Canarias hoy

 

«» Jaime Afonso Díaz

 

   Una vez, constituida la “Mesa de la Unidad”, que reivindica la independencia, se presenta  en la Sala San Borondón, el día 18 de febrero de 2016. Su edad media es de sesenta años, no se ve  relevo generacional que lidere, el cambio, políticas sociales de progreso, a favor de los cientos de miles de parados, de la gente que está pasando hambre y de los sin techos. Los jóvenes son quienes tienen posibilidad de organizar una mayoría, en torno a ellos, profundizando las contradicciones de la superestructura jurídica, política y de economía colonial.

 

   La justa defensa contra la opresión del imperio español, fue llevada a cabo por el pueblo bajo las siglas del MPAIAC, sin que lograra la victoria, después en la democracia continua la lucha el Congreso Nacional de Canarias CNC, con un techo electoral que lo excluyó de tener representación política en las instituciones, perdiendo así el apoyo de la mayoría de los pueblos africanos, a tener en cuenta, por tanto Canarias está aislada, no es actor en el orden internacional, al contrario, los Reinos de España y Marruecos tienen reconocimiento y legalidad.

 

   Presenta y modera D. Álvaro Morera, representante del Congreso Nacional de Canarias CNC. Empieza con una disertación sobre la importancia del castellano hablado en Canarias y su influencia en Latino-América. Dice que las organizaciones reunidas más otras ausentes tratan de formar una Federación Independentista. Es de la opinión de que las Naciones Unidas mandarán a España a descolonizar Canarias, como hiciera a finales de la década de los sesenta del siglo pasado con Guinea Ecuatorial, por entonces provincia española, sin que se tuviera en cuenta la opinión y voluntad de los habitantes guineanos. En la actualidad, cuenta más la decisión mayoritaria de la población que la posición geográfica y  deseos de una minoría nacionalista.

 

   El Sr. D. Pablo Delucas, del Centro Amazigh, originario del protectorado español de Tánger (Marruecos), domina los idiomas hablados en esa nación vecina, al parecer emparentados con el tuareg y el antiguo guanche, según los topónimos y algunas frases muy cortas y simples dejadas por los cronistas que, junto a las pocas palabras, excepcionalmente todavía en uso,  trata de la recuperación del habla de la lengua guanche, imaginando y dando valor a lo que ha venido en llamar “guanche moderno”, con raíz camita-semita, ósea, afro-asiática, completamente distinta al castellano, muy complicada y difícil de aprender.

 

   Sus alumnos tienen una edad media que roza la de los pensionistas, si bien sabemos que loro viejo no aprende idiomas, pero se consuelan saludándose en guanche, no aprenden a pensar y razonar, creándose hábitos psíquicos que les limita la argumentación con el estereotipo enraizado en el imaginario popular. Es el entretenimiento de unos pocos viejos sugestionados.

 

   El Sr. Rukaden Areucas, también profesor, hace énfasis en dirigir un texto peticionario de descolonización a la IV Cumbre del ASA, siglas que hacen referencia a países africanos y sur-americanos, un brindis al sol, pues es evidente que es la Organización del Tratado del Atlántico Norte, la OTAN, quien tiene capacidad y hegemonía para revertir el Status colonial de Canarias,  pero impone el actual orden internacional apoyando la situación actual de dominación española.

 

   Por último interviene el Doctor D. Manuel Díaz, del novedoso Partido Nacionalista Institucional Canario, trata de reclutar con el discurso de la identidad como principio de la libertad que sustenta la voluntad, que depende de la libertad de elección. Diagnostica trastorno de nuestra conducta, hasta el punto de vivir emparanoiados y que solo se puede parar tal locura con el conocimiento, pues este nos posibilita la libertad de elección que junto al relato de nuestra historia nos puede sanar del mal del colonizado. Apuesta por la igualdad bajo una Federación Democrática. Meditemos, porque es la Confederación la que se organiza desde abajo.

 

   Vemos a la “Mesa de la Unidad” perdida en el tiempo y en el espacio. Hace mucho tiempo tenían que haberse ido y dejado paso a la juventud capaz de adecuar el discurso inmovilista del pasado, para ser opción ilusionante, con posibilidades de ganar nuevas instituciones que propicien la canariedad, como viene proponiéndose: una supra-institución para la Región núm. 34 del mapamundi de la que formamos parte, por eso el Status Makaronés, superestructura que reivindicamos; e infra-instituciones populares y participativas, Asambleas en Cogestión pro-derecho ciudadano, en pos del derecho político a decidir y acordar, que nos niega España. 

 

    Poco ayudan estos activistas de la independencia que quieren empezar la casa por el tejado, al margen y sin convencer a una mayoría con un sugestivo proyecto soberanista que reunifique los pedazos inconexos que el colonialismo explotador se ha repartido, dividido y aislado, lo que llama  ultraperiferia, creando una inercia mental que nos aleja de nuestra realidad Makaronesia, del pensamiento político y la sinergia revolucionaria. Denunciamos la dependencia psíquica al pensamiento único que hace la vista gorda a la política democrática participativa.

