Solo nos queda ceder
al derecho de pernada
Fernando Gracia *
¡Puta miseria!
-perdón por el exabrupto, pero la opinión en un periódico está en horario de
adultos-. Querido lector, después de leer esta opinión le ruego que medite unos
segundos este razonamiento: ¿No estaremos en Canarias pasando y aceptando
nuestra vergonzosa sumisión? ¿Llevamos tanto tiempo esclavizado que nos
colocamos los grilletes en los tobillos como si fueran calcetines? ¿Es justo
que entreguemos a la metrópoli el 100% de nuestro trabajo y esfuerzo para recibir
en compensación miserias como si estuviéramos en las colas de Cáritas, que es donde realmente estamos? ¿Ha pensado,
ciudadano canario, cuánto le va a costar a su bolsillo pagar el supuesto
desfalco cometido por el matrimonio Urdangarín en la
casa de los Borbones, aún estando a
A lo
largo de muchos años de carrera profesional, he contado con dieciocho
directores de prensa diaria, pero los tres mejores, con diferencia, fueron
Emilio Romero, en "Pueblo", con su columna de opinión "El
gallo", desde la cual, y como un kamikace,
cruzaba espada hasta con los ministros franquistas. "Fernando, la última
gota de tinta hay que emplearla para escribir lo que defiendes" me dijo
una noche de copas. Pedro J Ramírez, muchas mañanas, tardes y noches, entrando
en su despacho -Pedro J. casi vivía en el periódico-, y viendo cómo nos
"adiestraba" a los redactores como perros de presa cuando había una
exclusiva de investigación por medio. Hoy pongo la mano, e incluso la cabeza,
en el fuego para asegurar que su "caso Bárcenas"
y las supuestas implicaciones con cargos del PP serán demostradas en los
tribunales, porque Pedro J. periodísticamente nunca se equivocó. Y José
Rodríguez Ramírez, editor y director de este periódico, que mantiene encendida
la antorcha olímpica que en su momento le entregó el maestro de periodistas D.
Leoncio Rodríguez en la carrera más larga de la historia: desde la esclavitud
poder llegar al estadio olímpico de la independencia y libertad de las siete
islas, levantando a todo el pueblo de las gradas para cantar juntos el himno de
Canarias.
Estos
tres directores, en sus luchas por la razón, han tenido que pasar por momentos
muy tensos, pero eran, son, periodistas de los pies a la cabeza y por tanto
defensores del pueblo contra la iniquidad de los que indebidamente sujetan un
bastón de oro arrebatado a un confiado o inocente pueblo. D. José Rodríguez
Ramírez, tiene en estas fechas, próximas a togas y paredes de oscuras maderas,
su lógica preocupación por demostrar su absoluta inocencia, ya que lleva su
vida entera defendiendo un valiente y bello estandarte, el de ¡la libertad¡ No
obstante, continúa con el mismo pensamiento de Artur
Mas, quien en una reciente entrevista ha dicho: "En la política hay que
sacar todo el pus y hacer limpieza, y después esterilizar y procurar aprender
lecciones del pasado para poder llegar a ser un país ejemplar".
Días
atrás, este periódico publicaba bajo el título de "Corrompidos por la
vagancia y la decadencia de España" un espléndido editorial de los que
ponen los pelos como escarpias. Entre otras muchas cosas decía: "No
descansaremos hasta conseguir la libertad de Canarias. Ese es un objetivo que
nos hemos propuesto ya que los nacionalistas de CC, a quienes les corresponde
esta tarea en primer lugar, siguen de brazos cruzados. En las circunstancias
actuales, cuando España se diluye azotada por el vendaval de la crisis
económica, la corrupción y los deseos de muchas naciones de la Península, hasta
ahora sojuzgadas por una política castellana de expansión y sometimiento
iniciada en la Edad Media, de recuperar el estatus que les corresponde; una
categoría que no es otra -no puede ser otra-que la de naciones soberanas con su
Estado".
¿Seremos
en el mundo ese extraño espécimen de esclavos en pleno siglo XXI? O nos
defendemos con uñas y dientes o tendremos que preparar a nuestras mujeres para
ceder al derecho de pernada, que es lo último que nos queda. ¡Libertad!
Publicado en el periódico El Día, 03-02-2013