Crónica del XX Homenaje al Mencey Bentor

Tigayga - Mirador del Lance

Amaneció fresco, el día nublado. En la plaza de Tigaiga, en torno a las 10:30 h., se formó un nutrido grupo entre los habituales y  aquellos que se sumaban por primera vez, rompiendo el silencio de las laderas al ritmo de tajarastes con flautas, tambores y chácaras, acompañadas de algún toque de bucio al que replicaban a su vez los que desde lo alto, junto a Bentor esperaban su llegada. Si agradable fue verles llegar, más agradable, si cabe, fue darse cuenta que tanto entre los que llegaban como entre los que arriba esperaban, había una gran cantidad de caras nuevas...

Como es costumbre tomó la palabra en nombre del colectivo Auchón Guanil, Isidro R. Cedrés, para aprovechar a explicar a los allí presentes tanto lo qué encierra la figura del joven Mencey Bentor como el acto de su suicidio y el por qué de nuestra presencia y celebración de ese acto que cumple XX años.

Los queridos compatriotas Domingo Isora y Gregorio Tanausu fueron las personas distinguidas este año con la entrega de los ''banots'', obra de Juan Manuel Figueras, por parte del Auchón. Los homenajeados tuvieron unas palabras de agradecimiento por el homenaje recibido así como los simbólicos banots que ocuparán un lugar destacada en sus respectivas viviendas. Gregorio Tanausú rubricó su agradecimiento dando lectura al poema ''Mi Patria'', de Secundino Delgado…

Isidro Cedrés hizo mención a la notada ausencia de dos personas incondicionales de éste evento, como son Eduardo García y Álvaro Morera, y a los motivos por los que su presencia no fuera posible, y leyendo el mensaje y felicitaciones que enviara a sus compatriotas homenajeados se cierra el acto con unos calurosos aplausos.

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El Auchón arranca por tajarastes, que es seguido por una exhibición del noble juego del palo con la valiosa presencia de Pedro González entre los jugadores.

Se invitó y se consiguió que aceptaran la invitación a la comida en ''Los Pinos'' a una serie de personas que, por vergüenza, al no haber traído comida por desconocimiento, se resistían a participar; un buen ejemplo de la generosidad en el compartir que nos caracteriza como pueblo.

En la despedida se expresó el deseo de que la próxima edición a celebrar, como es costumbre, el último domingo de Julio de de 2016 la celebremos en libertad, en una Canarias descolonizada e independiente,  y en compañía de los presentes, de los que en esta ocasión no pudieron participar y, desde luego, con las nuevas incorporaciones, en particular de jóvenes, que son la garantía de continuidad y perseverancia de nuestra cultura e identidad…