Jerónimo Saavedra, arrebato de sinceridad
Quintín Ortiz Navarro *
Gracias por ese arrebato de sinceridad, señor oportunista de la política; (¿qué viene a ser si no un cargo no electo y de duplicadas competencias como es el denominado Diputado del Común, sino un oportunismo político por vayan ustedes a saber mediante que anomalía de la democracia se han inventado en España, con aforamiento incluido?)
Por su declaración pública viene a parecer un gesto noble, pero en realidad viene a reconocer su vileza y las de todos aquellos que participaron en el acto más infame, tramposo y ruin de nuestra historia colonial y del engrosamiento del expediente de los antecedentes penales de España. Viene también a confirmar:
RIMERO: que España no es país demócrata, porque algo tan fundamental para el ajuste a sus principios, es inminente y obligado que algo tan significativo como un Estatuto de Autonomía, se precisa un acto eminentemente democrático como es un referéndum. No voy a entrar en el otro fraude de la constitución española que encima no fue sometida a referéndum sino a plebiscito, que no es lo mismo. Pero por lo menos ahí hubo una consulta plebiscitaria a modo de engaño, pero es que para el EEAA los canarios no tuvimos ni eso.
SEGUNDO: confirma también que en lo más perverso, se anexiona Canarias a España mediante la ley del embudo y contra el derecho público internacional e ignorando la voluntad de una población, puesto que lo procedente era ajustarse al protocolo de la Descolonización y a las resoluciones de las Naciones Unidas de las que España es estado firmante y compromisario, ¡mínimamente!, e ignorando o haciendo caso omiso deliberadamente (bien lo manifiesta aquí Saavedra) sobre el principio emergente de "extraterritorialidad" que ya se contemplaba desde después de la Segunda Guerra Mundial para aquellos países en régimen colonial como era el caso de Canarias y por conculcación a ese derecho aún lo es, y obviando el binomio " población territorio".
TERCERO: confirmar que la Españolidad de Canarias es un fraude y una de las grandes mentiras del siglo XX que pronto engrosará los libros de historia, pero no solo por la inclusión forzada y por la vía directa en el art. 143 de su Constitución, sino por todo lo que ello representa, incluido lo que nos vincula todo lo reflejado en el Estatuto de Autonomía o miniconstitución ¡y su misma constitución!, si acaso emulando las maniobras políticas del totalitarismo y del absolutismo de todo para el pueblo pero sin el pueblo, incluidas las miserias y las mentiras como el Pacto de Calatayud.
CUARTO: La ratificación de que España en sí es un fraude al incluirnos de forma fraudulenta en su mapa político de las autonomías, en un país balcanizado e inconsistente porque con respecto a nuestro Archipiélago nos coloca en un limbo jurídico entre Archipiélago de Estado y Estado Archipielágico pero con carátula de CCAA, un país mentiroso con la historia y con el pueblo canario, un país estafador con la historia de las democracias y con la humanidad, y un país delincuente porque infringe la legislación internacional y su mismo derecho interno con tal de mantener la españolidad de Canarias a la fuerza al principio, y mediante las argucias y la picaresca en subterfugio jurídico que solo viene avalado por el contubernio de un tácito pacto colonial, y la cobardía de un pueblo engañado después.
QUINTO: Que impulsados a cometer tremendo delito político, se viene a reconocer, los miedos y el miedo a la pérdida de los privilegios que esta oligarquía política heredera del anterior régimen y del colonialismo en detrimento del legítimo destino de una Nación Incipiente escamoteando a la mismísima democracia y demonizando lo más sagrado de cualquier pueblo: su independencia.
SEXTO: de lógica era de comprender que para actuar así existía legitimidad y razón en la Descolonización y el Independentismo, donde había y hay más derecho, y no en la anexión unilateral a otro país de otro continente contrario al derecho público internacional.
SÉPTIMO: España, país tramposo, y sus servicios de información, tenían sobrado conocimiento de que el independentismo iba a prosperar por derecho natural y que la misma abstención iba avalar, demostrando la manipulación del derecho al voto y la agobiante insistencia a participar en elecciones nacionales españolas en reglas de juego con cartas marcadas, anulando nuestra personalidad soberana, nuestras posibilidades para la descolonización y vivir en la verdad.
OCTAVO: y lo que es más grave, que aún sabiendo y reconociendo estos delitos políticos después de haber destruido el carácter identitario de las nuevas generaciones, trascurrido ya 35 años, no hagan autocrítica y propósitos de enmiendas, no pidan perdón y reconozcan tanto mal causado y restituyan la verdad y reivindiquen el establecimiento del estatus de Estado Archipielágico que por derecho nos corresponde, para que así puedan aliviar sus cargos de conciencia, si acaso no sea en el infierno
NOVENO: solo con la verdad y pidan la Descolonización y la independencia por derecho, se les concederá el perdón..., por referéndum.
DÉCIMO: Viene a confirmar, que, por ejemplo, efemérides como el día de Canarias y sus eventos de propaganda son una estafa, y me deja con la conciencia tranquila por no celebrarlo puesto que lo que ha sido creado para la mentira y por la mentira, no debe ser festejado ni enarbolar la bandera bordada por y para la mentira; porque las mentiras y las estafas se condenan, no se celebran.