 

   Como se puede creer una ficción política, y la recuperación del complicado idioma guanche, con aportes del bereber del continente, va a hablarse en las islas, eso es engañarse, una mentira que repetida miles de veces se convierte en verdad, como dijo el ministro nazi Goebbels, porque la gente se ve impulsada a abrazar el sucedáneo que les propone la política nacionalista.

 

   Hasta ahora nadie se ha referido a los aspectos no verbales de las clases de D. Pablo Delucas, que se pueden entender como una acción civilizadora de Marruecos, nación expansionista como todos sabemos, que trata de explorar y dominar el Noroeste africano, donde estamos ubicados, lo que rechaza la población  mayoritariamente y pone reparos y resistencia porque podría acabar anexionándose a Canarias, historia que está por escribirse.

 

   Las clases están enfocadas desde la dimensión del mito guanche, condicionando la política con subjetividades tendenciosas que confunden el guanchismo político con la política lingüística catalana y euscalduna, de forma mimética mezclan lengua y política, apariencia y esencia, embrollando, como si fuera lo mismo habas que judías. No sirven como referente político, hacen desconfiar y ahuyenta a los jóvenes que ven en el idioma guanche una hipótesis que no podrá resucitar su uso después de siglos, del que se sirven, entre otros, quienes tratan de reproducir una historia de amor patrio incondicional y  odio sistemático al español, contrariando la acción política de otros grupos soberanistas e independentistas  que aman la patria, que buscan la realización del ser humano y el derecho a la ciudadanía, sin tener que odiar a los españoles. El aprendizaje de palabras sueltas de guanche con préstamos del tamazigh marroquí y su gramática, favorece nuestra anexión a Marruecos y, a Coalición Canaria, no la independencia como quieren hacer creer intereses ajenos al pueblo. Nos embobece esa mezcla de realidad y ficción, ambigüedad que da confusión mental, difumina las huellas de lo político y lo social, desplazan estas fantasías la ocupación del Sahara que tenemos como experiencia y referencia.

 

    El que busque diferenciación lingüística que se consuele con aprender el silbo gomero, que es mucho más fácil y práctico, no divide ni sugestiona su práctica porque es parte viva de la nación canaria, dando cohesión social entre los individuos de nuestra colectividad, no muestra antagonismo con otras tendencias soberanistas, ni da motivos reivindicativos a nuestro vecino.

 

   Debemos tener presente que Canarias no es actor internacional, como Puerto Rico que después de su independencia de España, con el apoyo de algunos portorriqueños pro-yanquis, fue anexionado por su vecino los Estados Unidos de América, que además neo-colonializa  el resto de América Latina que había logrado la victoria definitiva sobre el imperio español bajo las ideas de libertad, igualdad y fraternidad que exaltó la Revolución francesa de 1789.

 

   Tenemos conciencia de que fue en lengua castellana con la que los próceres de Latino-américa: Bolívar, San Martín, Martí, etc., gestaron la independencia. Si se hubieran dedicado al estudio de los idiomas originarios: quechua, aimara, guaraní, etc., en lugar de luchar por el poder, por la independencia de Bolivia, Perú, Venezuela, etc., hoy seguirían siendo colonias españolas, estarían bajo su dominio, como los canarios distraídos que ocupan su mente y tiempo en el tamazigh vestido de guanche, lo que no da crédito político y desmoraliza a la izquierda.

 

   Damos por supuesto, que la independencia la traerá un nuevo liderazgo joven: a causa de la acción que estimula los antagonismos y contradicciones reales, la grave situación económica, el paro y la dominación, debido al caos intelectual y espiritual, ético, político y jurídico de la civilización colonialista (de ideología de extrema derecha que ha situado fuera de la Ley a España, está en el banquillo de los acusados); y no el guanchismo cubillista romántico, encallado en el discurso del nosotros en referencia a lo racial, favoreciendo a la folclórica Coalición Canaria, no a la clase trabajadora que trata de liberarse de sus explotadores, representa al dependentismo que arrastró tras de sí al Partido Nacionalista Canario, a Alternativa Nacionalista Canaria y por último asalta al Congreso Nacional de Canarias que revive el delirio lingüístico y la ONU, fantasía política que nos mantiene en la pesadilla colonial que arrebata nuestros derechos y libertades.

 

¡No podemos saber cuál es la verdad que pone en marcha el proceso de independencia sin un reflejo cabal de la realidad!  Como decía un oyente: el que vive de ilusiones muere de desengaño.

 

   La dialéctica se erige como el principal instrumento para la interpretación teórica de la realidad, con el objetivo de que su modificación positiva reduzca la brecha entre ricos y pobres, dando soluciones a los problemas ecológicos y ambientales, elevando el bienestar social, combatiendo la corrupción, estimulando el consumo interno y siendo participe de las verdaderas inquietudes del pueblo y no de una predica fantástica de cierta gente embrutecida, resentida y, envenenada por el odio, incapaz de emanciparnos,  de hacer política, de progresar.

 

   Exhortamos a los jóvenes a adaptarse a los necesarios cambios político-sociales para no dejar a “Podemos” el campo libre con su ambigüedad sobre el derecho a decidir.

 

 

Agrupación Rambla S/C