Durante la campaña electoral europea hemos
asistido a una serie de noticias sobre el ascenso de los euroescépticos
y la extrema derecha referidas a otros países como si fuera un fenómeno
exclusivo de los demás. Ningún periodista ha reparado en que es la propia UE la
que apoya a los partidos fascistas que gobiernan en Ucrania, o que el ascenso
de la extrema derecha es, también, algo muy español. No hay sino que ver los
motivos que más han llamado la atención durante la campaña: la inferioridad
intelectual de las mujeres, la negativa del derecho a decidir y los discursos
policíacos para frenar la disidencia.
Sobre esto último destaca, a raíz del
asesinato de la presidenta del PP de León a manos presuntamente de compañeras
de partido, la movilización discursiva y policial contra otros que han opinado
al respecto del asesinato y la fallecida. Algunos ministros han emprendido una
campaña contra las redes para detener a quienes han vertido comentarios
insultantes. Se olvidan de que el luto no es obligatorio…, por ahora. Da igual,
dicen que van a detener a los radicales, pero si de eso se trata, les
recomiendo que detengan a toda la clientela de los bares y a los usuarios de
baños públicos. La palabra radical está empezando a no ser precisa para definir
las barbaridades que ahí se dicen.
Pero la pregunta es ¿por qué no han dado
caza o han emprendido una caza cuando han insultado y amenazado a personas que
no comparten la deriva derechista del PP? Cuantas amenazas ha tenido y tiene
que soportar Pilar Manjón por no tragar con los movimientos de extrema derecha
de algunas asociaciones de víctimas del terrorismo y la teoría de la
conspiración y el titadine. Nadie ha dicho nada sobre
investigar a esos energúmenos, probablemente porque estén en su mismo partido o
aledaños.
Igual que al president
Artur Mas, cuantas amenazas
ha recibido. En Canarias hay militantes de Sí se puede amenazados por
extremistas de derechas que tienen radios subvencionadas, y nunca he oído que
se vaya a perseguir o detener al dueño de la radio. Es significativo.
Artículos de Francisco A. Déniz Ramírez publicados en El Canario