el extranjero y unas 1.551
Banca Cívica.
Ahora Bankia y Banca Cívica tienen
que garantizar beneficios a los accionistas exprimiendo a las trabajadoras y
trabajadores asalariados y autónomos que colocan en ellas sus ahorros. Ya Bankia adoptó una política de cobrar 2€ mensuales a las
cuentas que tengan menos de 2000 €, el cobro de comisiones se multiplica, y no
ofrecen mejores condiciones para las hipotecas que los bancos convencionales,
así las clases populares quedan sometidas cualquiera que sea su elección.
Somos MÁS las víctimas de estas políticas y
debemos plantar cara reclamando otra regulación de la actividad financiera que
le dé un fin social, productivo y sostenible, no especulativo, insostenible y
parasitario de las mayorías. Es imprescindible socializar la banca y ponerla
al servicio de las personas trabajadoras.