Artículos recuperados, de tanta o más actualidad hoy que antaño
cuando fueron escritos.
"BIENVENIDOS,
HERMANOS"
Francisco
García-Talavera *
[¿Sabéis
lo que os digo? Los nativos cuanto más incultos y analfabetos se mantengan,
mejor. Menos lata darán si no se enteran de que son una nación con cultura e
identidad propias. Hay que evitar a toda costa que "las Canarias" se
nos vayan de las manos como ya lo hicieron todas las demás colonias. Contra
independencia, dependencia. La mejor manera es anular todos los sectores
comerciales e industriales en los que ellos destacan y con los que pueden ser
autónomos. ¡Golpe de muerte a la pesca, a la agricultura, a los puertos
francos, a la industria tabaquera, al medio ambiente...!]
Estamos
nerviosos, nos llega nuestro tío Pedro con su mujer y sus hijos, a los que no
conocemos, con ánimo de quedarse definitivamente. El avión de Venezuela está
a punto de aterrizar.
Transcurren
los minutos y con el corazón en un puño esperamos verlos aparecer. Mientras,
los recuerdos..., la mayoría tristes, desfilan apresuradamente. Eran tiempos
difíciles. Aún me parece verlo, con lágrimas en los ojos, despedirse de
nosotros, de su tierra. Las circunstancias le obligaron. No había otra salida,
o nos moríamos de hambre.
La
escena se repite y lo viene haciendo cada vez con mayor frecuencia en los últimos
meses. Es época de vacas flacas. Se acabó el maná venezolano. Pedro, como
tantos otros canarios, retorna a su Patria, la nuestra, después de haberse
dejado la piel en un país que lo acogió con los brazos abiertos.
En
las últimas fechas se viene comentando, sobre todo desde instancias oficiales,
el gran "problema" que se avecina con la llegada masiva de miles de
canarios que regresan de Venezuela. Se han llegado a facilitar cifras concretas:
veintitrés mil para unos, treinta mil para otros. Por supuesto que quienes
comentan esas cifras lo hacen con la sensación, al menos, de preocupación por
cómo y dónde se va a colocar esa gente, con la escasez de trabajo y viviendas
que hay en estos momentos... Desagradecidos es lo menos que se les puede llamar
a los que así piensan y se manifiestan. ¿O es que no se dan cuenta que son
nuestros hermanos, tíos, primos, abuelos, que emigraron porque se vieron
obligados a ello, ya que en esta desgraciada colonia no había infraestructura
económica y social que lo impidiera y porque en estas desafortunadas Islas la
"madre patria", lo que ha venido haciendo desde la conquista es
explotarlas y sacar la mejor tajada posible? De manera que no podemos acoger a
nuestros hermanos que, dicho sea de paso, nos ayudaron a mantenernos en los años
difíciles con los bolívares que nos enviaban y, sin embargo, nos bajamos los
pantalones ante los cientos de miles de intrusos que nos invaden. ¿Pero es que
no somos capaces de darnos cuenta? Nuestro pueblo agoniza y aquí no pasa nada.
Nos quieren fagocitar, engullir, disolver, eliminar y nosotros aún nos lo
pensamos para decir ¡Bienvenidos hermanos!
Ya
en su tierra, Pedro, al poco tiempo y de casualidad escuchó:
¿Sabéis
lo que os digo? Los nativos cuanto más incultos y analfabetos se mantengan,
mejor. Menos lata darán si no se enteran de que son una nación con cultura e
identidad propias. Hay que evitar a toda costa que "las Canarias" se
nos vayan de las manos como ya lo hicieron todas las demás. Contra
independencia, dependencia. La mejor manera es anular todos los sectores
comerciales e industriales en los que ellos destacan y con los que pueden ser
autónomos. ¡Golpe de muerte a la pesca, a la agricultura, a los puertos
francos, a la industria tabaquera, al medio ambiente...! ¡Oye, que tampoco se
desarrollen las energías alternativas, pues perjudican a Endesa! Señores,
estamos de enhorabuena, porque todos estos objetivos se han conseguido o están
a punto de liquidarse. Los canarios nos importan un bledo, pero vamos ahora a
hacerles creer a esos africanos que son europeos para ver si así nos dan menos
lata. En cualquier caso, papá Sam y mamá OTAN nos han recomendado, mejor, nos
han advertido, que de ninguna manera dejemos libre a un territorio tan estratégico
que, además, está destinado a ser el solarium de Europa y, por lo tanto, no
interesa que allí se desarrolle algo más que no sea el turismo. Pero oiga, eso
sí, todo controlado. Nada de empresas autóctonas. El capital no debe quedarse
en las Islas. Significaría desarrollo e independencia y eso es malo. Va contra
nuestros intereses, pues tienen que ser ellos los que nos limpien y sirvan. Además,
fíjate si son ignorantes estos canarios, que les hemos creado dos o tres focos
de tensión y se están vapuleando entre ellos, pleito va pleito viene. Los muy
zoquetes, pero, ¿qué se puede esperar de esos moros...? Aunque no conviene
decirlo muy alto, no sea que se den cuenta de que están vendidos y de que
fuimos nosotros los encargados de ello. Pobrecitos canarios, peleándose entre
hermanos por chorradas, sin darse cuenta de lo que se les viene encima... ¡Ya
son nuestros!
* Publicado en 1989.
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