Cuidadito con lo que se dice

 

Andrés Chavez *

 

[¿Una calle para Cubillo? Claro que sí. Cubillo nunca recibió reproche penal cuando llegó de su exilio. Si otros cometieron excesos, él no, según la justicia española. Luego de terrorista, nada. Patriota. Un patriota al que le sacaron las tripas en un zaguán de Argel dos sicarios enviados por la policía española, siguiendo instrucciones del Ministerio del Interior, cuyo titular era Rodolfo Martín Villa.]

1.- Uno se lleva una cierta alegría cuando los lectores escriben y dicen que no pueden vivir sin este puto folio. Lo bueno de esto es que uno, que es un liberal convencido -una amiga mía, Nieves Marrero, me dijo una vez que yo era un liberal controlado-, escribe aquí de lo que quiere. Porque le dejan escribir de todo. Por eso no me gusta que, en la COPE, José Carlos Alberto jr., a quien crié casi en mis pechos, bueno, sin casi, esté llamando a Cubillo, continuamente, terrorista. No, Cubillo era un patriota, que fue mandado a matar por el Estado español, nada menos. Más terrorista fue Weyler y tiene una plaza principal en Santa Cruz. A Weyler lo premiaron por montar una carnicería en Cuba. Y mira que mi bisabuelo luchó en Cuba como teniente coronel y acabó hasta las pelotas de Weyler y de todos sus sicarios, se negó a matar mambises y pidió el traslado a España, después de casarse con una bella cubana de Holguín, mi bisabuela. No se puede alterar la historia, amigo José Carlos. Por mucho que esa COPE a tope tenga la falta de caridad cristiana de hablar así de los patriotas muertos.

2.- ¿Una calle para Cubillo? Claro que sí. Cubillo nunca recibió reproche penal cuando llegó de su exilio. Si otros cometieron excesos, él no, según la justicia española. Luego de terrorista, nada. Patriota. Un patriota al que le sacaron las tripas en un zaguán de Argel dos sicarios enviados por la policía española, siguiendo instrucciones del Ministerio del Interior, cuyo titular era Rodolfo Martín Villa. No lo digo sólo yo. Lo dice una sentencia firme, por la que Cubillo fue indemnizado como una víctima del terrorismo. Antonio Cubillo fue resarcido con 25 cochinos millones de pesetas, que no repararon ni una pizca de su sufrimiento. Bien es verdad que el jodido con esos 25 millones no me invitó ni a un café. Ni a mí ni al resto de sus amigos de "El Perenquén". Cubillo era patriota, pero más agarrado que un pasamanos.

3.- ¿Y ahora quieren negarle una calle? Vamos, hombre, una calle cualquiera, no. Una calle principal de la ciudad. ¿No tiene el de Lugo una plaza en La Laguna y exterminó a nuestra estirpe? ¿No tuvieron calles los generales franquistas, algunos de los cuales fueron sobornados por el Reino Unido para que Franco no entrara en la II Guerra Mundial, como se acaba de descubrir? La historia es muy jodida, hermanos; y nunca sabe dónde va a colocar a sus protagonistas. No hay peor ciego que el que no quiere ver, José Carlos, así que apea el calificativo. Si quieres, claro, porque este es un país en el que cada cual dice lo que quiera, gracias a Dios. Y tienes razón, Nieves, amiga mía: yo soy un liberal controlado.

achaves@radioranilla.com

 

Fuente: Publicado en el periódico El Día, 12-06-2013